Dos policías recibieron impactos de bala y otro fue herido con un arma cortopunzante en Brooklyn el 3 de junio, los hechos ocurrieron durante una confrontación violenta con un sospechoso que portaba un cuchillo en horas de la noche, dijo el Departamento de Policía de Nueva York.
En una conferencia de prensa llevada a cabo el miércoles, el comisionado de policía de Nueva York, Dermot Shea, dijo que había visitado el Hospital del Condado de Kings para ver a las víctimas y que se espera que se recuperen por completo.
Shea dijo que el incidente tuvo lugar alrededor de las 11:45 p.m., casi cuatro horas después de las 8 p.m., horario en el que se determinó que daría comienzo el toque de queda para calmar los disturbios tras las protestas por la muerte de George Floyd en Minnesota.
El comisionado dijo que dos agentes de policía fueron asignados en el recinto 70, a un puesto anti saqueo para evitar que la gente irrumpiera en las tiendas. Las imágenes de vídeo vigilancia muestran a un hombre «casualmente» caminar hacia los oficiales en la intersección de Church Avenue, cerca de Flatbush Avenue, antes de sacar un cuchillo y apuñalar a un oficial en el cuello, causando una herida que por poco afecta una arteria.
«Aproximadamente al mismo tiempo, entre una y dos cuadras de distancia, un sargento uniformado y un oficial de policía, al escuchar disparos que parecían provenir de esa escena inicial, respondieron», dijo Shea.
Cuando el sargento y el oficial de policía llegaron al lugar, encontraron al sospechoso con una pistola en la mano, que se cree que pertenecía a uno de los oficiales.
Según el New York Post, el oficial y el sospechoso lucharon por el arma, que se disparó, impactando a un oficial en la mano y al otro en el brazo. El sargento disparó contra el sospechoso, quien fue puesto bajo custodia policial y trasladado al Hospital del Condado de Kings en estado grave.
Shea dijo que los miembros del servicio habían recuperado 22 casquillos de la escena «caótica», así como un cuchillo, y que la policía está investigando el asunto, señalando que el ataque no parecía haber sido provocado. «No puedo agradecer lo suficiente al personal de este hospital por lo que hacen, no solo hoy sino todos los días cuidando a nuestros oficiales», agregó.
El alcalde Bill de Blasio se dirigió al hospital para visitar a los oficiales, según el Post.
El ataque del miércoles se produce poco después de que un sargento de policía del distrito 44 fue atropellado en el Bronx por un conductor y huyó durante la noche, a principios de esta semana. Shea dijo que todavía está en cuidados críticos pero que se está recuperando lentamente.
Las protestas en Nueva York por la muerte de George Floyd se volvieron caóticas el lunes, solo unas horas después de que el gobernador Andrew Cuomo y de Blasio declararan un toque de queda en toda la ciudad desde las 11 p.m. hasta las 5 a.m. Desde entonces el toque de queda se extendió hasta la próxima semana.
Mientras que los grupos de manifestantes pacíficos han seguido marchando por las calles dentro de las restricciones del toque de queda, miles de personas más lo han desafiado, y los manifestantes a menudo se han vuelto contra la policía, según Shea, quien dijo a la CBS el lunes que varios oficiales han sido objeto de violentos ataques.
«Hemos tenido agentes tratando de ser quemados vivos en automóviles, hemos tenido agentes bloqueados con barricadas en las carreteras, rodeados y luego atacados y sacados de los automóviles», dijo Shea.
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