WASHINGTON, Estados Unidos – A medida que los funcionarios locales y estatales se preparan para una reapertura gradual de la economía, el aumento de la confianza de los empleados en el regreso al trabajo jugará un papel clave para que la economía vuelva a la normalidad, dijo el congresista republicano de Ohio, Warren Davidson.
Davidson se unió al recién formado grupo de trabajo de la Casa Blanca para asesorar sobre la reapertura de la economía, el grupo ‘Opening Up America Again Congressional Group’, que incluye a 32 representantes y 65 senadores de ambas bancadas.
«Creo que la clave es recuperar la confianza en el pueblo estadounidense para poder trabajar y trabajar con seguridad», dijo Davidson a The Epoch Times.
El congresista de Ohio dijo que las empresas podrían tener dificultades para conseguir que los trabajadores se presenten, ya que la mayoría de la gente está teniendo en cuenta los riesgos para su salud.
Además, expresó que, «el (subsidio) de desempleo es tan generoso que les va a costar mucho trabajo hacer que la gente vuelva a trabajar».
Aproximadamente 22 millones de personas en todo el país han presentado solicitudes de desempleo en las últimas cuatro semanas debido a los cierres relacionados con el virus del PCCh. La tasa de desempleo antes de la pandemia era del 3.5 por ciento, mientras que las estimaciones del mercado muestran que la tasa de desempleo de abril subirá al 20 por ciento.
«Antes de hace apenas dos meses, la mayor limitación para la mayoría de los empleadores era la fuerza de trabajo, la capacidad de contratar más gente», dijo Davidson. «No vamos a volver a eso inmediatamente, pero yo creo que hay un camino de vuelta a eso tan pronto como podamos hacerlo con seguridad».
Cuando la confianza retorne, la economía comenzará a volver y las empresas contratarán de nuevo, añadió.
El paso más importante, señaló a continuación, sería poner fin a la distinción entre negocios esenciales y no esenciales para que las empresas puedan volver a trabajar y proporcionar un «marco uniforme para salvaguardar» a sus empleados.
Apertura por etapas
El presidente Donald Trump reveló la semana pasada las directrices para la apertura de la economía en un enfoque de tres fases. Las directrices están destinadas a ayudar a los funcionarios estatales y locales a reabrir gradualmente los negocios, mientras se asegura de que no se produzca una segunda ola de infecciones.
El camino probable de la recuperación económica también dependerá del virus, dijo Davidson.
«En conjunto en toda la población total, como estamos haciendo el muestreo ahora, parece que muchas más personas han estado expuestas a este virus y la tasa de mortalidad parece menor». Además si la propagación mortal del mismo (coronavirus) se mantiene bajo control, creo que se empezará a ver una recuperación bastante fuerte», añadió. «Obviamente podría ser muy diferente si el virus se vuelve de alguna manera peor y mucho más agresivo».
Las directrices del presidente dan a los gobernadores de los estados la discreción de cuándo relajar las medidas de cierre, permitiendo que algunos lugares se reabran incluso antes del 1 de mayo.
La orden de permanencia en el hogar de Ohio comenzó el 23 de marzo, y el gobernador Mike DeWine anunció recientemente que podría comenzar a reabrir el estado el 1 de mayo. El gobernador también dijo a los periodistas que estaba esperando la aprobación federal para un sustancia reactiva recién desarrollada, que ayudaría a aumentar significativamente la capacidad del estado para hacer los test del coronavirus.
Según Davidson, el desafío es esencialmente un tira y afloja a tres bandas entre la salud pública, el crecimiento de la economía y las libertades civiles. Él dijo que destacó ese punto durante la conferencia telefónica del grupo de trabajo con Trump la semana pasada.
«No nos olvidemos de la libertad y los principios que construyeron nuestro país que están protegiendo la Declaración de Derechos. Porque algunas de las ideas sobre cómo abrir la economía con éxito, francamente, son violaciones flagrantes del derecho a la privacidad», manifestó. «Esa es una tentación que a menudo ocurre en una emergencia».
Desacoplamiento de China
Los gobiernos y las empresas han aprendido duras lecciones de la rápida propagación del virus del PCCh, a menudo llamado el nuevo coronavirus. También la pandemia puede causar cambios drásticos en la cadena de suministro mundial, acelerando la tendencia de trasladar la producción fuera de China.
Durante una sesión informativa para la prensa en la Casa Blanca el 19 de abril, Trump dijo que las cadenas de suministro volverían a Estados Unidos.
«Hemos aprendido mucho sobre las cadenas de suministro. Hemos aprendido que es bueno hacer las cosas en Estados Unidos».
Davidson cree que muchos países occidentales reducirán su dependencia de China después de la pandemia.
«Ese impulso ya había comenzado en parte debido al costo de hacer negocios, no solo en términos de aumento de los costos dentro de China, sino el costo en términos de propiedad intelectual y la falta de capacidad para controlar su propia empresa», dijo.
«China se ha vuelto esencialmente demasiado difícil de operar y ahora tal vez demasiado peligrosa para operar».
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