El actor de Hollywood Tom Selleck, de 74 años, es conocido por su bigote y su papel como investigador privado Thomas Magnum en el popular drama televisivo Magnum P.I. de los años 80. La leyenda ha estado en la pantalla desde 1965.
Cuando se le preguntó cómo le gustaría recordar, el veterano actor dijo una vez a The Straits Times en 2014: «Me gustaría ser recordado como alguien que era un buen ciudadano, que era amado por su familia».
«La familia es más importante para mí que cualquier otra cosa», añadió Tom, que tiene fans en todo el mundo.
Hablando de familia, Tom se casó con la actriz Jillie Mack en 1987. El 16 de diciembre de 1988, fueron bendecidos con una hermosa hija llamada Hannah Selleck.
Tom es sin duda un padre cariñoso. Dejó la exitosa serie Magnum P.I. y redujo su carrera de actor solo para ayudar a cuidar de Hannah, y para pasar más tiempo con su familia.
«Renuncié a Magnum para tener una familia», dijo Tom a People en 2012. «Me llevó mucho tiempo bajarme del tren, pero me esfuerzo mucho por mantener el equilibrio, y este rancho me ha ayudado a hacerlo».
Para mantener a su amada hija fuera del centro de atención y exponerla al estilo de vida del campo, Tom se mudó con su familia a un rancho de 65 acres, con un corral de caballos y una granja de aguacates de 20 acres, en el condado de Ventura, California, según Heightline.
«Ambos pensamos que era el mejor ambiente para que (Hannah) creciera», dijo Jillie, su esposa.
Hannah aprendió a montar a caballo a la edad de 4 años y pasó la mayor parte de su infancia en el establo cuidando ponis.
Amante de los caballos, a Hannah se le instó a participar en deportes ecuestres cuando era una adolescente. «A medida que progresaba en el deporte, me enamoré de la competición en sí misma», dijo Hannah.
Luego se destacó aún más en el deporte y ha estado ganando torneos en todo el mundo desde que era estudiante.
La encantadora Hannah ha ganado varios Laureles, incluyendo la Medalla de Plata por Equipos en el Prix de States en 2005, el Campeonato de Equitación de 16 años en el Capitol Challenge en 2006, el Gran Premio Blenheim Summer Classic II de 35.000 dólares en 2010, y el Clásico 1.35 dólares en 2011.
Después de graduarse de la Universidad Loyola Marymount en 2011, Hannah hizo una pasantía en relaciones públicas durante unos seis meses en Beverly Hills, pero pronto se dio cuenta de que no era su vocación.
Aunque Hannah había probado algunos trabajos de modelaje, no siguió los pasos de su padre en el mundo del brillo y el glamour, sino que fue en busca de lo que realmente le apasiona: trabajar con caballos y seguir una carrera profesional en el mundo de la equitación.
Hoy en día, Hannah sigue participando en competiciones, captando la atención de los medios de comunicación no solo por su buen aspecto, sino también como una campeona ecuestre.
Hannah posee actualmente un pequeño establo boutique de cría llamado Descanso Farm en Hidden Valley, junto con su padre.
«Mi papá lo alentó mucho», dijo Hannah. «Le gustaba la idea de desarrollar a los bebés y a los caballos jóvenes, así que era un gran partidario de esta idea».
«De niña (mis padres) trataron de criarme lo más normalmente posible, dada la línea de trabajo de mi padre», dijo. «Esos caballos han sido una gran manera para mí de tener mis propios logros fuera de lo que mis padres habían hecho».
Detrás de cada hija exitosa hay un padre increíble. Tom es sin duda un padre increíble y una figura paterna positiva. Gracias al aseo y apoyo de Tom, Hannah puede tener una infancia feliz y una carrera plena.
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