Indicador clave de la inflación de la Reserva Federal aumenta inesperadamente

Por Andrew Moran
26 de mayo de 2023 2:45 PM Actualizado: 26 de mayo de 2023 2:45 PM

El indicador de inflación preferido de la Reserva Federal subió inesperadamente en abril, lo que hace temer que el banco central estadounidense pueda subir las tasas de interés por undécimo mes consecutivo en junio.

En abril, el índice anual de precios del gasto en consumo personal (PCE) subió al 4.4 por ciento, frente al 4.2 por ciento, según la Oficina de Análisis Económico (BEA). En términos intermensuales, el índice de precios PCE general subió un 0.4 por ciento, frente al 0.1 por ciento del mes anterior.

El PCE subyacente, que excluye los componentes volátiles de los alimentos y la energía, subió hasta el 4.7% interanual, frente al 4.6%. También se situó por encima de la estimación de consenso del 4.6 por ciento. El PCE subyacente también aumentó un 0.4 por ciento de marzo a abril, frente al 0.3 por ciento.

En conjunto, la BEA señaló que se trataba del primer repunte de la inflación del PCE desde octubre, lo que refleja un impulso del consumo de bienes (0.8 por ciento) y servicios (0.3 por ciento).

Los datos del gobierno muestran que los precios de los bienes aumentaron un 2.1 por ciento y los de los servicios un 5.5 por ciento. Los precios de los alimentos se dispararon hasta el 6.9 por ciento, pero los de la energía bajaron hasta el 6.3 por ciento.

En cuanto a los datos de inflación de mayo, el modelo de Previsión de la Inflación del Banco de la Reserva Federal de Cleveland sugiere que el PCE anual se reducirá al 3.9%, y que el PCE subyacente se situará en el 4.7%.

En otros datos de la BEA, tanto la renta personal en dólares corrientes como la renta personal disponible aumentaron un 0.4 por ciento el mes pasado, frente al 0.3 por ciento de marzo. Asimismo, el gasto personal se disparó un 0.8 por ciento, frente al 0.1 por ciento y por encima de la previsión del mercado del 0.4 por ciento.

Con el aumento de los costes de los préstamos, los pagos de intereses personales de los consumidores ascendieron a 448,300 millones de dólares en abril, frente a los 444,200 millones del mes anterior. La tasa de ahorro personal cayó al 4.1%, frente al 4.5%.

Esto se produce después de que la BEA informara en su segunda estimación de que el PCE y el PCE básico aumentaron al 4.2 por ciento y al 5 por ciento en el primer trimestre, respectivamente.

Crecen las probabilidades de una subida de tasas

Los observadores del mercado afirman que esto no es lo que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, y los responsables de la política monetaria quieren ver, ya que podría respaldar los argumentos a favor de otra subida de tasas el mes que viene.

El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, interviene en la Conferencia de Investigación Thomas Laubach sobre «cuestiones clave de la política monetaria y la economía», celebrada por la Junta de Gobernadores de la Reserva Federal el 19 de mayo de 2023 en Washington, DC. (Win McNamee/Getty Images)

Tras los dos días de datos sobre la inflación, el mercado de futuros prevé una subida de tasas de un cuarto de punto en la reunión de junio del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus siglas en inglés). Si la Reserva Federal aprieta el gatillo de una subida de tasas, la institución elevará el tipo de referencia de los fondos federales a un rango de entre el 5.25 y el 5.50 por ciento.

Otra subida de tasas sería oficialmente superior a la media esperada de la tasa de interés oficial del 5.1 por ciento, según la Encuesta de Proyecciones Económicas (SEP) de la Fed de marzo (pdf).

A pesar de las cambiantes expectativas de un endurecimiento adicional, Preston Caldwell, economista jefe de Morningstar Research Services, cree que la Fed finalizó sus subidas de tasas en mayo y podría empezar a recortarlos a finales de este año.

«Una vez que la Fed gane la guerra contra la inflación, pasará a recortar las tasas de interés para que la economía vuelva a moverse», escribió en una nota de investigación, añadiendo que la posibilidad de una recesión hacia finales de año es alta.

Sin embargo, los datos más elevados de lo esperado «también están complicando un ciclo de subidas de la Reserva Federal que ya está parcialmente bloqueado», posteó en Twitter el economista Mohamed El-Erian.

Otros datos económicos

Según la Oficina del Censo, los nuevos pedidos de bienes duraderos manufacturados en Estados Unidos aumentaron un 1.1% en abril, por debajo del 3.3% revisado al alza en marzo. Sin embargo, los pedidos de bienes duraderos superaron las expectativas del mercado de un 1 por ciento negativo.

Los pedidos de bienes duraderos, excluida la defensa, cayeron un 0.6% el mes pasado.

El déficit comercial de bienes aumentó un 17%, hasta un máximo de seis meses de 96,800 millones de dólares. Las exportaciones cayeron un 5.5%, hasta 163,300 millones de dólares, debido a que las empresas nacionales enviaron menos bienes de consumo, suministros industriales, petróleo y automóviles. Las importaciones aumentaron un 1.8%, hasta 260,000 millones de dólares, impulsadas por el fortalecimiento de la demanda de automóviles y camiones nuevos.

Los inventarios minoristas, excluidos los automóviles, cayeron un 0.1 por ciento, por debajo del aumento del 0.1 por ciento de marzo. Los inventarios mayoristas cayeron un 0.2 por ciento, ligeramente mejor que el aumento del 0.3 por ciento de marzo.

Los primeros datos del segundo trimestre sugieren que la economía estadounidense se mantiene estable en un clima de subida de las tasas de interés, restricción del crédito y obstinada inflación. Además, la tasa de crecimiento del producto interior bruto (PIB) del primer trimestre fue revisada al alza por la BEA, del 1.1 al 1.3 por ciento.

Los mercados financieros se mantenían a flote en las operaciones previas a la apertura de los mercados tras las últimas cifras de inflación, con los principales índices de referencia subiendo alrededor de un 0.1 por ciento. En cambio, los inversores se han centrado principalmente en las negociaciones sobre el techo de la deuda, a medida que la Casa Blanca y los republicanos se acercan a establecer un acuerdo para elevar el límite de la deuda.

El mercado del Tesoro de EE. UU. subió en su mayor parte, con el rendimiento de referencia a 10 años sumando unos 2 puntos básicos hasta casi el 3.84 por ciento. El bono a 1 mes sumó más de 8 puntos básicos y se mantuvo por encima del 5.78%.

El índice del dólar estadounidense (DXY), un indicador del billete verde frente a una cesta de divisas, se tomó un respiro al final de la semana, cayendo hasta 104.00. El índice ha subido cerca de un 1 por ciento esta semana.


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