La mayoría de los estadounidenses respaldan la reanudación del trabajo en un importante oleoducto que el presidente Joe Biden bloqueó poco después de asumir el cargo, según una nueva encuesta.
Alrededor del 71 % de los encuestados dijo estar «muy a favor» o «algo a favor» de que Biden firme una orden ejecutiva para reiniciar la construcción del oleoducto Keystone XL.
La encuesta fue realizada por Maru Public Opinion para un medio de comunicación canadiense.
Si se construye, el oleoducto transportaría petróleo desde Canadá a través de la parte central de Estados Unidos hasta Texas.
Biden en su primer día en el cargo firmó una orden revocando la autorización para el oleoducto. El presidente Donald Trump había permitido que el proyecto avanzara luego de que el presidente Barack Obama lo frenara.
La orden de Biden se refería a una evaluación de 2015 realizada por la administración Obama que determinó que el oleoducto «no serviría al interés nacional de EE. UU.» porque tendría un impacto «limitado» en la seguridad energética y la economía de EE. UU. y obstaculizaría el desarrollo de fuentes de energía alternativas como la solar.
“El análisis concluyó además que la aprobación del oleoducto propuesto socavaría el liderazgo climático de Estados Unidos al socavar la credibilidad y la influencia de Estados Unidos a la hora de instar a otros países a tomar medidas climáticas ambiciosas”, dijo Biden en ese momento.
La medida suscitó numerosas protestas, y el primer ministro de Alberta la calificó de irrespetuosa y uno de los muchos trabajadores despedidos dijo que la acción «perjudicaría a mucha gente, a muchas familias».
Las encuestas realizadas por el Centro de Investigación Pew concluyeron que el apoyo a Keystone disminuyó de una mayoría de estadounidenses a una minoría entre 2014 y 2017, y cerca de la mitad de los estadounidenses, incluida una gran mayoría de demócratas, dijeron en 2021 que cancelar el proyecto era la medida correcta.
Pero con el aumento de los precios de la gasolina en medio de la guerra entre Rusia y Ucrania y la prohibición de Biden a las importaciones de petróleo ruso, más estadounidenses parecen dispuestos a poner en marcha el proyecto, que tardaría meses en completarse pero que tendría un impacto en el futuro.
La prohibición se mencionaba en la pregunta de la encuesta, realizado el 10 de marzo entre 1508 estadounidenses y con un margen de error de más o menos el 3,1 %.
“Parece que la gente, dada la circunstancia actual, ha decidido que esta es una solución bipartidista a lo que ahora es una circunstancia sin precedentes», dijo John Wright, vicepresidente ejecutivo de Maru Public Opinion, que comisionó la encuesta a PostMedia.
El desarrollador de Keystone dijo que tras comenzar la guerra no funcionaría el proyecto aunque se reiniciara.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo a los periodistas recientemente que no hay planes para permitir que se reanude la construcción y agregó que «no resolvería ninguno de los problemas que tenemos actualmente».
Jason Kenney, primer ministro de Alberta, dijo casi al mismo tiempo que el gobierno canadiense estaría dispuesto a ayudar a garantizar que el proyecto se complete si se logran acuerdos.
Mientras tanto, la Cámara de Representantes de EE. UU. rechazó un proyecto de ley que aprobaría el oleoducto, con la oposición mayoritaria de los demócratas y la mayor parte de los republicanos a favor.
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