Goldman Sachs baja su previsión para EE. UU. por variante Delta y descenso de ayudas fiscales

Por Katabella Roberts
07 de septiembre de 2021 11:58 AM Actualizado: 07 de septiembre de 2021 8:43 PM

Los economistas de Goldman Sachs Group Inc. rebajaron por segunda vez su previsión del crecimiento de la economía estadounidense para este año, citando la variante COVID-19 Delta y el cada vez más escaso apoyo fiscal, apuntando con ello a un «camino más difícil» por delante para el consumidor estadounidense de lo que se había previsto anteriormente.

Este lunes, en un informe para los clientes, el economista Ronnie Walker escribió que la expansión global en 2021 se prevé en un 5.7%, en vez del 6% publicado a fines de agosto.

Aunque el consumo en Estados Unidos se elevó un 16% desde lo peor de la pandemia y además en el segundo trimestre volvió a su estado anterior al virus, Walker vislumbró un camino sombrío hacia adelante, con muchos obstáculos que superar.

Al explicar el razonamiento que subyace a la rebaja de las previsiones, Walker escribió que es probable que los consumidores estadounidenses gasten menos dinero en medio del aumento de la variante Delta de COVID-19. Además la desaparición del apoyo a más estímulos fiscales y la lentitud en la recuperación del sector de los servicios, también influiría.

Las interrupciones en la cadena de suministro afectaron también a la reposición de inventarios, volviendo a afectar a la producción del tercer trimestre, añadió.

«El obstáculo para un fuerte crecimiento del consumo en el futuro parece mucho más alto: la variante Delta ya está pesando en el crecimiento del tercer trimestre y el desvanecimiento del estímulo fiscal y una recuperación más lenta del sector de los servicios serán vientos en contra a mediano plazo», escribió Walker.

El crecimiento más débil preparará el terreno para un mayor repunte el próximo año, señaló a continuación. Los economistas de Goldman elevaron su previsión para el 2022 al 4.6%, frente a su estimación anterior del 4.5%, y no esperan que también disminuya, basándose en dos razones principales.

«En primer lugar, nuestra mejor conjetura —basada en las experiencias de algunos países europeos y en el reciente descenso de las tasas de positividad nacionales— es que los casos del virus en Estados Unidos empezarán a descender a fines de este mes», escribió el economista.

En segundo lugar, observaron un aumento de las personas que se adaptan al entorno actual del virus, junto con un aumento de la vacunación, lo que probablemente podría dar un impulso al gasto de los consumidores.

«La gente ha adaptado sus hábitos de gasto; la vacunación generalizada ha reducido la probabilidad de restricciones gubernamentales y los individuos vacunados son menos propensos a desvincularse voluntariamente de la economía», escribió.

Es la segunda vez en apenas un mes que Goldman Sachs revisa a la baja su previsión de crecimiento, citando el impacto de la variante Delta. El 18 de agosto, los economistas rebajaron su estimación para el tercer trimestre al 5.5% desde el 9%.

Sin embargo, elevaron su estimación para el cuarto trimestre desde el 5.5% al 6.5%, señalando que las predicciones de los temores en torno al virus disminuirán lentamente, la recuperación del sector servicios se reanudará y los inventarios se repondrán.

La última revisión también se produjo poco después de que el Departamento de Trabajo publicara su decepcionante informe sobre el empleo del mes de agosto, donde se reveló que la economía estadounidense solo añadió 235,000 puestos durante el mes, frente a las expectativas de unos 750,000 puestos de trabajo.

Con información de Reuters


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