Con la visita de Xi a Corea del Norte, los regímenes comunistas se ayudan en las negociaciones con Estados Unidos

Por Nicole Hao
24 de junio de 2019 2:45 PM Actualizado: 24 de junio de 2019 2:45 PM

Análisis

Con gran fanfarria, el 20 de junio llegó a Pyongyang el mandatario chino Xi Jinping en una visita de Estado. El recibimiento incluyó un saludo de 21 disparos en el aeropuerto y decenas de miles de norcoreanos alineados a lo largo del camino para darle la bienvenida.

La visita marca la primera vez en 14 años que un líder chino aterriza en Corea del Norte. También convierte a Xi en el segundo jefe de Estado en llegar de visita, junto con el presidente surcoreano Moon Jae-in, quien fue en septiembre de 2018.

Pero luego de saludarse, Xi y el líder norcoreano Kim Jong Un no se abrazaron, ni se besaron en la mejilla, a diferencia de sus predecesores en 2005. Los líderes chinos y norcoreanos del pasado, siendo aliados comunistas, eran conocidos por mostrar excesivas señales de afecto. Pero no fue así con Xi y Kim.

De hecho, el viaje fue arreglado de apuro, y el régimen chino solo lo anunció públicamente el 17 de junio. ¿Por qué tenía tanto apuro el lado chino en convocar esta reunión?

El momento coincide con la pronta reunión de Xi y el presidente de EE. UU., Donald Trump, en la cumbre G20 de Japón, donde se prepararán para reiniciar las negociaciones comerciales. Fue el primer gesto positivo que dio esperanzas de resolución a la disputa comercial, luego de que las tensiones escalaron en mayo cuando Trump impuso un aumento de aranceles a las importaciones chinas. La administración de EE. UU. acusó al lado chino de incumplir compromisos previos hechos durante meses de charlas.

Mientras tanto, Corea del Norte está en un impasse similar con Estados Unidos luego de una cumbre fallida en Vietnam en febrero. Trump dijo esa vez que Kim insistió en que Estados Unidos levante las sanciones económicas, pero sin ofrecer compromisos suficientes de desnuclearización.

Por lo tanto, ambos lados tienen asuntos que necesitan resolver con Washington.

Pomposidad

Los dos Estados buscan entonces expresar una fuerte relación.

Según la transmisora estatal de China, CCTV, Xi le dijo a Kim el 20 de junio: «La característica esencial de la relación China-Corea del Norte es adherir al Estado socialista que está bajo el liderazgo del Partido Comunista».

Xi prometió cooperar con Corea del Norte y otros partidos relacionados para concretar la desnuclearización de la Península Coreana.

Según la prensa china, Kim dijo: «Corea del Norte quiere aprender más de China para promover nuestro desarrollo económico».

Kim también dio a entender un disgusto con Washington: «En torno al año pasado, Corea del Norte tomó muchas medidas positivas para evitar escalar la situación, y manejamos y controlamos la situación peninsular. Pero no hemos recibido una respuesta activa de las partes relevantes», según CCTV.

Es destacable que la agencia de noticias estatal de Corea del Norte no haya informado de tales detalles.

El periódico oficial de Corea del Norte, Rodong Sinmun, también publicó en la portada del 19 de junio, una editorial escrita por Xi, y la tradujo al coreano.

En el artículo, Xi elogiaba a Corea del Norte por moverse en la «dirección correcta» al resolver políticamente asuntos en la Península Coreana. Xi escribió que a China le gustaría idear un plan con Corea del Norte para concretar la paz permanente allí.

Xi permaneció en Corea del Norte hasta el 21 de junio. Él prometió más colaboración económica el 20 de junio: «[Corea del Norte y China] expandirán la cooperación en educación, salud, deportes, medios de comunicación, juventud y zonas rurales», según CCTV.

Necesidades de intercambio

La economía de Corea del Norte depende del comercio con China; es el socio comercial más grande del reino del ermitaño.

Pero al mismo tiempo, el régimen chino ha dependido históricamente del asunto de la desnuclearización como carta de negociación con Estados Unidos.

Xi y Kim se han reunido previamente en cuatro ocasiones; cada una de esas reuniones ocurrió antes o después de una reunión de Trump con Kim.

En marzo de 2018, luego de que Trump accedió a reunirse con Kim en mayo, Kim viajó a Beijing y se reunió con Xi por dos días. Esta fue la primera vez que Kim se reunió en persona con Xi.

Unos dos meses después, en mayo, Kim viajó a Dalian, una ciudad al noreste de China, para reunirse con Xi. Este viaje ocurrió antes de la primera cumbre Trump-Kim en Singapur.

Y en junio, Kim visitó a China otra vez luego de la reunión de Singapur. Algunos medios de comunicación informaron que Kim había buscado la ayuda de Xi para terminar con las sanciones de EE. UU. luego de concluir la cumbre.

En enero de 2019, Kim y su esposa Ri Sol-ju visitaron Beijing, no mucho antes de la segunda cumbre Trump-Kim en Vietnam.

El comentador de China Zhou Xiaohui escribió en la versión en idioma chino de La Gran Época el 20 de junio, que Xi probablemente hable con Kim sobre el plan de desnuclearización, el cual puede ser usado como carta de negociación en la cumbre G20 para obtener concesiones de Estados Unidos en la disputa comercial, tales como las actuales sanciones sobre el gigante tecnológico Huawei.

A cambio, China le proveería más ayuda económica a Corea del Norte, escribió Zhou.

Otros observadores han hecho predicciones similares.

«Xi, como todos los demás en Asia, está tratando de reposicionarse ante un Presidente estadounidense muy impredecible», le contó al New York Times Jonathan D. Pollack, un experto en China y Corea del Norte de la Institución Brookings.

«Si Xi no le puede decir algo a Trump sobre el comercio, eso sugeriría que su visita a Pyongyang no sirvió de nada».

Jenny Town, jefe de redacción del sitio estadounidense 38 North, le contó a la BBC que la visita de Xi podría tener algún «valor simbólico» justo antes de la cumbre del G20, agregando que era «más un bonus que un factor decisivo».

Pero el régimen chino ha tratado de negar tales lecturas. «En cuanto a la pregunta de si el presidente Xi usa la visita de Estado a Corea del Norte como una clase de ‘carta’ [para la reunión con Trump], solo puedo decir que están pensando de más», dijo Lu Kang, portavoz del Ministerio chino de Asuntos Exteriores, en una conferencia de prensa el 18 de junio.

***

Mira a continuación

¿Por qué China se comporta de forma contraria al resto del mundo?

Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando

¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.