Florida reportó este lunes 738 nuevos casos del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), la cantidad más baja desde principios de junio, mientras el número de muertes por la enfermedad en un solo día bajó a cinco personas residentes en medio de alertas de especialistas sobre el peligro de relajarse.
El reporte de hoy emitido por del Departamento de Salud indica que se contabilizaron 1144 contagios menos con respecto a la jornada anterior.
El índice de positivos se situó este lunes en 4.22 %.
La cuenta general desde el 1 de marzo está ahora en 701,302 casos y 14,207 fallecimientos, sumando a los no residentes.
El condado de Miami-Dade, el más afectado por la pandemia, tiene ahora unos totales de 169,466 casos y 3228 muertes ocasionadas por el virus SARS-CoV-2, mientras sumó en las últimas 24 horas 37 casos, de acuerdo con la agencia estatal.
Miami-Dade es el segundo condado del país con mayor número de casos, sólo superado por el de Los Ángeles (California).
«No tiene excusas para (no) hacerse la prueba en el condado de Miami-Dade. Tenemos muchas ubicaciones gratuitas para pruebas de COVID-19 con citas previas», dijo en un tuit este lunes el alcalde Carlos Giménez.
Por su parte, el vecino condado de Broward añadió en el nuevo reporte sólo 20 casos y un fallecimiento. Desde el 1 de marzo acumula 76,874 contagios confirmados y 1380 muertes.
Preocupación por temor a un rebrote
Florida ha vivido un fin de semana de reapertura en bares y restaurantes al 100 % de su capacidad desde la puesta en marcha de un decreto del gobernador, Ron DeSantis, que permite entrar al estado en la Fase 3.
El pasado viernes, DeSantis levantó todas las restricciones a los restaurantes y otros negocios, incluidos bares y clubes.
Además, su decreto prohíbe sancionar a quien no use mascarillas, medida en contradicción con las que imperaban en Miami-Dade y Broward, que son los condados más afectados por la pandemia en Florida.
El anuncio generó confusión y también preocupación en el sur de Florida, que hace tan sólo unos días entró en Fase 2, pues por la elevada incidencia de la COVID-19 la zona quedó rezagada del resto del estado en el proceso de vuelta a la normalidad.
No obstante, el salto hacia la reapertura económica de un estado que vive mayormente del turismo y de los servicios ha sido criticado por especialistas.
Este lunes, el principal epidemiólogo del Gobierno federal, Anthony Fauci, calificó la medida de DeSantis como «muy preocupante» por temor a que conduzca a otro brote.
«Cuando estás lidiando con la propagación en la comunidad y tienes el tipo de entorno congregado donde la gente se reúne, particularmente sin máscaras, realmente estás buscando problemas. Ahora es el momento de doblar un poco, y no me refiero a cerrar», matizó Fauci al programa «Good Morning America», de la cadena ABC.
Por otro lado, la doctora Aileen Marty, experta en enfermedades infecciosas de la Universidad Internacional de la Florida (FIU), dijo a CBS que se trata de un «tipo de política que va a ser contraproducente».
«No se basa en la ciencia», afirmó.
Por casos acumulados del virus del PCCh, Florida está en el puesto número tres de Estados Unidos, detrás de California y Texas.
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