Enfermera se reúne con madre adolescente que dejó a su bebé en una caja en el hospital, 12 años después

21 de septiembre de 2020 12:57 PM Actualizado: 21 de septiembre de 2020 1:17 PM

Los estudiantes a la edad de 15 años deben estar ocupados pensando en sus clases, actividades extracurriculares, amigos y su futuro. Pero algunos adolescentes tienen más cosas en qué pensar en la secundaria. Una chica de 15 años de Rockford, Illinois, llamada Cherish Coates tuvo un hijo del que se tuvo que encargar.

Al quedar embarazada sin saberlo en 2004, esta estudiante de segundo año, que vivía con sus abuelos, tuvo un día lleno de dolores agudos en el estómago. Antes de terminar la noche, dio a luz a su propio bebé sin ayuda en su dormitorio.

Sin saber qué hacer y demasiado asustada para decírselo a sus abuelos, Cherish se las arregló para cortar el cordón umbilical, y con la ayuda de su novio, llevó al bebé prematuro a la UCIN en el Hospital Sueco-Americano. El joven padre, aterrorizado, dejó al bebé, que pesaba 3 libras (aprox. 1 kg), en una caja de zapatos en el hospital con solo un corto mensaje.

(Cortesía de Cherish Adams Coates)
(Cortesía de Cherish Adams Coates)

«Escribimos una nota para decirles que queríamos que se llamara Allen Correy, que lo queríamos mucho, y que queríamos que tuviera el mejor futuro posible», recordó Cherish en «The Doctors«.

Cherish y su novio no tenían ni idea qué hacer después y sentían que no le podían contar a sus padres o abuelos lo que había sucedido, pero seguían visitando a su bebé. «Recuerdo que solo miraba lo hermoso y pequeño que era. Nunca antes había sostenido a un bebé; nunca había sido niñera ni nada parecido», dijo al Chicago Tribune.

El Hospital SwedishAmerican fue uno de los lugares donde la ley de «Refugio Seguro» de Illinois de 2001 estaba en vigor. Esa ley permite a los padres dejar a sus hijos recién nacidos en lugares designados, incluidos hospitales, comisarías de policía y bomberos y otros proveedores de servicios médicos de emergencia, sin temor a ser procesados por abandono.

La enfermera neonatal Jeannie Joseph fue la que se encargó del cuidado del bebé Allen. Luchaba por su vida y necesitaba mucha atención médica debido a lo prematuro de su nacimiento. «Se veía como una niña muy asustada (…) se podía ver que estaba triste, avergonzada y asustada», dijo Joseph a Tribune. La enfermera veterana se dio cuenta de que la joven madre necesitaba algo de apoyo.

(Cortesía de Cherish Adams Coates)

«Sabe que le salvó la vida, ¿cierto?», Joseph recuerda haberle dicho a Cherish. «No quiero que baje la cabeza. Le dio la mejor oportunidad que pudo». Esta conversación significó el mundo para Cherish, y por primera vez, sintió que tenía a alguien en quien podía confiar.

La enfermera Jeannie Joseph fue quien le dio a Cherish el coraje de confesar su embarazo a su familia y volver a encarrilar su vida. «Es un secreto demasiado grande para ocultárselo a su familia», recuerda haberle dicho a Cherish. «Necesita su apoyo. Cualquier decisión que elija tomar, debe hablar con ellos».

Cherish, que estaba sacando notas sobresalientes y trabajando a tiempo parcial, decidió compartir la noticia con su propia madre, quien también la tuvo muy joven. Para su sorpresa, su madre reaccionó maravillosamente y apoyó su decisión de llevar al bebé Allen a casa y ayudarlo a criar. Como dijo Joseph a Tribune, «no vaciló, no hubo ira, no hubo nada. Abrazó a Cherish y se enamoró del bebé».

Avance rápido hasta el 2017.

Cherish se graduó de la escuela secundaria y la universidad, y ahora vive en Arizona con Allen y tiene otros dos niños. Inspirada por Joseph, se capacitó como Asistente de Enfermería Certificada, según SwedishAmerican, y estaba trabajando para obtener su título como abogada, reportó Tribune. Sintió la necesidad de ponerse en contacto con Joseph, quien no podía creer que Allen ya fuera un adolescente.

(Cortesía de

En una emotiva reunión en «The Doctors», las dos mujeres intercambiaron abrazos. Las lágrimas fluyeron en el público y en el escenario. Allen también se atoró, cuando la enfermera Joseph le dijo que era muy apuesto.

El anfitrión, el Dr. Andrew Ordon, dijo a la enfermera: » Ustedes uno de esos santos, uno de esos proveedores de atención médica que va más allá de lo básico (… )No es trabajo. Es pasión, es amor».

Desde su reencuentro, Cherish regresó a trabajar en la atención médica como ecografista, inspirada por la enfermera Jeannie y recordando el nacimiento de Allen.

Por su parte, Allen tiene buen rendimiento en la escuela, corre en el equipo de atletismo y participa en el programa de cadete marino de la Marina de EE. UU., es difícil imaginar un final mucho más feliz para esta historia.


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