Los abrazos desencadenan la liberación de oxitocina con una cascada de beneficios emocionales y físicos
Los abrazos son una poderosa expresión de confianza y afecto. También son sorprendentemente impactantes gracias a su efecto sobre nuestras emociones a través de la liberación de oxitocina. Aquí hay 10 razones por las que necesitas un abrazo todos los días.
1. Los abrazos pueden ayudar a tratar el insomnio y la ansiedad
La falta de sueño puede crear una larga lista de problemas de salud secundarios que pueden perturbar el funcionamiento normal del cuerpo y aumentar el riesgo de problemas médicos graves como ataques cardíacos. Los estudios han encontrado que dormir con mantas pesadas ayuda al insomnio y a la ansiedad.
Las mantas con peso están llenas de bolitas de plástico y pesan entre 15 y 30 libras. Funcionan al relajar el sistema nervioso por medio de la presión adicional —una forma de terapia de contacto profundo. La presión del tacto profundo es el tipo de presión superficial que se siente cuando tocamos, sostenemos o acariciamos a otros, o cuando acariciamos animales.
Básicamente, la manta se amolda al cuerpo como un abrazo cálido. El cuerpo responde como si estuviera recibiendo contacto físico, y el cerebro libera serotonina, haciendo que el sistema nervioso se relaje. Con el sistema nervioso relajado el cuerpo es capaz de caer en un sueño más profundo y reparador.
Un estudio del 2008 publicado en la revista Occupational Therapy in Mental Health mostró que las mantas ponderadas ofrecían una terapia segura y efectiva para disminuir la ansiedad en los pacientes. Estos resultados fueron confirmados en un estudio de 2012 publicado en Australasian Psychiatry, la cual indicó que las mantas con peso disminuyeron exitosamente la angustia y los signos visibles de ansiedad.
2. Los abrazos reducen el miedo a la mortalidad
Como seres humanos, todos sabemos que vamos a morir algún día. Esto puede ser muy atemorizante para las personas con baja autoestima que sienten que no están viviendo vidas significativas.
En una serie de estudios sobre los miedos y la autoestima publicados en la revista Psychological Science, los investigadores demostraron que los abrazos y el contacto reducen significativamente el miedo a la muerte y la mortalidad.
En un estudio en particular, los participantes fueron abordados mientras caminaban a través de un campus universitario y entregaron un cuestionario para que lo llenaran. Algunos de los participantes recibieron un contacto ligero de palma abierta por parte del investigador cuando se les entregaron los formularios, mientras que a otros no se les dio ninguna interacción física.
Los resultados mostraron que los participantes con baja autoestima, que recibieron el contacto físico, reportaron menos ansiedad de muerte en el cuestionario que aquellos que no habían sido tocados.
El contacto también parecía actuar como un amortiguador contra la alienación social. Los participantes con baja autoestima no demostraron ninguna disminución notable en la conexión social después de que se les recordara la muerte, sino sólo si habían recibido un contacto ligero.
Esta investigación sugiere que el tacto juega un papel benéfico al proporcionar consuelo y tranquilidad a las personas que están deprimidas y al lidiar con el pensamiento de su mortalidad.
3. Los abrazos pueden disminuir los antojos de comida
A menudo comemos por nuestras emociones, en lugar de por el hambre. De hecho, el circuito cerebral que controla la alimentación se superpone con el circuito cerebral que controla las relaciones interpersonales.
Comer envía oxitocina en las áreas del cerebro ricas en dopamina, haciéndonos sentir placer y relajación. Esto ayuda a explicar por qué comer puede ser reconfortante y placentero. Esto también explica por qué nos atrae la alimentación emocional; imita los mismos sentimientos de comodidad que obtenemos de los amigos cercanos y la familia.
Pero la oxitocina también se libera mediante el contacto físico y las interacciones de apoyo con otras personas. La liberación de oxitocina provoca sentimientos de confianza y generosidad. También reduce el estrés y la ansiedad.
Por lo tanto, mejorar nuestras relaciones puede tener un impacto en la pérdida de peso. Al aumentar la calidad y la cercanía de nuestras relaciones, aumentamos la cantidad de oxitocina en nuestro sistema y eso reduce los antojos de comida.
4. Los abrazos aumentan la unión y fortalecen las relaciones
La experta en relaciones, la Dra. Pam Spurr, señala que el simple acto de abrazar puede ayudar mucho a mantener las relaciones saludables y felices.
En el caso de las parejas, los abrazos ayudan a cerrar la brecha entre lo que sucede en el dormitorio y lo que sucede en la vida diaria. Mantiene la intimidad que se produce al hacer el amor y asegura que las parejas se sientan emocionalmente conectadas entre sí.
Un estudio reportado en el Daily Mail sugirió que los abrazos son más importantes para la felicidad de una pareja que el sexo. El artículo señala que los abrazos proporcionan muchos beneficios, incluyendo la estimulación de nuestros centros táctiles y olfativos (la parte de nuestro cerebro responsable del olfato). Por eso, el olfato y el tacto de nuestra pareja nos hacen sentir amados y cuidados.
Los abrazos también proporcionan una forma de comunicación separada del sexo, que permite a las parejas sentirse cerca sin agotar su energía. Cuando las parejas se tocan, bajan la guardia y sienten amor y aceptación hacia su pareja. Tocarse y abrazarse es la mejor manera de mantener un fuerte vínculo y conexión emocional.
5. Los abrazos mejoran la autoestima
Los abrazos aumentan la autoestima, especialmente en los niños. El tacto y el olfato son los dos sentidos más importantes en los bebés, y un bebé reconoce a su padre o madre por el tacto. Desde el momento en que nacemos, el tacto de nuestra familia nos muestra que somos especiales y amados.
El cerebro de un niño pequeño necesita mucha estimulación para crecer y desarrollarse. El tacto físico es uno de los estímulos más importantes que pueden facilitar el desarrollo del niño.
Esto se demuestra en las observaciones de los niños de los orfanatos de Europa del Este que tuvieron un contacto físico limitado. Por lo general, sufrían de un retraso en el crecimiento y en el desarrollo cognitivo.
Los investigadores han encontrado que cuando los niños institucionalizados recibieron un promedio de 20 minutos de contacto físico al día durante 10 semanas, posteriormente obtuvieron una puntuación más alta en las evaluaciones de desarrollo.
Esta asociación entre la autoestima y el tacto permanece incrustada en nuestro sistema nervioso cuando somos adultos. Los abrazos nos recuerdan el afecto que recibimos cuando éramos bebés y, por lo tanto, nos conectan con nuestra capacidad de amor propio.
6. Los abrazos hacen que los músculos se relajen
Si alguna vez te han dado un masaje, sabes lo relajado que te puede hacer sentir. No se trata sólo de una sensación mental: el masaje hace que los músculos se aflojen, que el ritmo cardíaco se reduzca y que los niveles de cortisol bajen. Una vez que esto ocurre, su cuerpo es capaz de relajarse y recargarse, lo que resulta en un estado emocional más feliz y un sistema inmunológico más elevado.
La oxitocina, que se libera en el torrente sanguíneo mientras se abraza, ayuda al cuerpo a reparar los músculos más rápidamente. Lo hace permitiendo que la grasa del cuerpo se convierta en energía y se utilice para la reparación muscular. Los niveles saludables de oxitocina conducen a una mejor conversión de energía y, por lo tanto, a una mejor reparación y crecimiento muscular.
7. Los abrazos aumentan la empatía y la comprensión
La oxitocina también tiene otros beneficios. Cuando la oxitocina se libera en el cuerpo, produce una sensación de empatía.
Un estudio realizado por Jorge A. Barraza y Paul J. Zak probó los efectos de la oxitocina en 145 estudiantes universitarios de la Universidad de California-Los Angeles. Los estudiantes fueron divididos al azar en tres grupos; un grupo vio un video emocional y jugó un juego de ultimátum que consistía en ofrecerse a compartir una suma fija de dinero; el segundo grupo vio un video de control y jugó un juego de ultimátum, y el tercer grupo sólo vio un video emocional.
Los resultados mostraron que ver el video emocional aumentó los niveles de oxitocina en un 47 por ciento. En consecuencia, los participantes experimentaron un cambio en los niveles de empatía, como se demostró en una mayor generosidad durante el juego de ultimátum.
El estudio ilustró cómo la oxitocina aumenta la empatía, incluso entre extraños totales. Con sólo abrazar a alguien, la oxitocina se libera en el cerebro, desencadenando una sensación de empatía en nuestro cerebro.
8. Los abrazos aumentan la felicidad
Un estudio de la UCLA de 236 personas en 2011 mostró que los niveles elevados de oxitocina promueven el optimismo y la autoestima.
A medida que abrazamos y liberamos oxitocina, nuestra «escala de felicidad» se eleva. De hecho, los estudios estiman que el 50 por ciento de nuestra felicidad es genética, el 10 por ciento es afectada por nuestro ambiente, y el cuarenta por ciento es determinada por la forma en que somos nutridos.
En un estudio realizado en la Universidad Estatal de Pennsylvania, los estudiantes fueron divididos en dos grupos. El primer grupo recibió instrucciones de dar o recibir un mínimo de cinco abrazos al día durante el curso de cuatro semanas. Tenían que abrazar a tantas personas diferentes como fuera posible y registrar los detalles. Al segundo grupo, el grupo de control fue instruido para que registrara el número de horas que leían cada día, durante cuatro semanas.
Al final de las cuatro semanas, el grupo de abrazos había abrazado un promedio de 49 veces cada uno y reportó estar mucho más feliz. No es sorprendente que el grupo de lectura no reportara ningún cambio.
9. Los abrazos son excelentes para su vida sexual
Investigadores de la Universidad de Toronto Mississauga probaron la correlación entre el comportamiento afectivo después del sexo (besar, abrazar y hablar) y la satisfacción sexual y de la relación. El estudio de dos partes, publicado en la revista Archives of Sexual Behavior (Archivos de Conducta Sexual), utilizó una encuesta en línea de 335 individuos y una encuesta de 21 días de 101 parejas.
En la encuesta en línea, los participantes reportaron que en promedio se involucraban en comportamientos afectivos después de tener relaciones sexuales por un período de aproximadamente 15 minutos. A las parejas del segundo estudio se les pidió que se abrazaran durante más tiempo que este período de tiempo.
El estudio concluyó que las parejas que pasaron más tiempo juntas se sintieron más satisfechas con su vida sexual y con su relación. Este nivel de satisfacción se mantuvo consistentemente más alto, incluso tres meses después de la encuesta original, lo que indica que tomar tiempo para compartir la intimidad después del sexo reafirma el vínculo emocional y sexual entre una pareja y lo fortalece.
10. Los abrazos nos enseñan a dar y recibir
El abrazo es un acto recíproco; damos y recibimos. Al abrazar, reconocemos que hay un valor igual en dar y ser receptivo a la comodidad y el calor.
Los abrazos nos muestran que el amor fluye en ambos sentidos. Cuando abrazamos a alguien nos abrimos a su campo de energía y construimos una relación de confianza.
Virginia Satir, una famosa psicóloga, dijo una vez que necesitamos cuatro abrazos al día para sobrevivir, ocho para el mantenimiento y 12 para crecer. Ahora que tienes la prueba científica de todos los increíbles beneficios que puede proporcionar el abrazarse —¡No demores en comenzar a abrazar hoy mismo!
Este artículo fue publicado por primera vez en NaturallySavvy.com
A continuación
Conoce a uno de «Los Valientes», un investigador que logró comprobar la sustracción forzada de órganos a prisioneros de conciencia en China
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
