El alcalde de la ciudad de Nueva York, Bill de Blasio, anunció el martes la nueva política de calificación del Departamento de Educación, que se formuló debido al cierre de las escuelas a causa de la pandemia. La nueva política, según dijo, lograría un equilibrio entre las normas y la flexibilidad.
«Hoy anunciamos una nueva política de calificación para el semestre actual, que se ajusta al momento en que estamos AHORA», dijo de Blasio en un tweet, caracterizando la nueva política como «una que mantiene nuestros estándares en su lugar, pero agrega flexibilidad debido a la situación que están pasando los estudiantes y las familias».
El Departamento de Educación anunció por separado la nueva política de calificaciones, señalando que entraría en vigencia solo por el resto del año escolar 2019-20, y que «ningún estudiante recibirá una calificación reprobatoria».
El alcalde dijo que mantener los estándares académicos ha sido un desafío, en vista de que los 1,1 millones de niños de escuelas públicas de la ciudad de Nueva York se vieron obligados a hacer una transición abrupta hacia la educación a distancia, al enfrentar «un momento de crisis y trauma para las familias».
«Tenemos que ayudar a los estudiantes que tienen dificultades para ponerse al día», dijo de Blasio, y agregó que los estudiantes obtendrían asistencia en función de sus necesidades.
“Muchos niños necesitarán ayuda para ponerse al día después de que termine esta crisis. Algunos solo necesitarán un poco de ayuda, otros necesitarán mucha. Estaremos emparejando a cada estudiante con programas de apoyo este verano y hasta el otoño para volver a la normalidad», dijo.
Dijo que un cambio clave para el jardín de infantes hasta el quinto grado sería un cambio del régimen de calificación regular a solo dos estándares: «cumplir con los estándares» o «necesita mejorar».
«Los estudiantes serán evaluados en función de los proyectos escolares, las tareas y la escritura», dijo de Blasio, y agregó: «Cualquier estudiante que tenga dificultades obtendrá la ayuda que necesita para ponerse al día».
Diciendo que la escuela media «ya es un momento difícil», incluso sin el desafío añadido de la pandemia, de Blasio comentó que este grupo de estudiantes vería un cambio a tres grados: «cumple con los estándares», «necesita mejorar» y «curso en progreso». Esta tercera categoría está destinada a los estudiantes que necesitan más tiempo para terminar su trabajo de curso durante el verano, para lo cual el alcalde dijo que se harían los arreglos necesarios.
«Las calificaciones de la escuela secundaria continuarán, pero con más flexibilidad. Si los estudiantes aprueban una clase y obtienen créditos, pueden decidir si tomar una nota de letra o un simple «pase», que no afectará su GPA (promedio de calificaciones)», dijo.
Si bien el cierre de escuelas y las medidas de distanciamiento social impiden las ceremonias de graduación tradicionales, cada escuela llevará a cabo, lo que de Blasio denominó «uno de los momentos decisivos de la vida», a su manera.
«No importa qué, también organizaremos una gran graduación virtual en toda la ciudad para la clase de 2020», dijo, y dijo por separado a los periodistas que «tal vez en el futuro, tal vez tengamos la suerte de que algunas reuniones puedan comenzar a ocurrir».
El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, en una sesión informativa hecha el martes en Siracusa, informó sobre 335 nuevas muertes por COVID-19 ocurridas en todo el estado y dijo que se tomaría una decisión, finalizando la semana, sobre cuándo reabrirían las escuelas.
«Trescientas treinta y cinco personas fallecieron ayer por este virus en este estado, es decir, 335 familias», dijo. “Ves que este número se está reduciendo básicamente. Pero no a un ritmo tremendo. Y lo único tremendo es la cantidad de neoyorquinos que aún fallecen”.
Cuomo dijo que, si bien la reapertura es el objetivo, el estado debe hacerlo «sin infectar a más personas, ni abrumar al sistema hospitalario».
«Todo el mundo habla de la reapertura… lo entiendo. No puedes sostener el cierre, la economía no puede sostenerlo, las familias individuales no pueden sostenerlo. No podemos sostenerlo a nivel personal», dijo. «Pero no debería ser una discusión filosófica, no debería serlo porque la gente está protestando. Es una discusión objetiva sobre la reapertura».
El gobernador dijo anteriormente que las regiones del norte del estado podrían reanudar la vida normal a mediados de mayo, pero no sugirió levantar las restricciones en la ciudad de Nueva York, por el momento, y agregó que una reapertura más amplia de la parte sur del estado podría ser «problemática».
Haciéndose eco de las declaraciones anteriores, de que la reapertura se realizaría en base a un análisis regional de las condiciones, Cuomo prosiguió en un tweet: “Hemos estudiado planes de reapertura en todo el mundo y hemos hablado con expertos mundiales en salud. Hemos ideado principios factuales basados en datos y hechos para guiarnos en la reapertura. Abordaremos esto a nivel regional. Es la única cosa inteligente que se puede hacer».
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