Cientos de respiradores de propiedad de la ciudad de Nueva York como parte de su reserva de emergencia fueron subastados hace al menos cinco años, bajo la administración del alcalde Bill de Blasio, según una investigación.
Los respiradores, y «un suministro de mascarillas», fueron adquiridos por la ciudad en 2006 bajo el mandato del entonces alcalde Michael Bloomberg, como una medida para preparar a la ciudad de Nueva York para hacer frente a una posible pandemia, similar a la del virus del PCCh (Partido Comunista Chino).
Sin embargo, los respiradores se subastaron más tarde porque el departamento de salud «no podía costear su mantenimiento» cuando se averiaron, según una investigación de ProPublica.
En el momento de la compra había surgido una nueva cepa de gripe en Asia, señala el informe citando un reporte de 2006 del Departamento de Salud e Higiene Mental de la ciudad de Nueva York, que afirmaba que la ciudad debería tener a mano miles de respiradores adicionales para tratar a los pacientes en caso de que surgiera una pandemia.
«Dado que la pandemia se generalizaría en Estados Unidos, es posible que no se dispongan suministros de la Reserva Estratégica Nacional federal y que haya que recurrir a los depósitos locales», indicaba el reporte.
Al respecto reveló que la ciudad de Nueva York adquirió entonces 500 respiradores pero los subastó en algún momento antes de 2016 porque no podía costear el mantenimiento de las máquinas. El modelo luego dejó de producirse después de 2009.
Apoye nuestro periodismo independiente donando un «café» para el equipo.
La ciudad de Nueva York también planeaba adquirir 1,1 millones de mascarillas faciales N95 para usarlas en alguna pandemia. Sin embargo, terminó comprando solo 216,000 debido a la reducción del financiamiento. El departamento dijo que las mascarillas «eventualmente expiraron todas» y se volvió «prohibitivo en cuanto a costo reemplazarlas en cualquier cantidad significativa».
La noticia se dio a conocer mientras la ciudad lucha contra la escasez de suministros médicos críticos para los socorristas y trabajadores de salud en medio de una pandemia que ha causado hasta el momento del artículo más de 4000 muertes tan solo en la ciudad de Nueva York. Las cifras corresponden a las de un mapa de seguimiento de la Universidad Johns Hopkins, que recopila datos oficiales del gobierno.
El estado de Nueva York se ha convertido en el epicentro del coronavirus en Estados Unidos, con un total de 5489 muertes a nivel local. De las casi 400,000 infecciones registradas en todo el país, más de un tercio de ellas corresponden al estado de Nueva York.
El domingo, el vicepresidente Mike Pence anunció que los estados de Oregon y Washington han devuelto cientos de respiradores a la Reserva Estratégica Nacional para su distribución a los estados que han sido más afectados por el virus del PCCh.
«El estado de Oregon y el estado de Washington están liderando con el ejemplo», dijo Pence. «Oregon envió 140 respiradores a la ciudad de Nueva York. Ellos analizaron sus circunstancias y concluyeron que podían prescindir de estos en el momento en que los necesitaban».
La función de la Reserva Estratégica Nacional que forma parte de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) es complementar los suministros estatales y locales durante las emergencias de salud pública.
Ofreciendo un poco de «buenas noticias», De Blasio dijo el martes que el número de pacientes con el virus del PCCh que requieren respiradores ha «mejorado en los últimos días».
«La buena noticia es que nos da más tiempo», dijo el alcalde a los periodistas durante una rueda de prensa en la escuela PS 1 Alfred E. Smith en Chinatown. «Nos está dando la oportunidad de conseguir más respiradores».
El alcalde dijo que aproximadamente 830 pacientes de COVID-19 fueron intubados a través del sistema «Salud + Hospitales», lo que representa el 20 por ciento de la capacidad de atención médica de la ciudad.
«Tengo esperanzas, pero no sacaré conclusiones hasta que esté cien por ciento seguro», añadió De Blasio, instando a los residentes a cumplir con las órdenes de permanecer en casa y a seguir practicando el distanciamiento social para frenar la transmisión del virus.
«Quiero asegurarme de que nadie deje de distanciarse socialmente y de refugiarse en el lugar», dijo el alcalde.
Apoye nuestro periodismo independiente donando un «café» para el equipo.
A continuación:
Una paciente no puede encontrar un hospital que la acepte en Wuhan
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
