La oficina de Cuomo responde a las denuncias de acoso sexual de su ayudante

Por Isabel van Brugen
25 de febrero de 2021 12:49 PM Actualizado: 25 de febrero de 2021 12:49 PM

La oficina del gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, respondió el 24 de febrero a las denuncias de acoso sexual de una exmiembro de su administración, que lo acusó de hacer comentarios inapropiados y de tocarla y besarla sin consentimiento.

En una nota publicada en la página web Medium el miércoles, Lindsey Boylan, exsubsecretaria de desarrollo económico y asesora especial de Cuomo, compartió detalles de su experiencia trabajando bajo la administración del líder neoyorquino. Dijo que esperaba que su relato «facilitara a otros decir su propia verdad».

Acusó por primera vez a Cuomo de acoso sexual el año pasado, pero no dio más detalles de su historia.

El gobernador «se desvivía por tocarme en la parte baja de la espalda, en los brazos y en las piernas», la comparó con una de sus rumoreadas exnovias y una vez sugirió que debían «jugar al strip poker» en un vuelo tras un evento en octubre de 2017.

Cuando Cuomo hizo el «burdo comentario», estaba sentado frente a ella, «tan cerca que nuestras rodillas casi se tocaban», dijo Boylan, señalando que en ese momento, su ayudante de prensa estaba a su derecha y un policía estatal estaba detrás de ellos. No mencionó quién más podría haber estado en el avión.

Boylan, una demócrata que se presenta como candidata a la presidencia del Distrito de Manhattan, acusó a Cuomo de crear «una cultura dentro de su administración en la que el acoso sexual y la intimidación son tan presagiados que no solo se condonan sino que se esperan».

«Su comportamiento inapropiado hacia las mujeres era una afirmación de que le gustabas, de que debías estar haciendo algo bien», afirmó. «Utilizaba la intimidación para silenciar a sus críticos. Y si te atrevías a hablar, te enfrentabas a las consecuencias».

En unas declaraciones a The Epoch Times el miércoles, la oficina del gobernador demócrata dijo que las «afirmaciones de Boylan sobre un comportamiento inapropiado son lisa y llanamente falsas».

«En la última publicación del blog de la señora Boylan, ella comienza con una historia sobre un viaje en avión en octubre de 2017 (…) no hubo ningún vuelo en el que Lindsey estuviera a solas con el gobernador, una única ayudante de prensa y un policía del Estado de Nueva York», dijo la portavoz de Cuomo, Caitlin Girouard.

La oficina de Cuomo envió una lista con detalles de los vuelos fechados el 4, 6, 12 y 17 de octubre, que dicen que el entonces director de Política John Maggiore, el presidente y director general de Empire State Development Howard Zemsky, la exsecretaria de Prensa Dani Lever y la primera vicesecretaria de Prensa Abbey Fashouer Collins, «estuvieron en todos estos vuelos con» Boylan.

«Estuvimos en cada uno de estos vuelos de octubre y esta conversación no se produjo», dijeron todos ellos en unas declaraciones distribuidas por Girouard.

Boylan recordó en su blog otro incidente en diciembre de 2016, afirmando que el gobernador organizó un encuentro con ella en su oficina en Albany, y luego procedió a darle un tour. Él «sonrió» y le mostró una caja de puros que, según dijo, le había regalado el expresidente Bill Clinton cuando trabajaba como secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano.

Dijo que estaba claro que el gesto era una referencia al affaire de Clinton con su entonces becaria Monica Lewinsky a mediados de los años noventa.

«El gobernador debió percibir mi miedo porque finalmente me dejó salir del despacho», dijo, alegando que a partir de ese momento sus «gestos inapropiados» se hicieron más frecuentes.

Boylan también dijo que durante el día de San Valentín, Cuomo regaló rosas a todas sus empleadas, y también a ella. Estos fueron «recordatorios no tan sutiles de que el gobernador explotaba la dinámica de poder con las mujeres que le rodeaban», dijo.

En una ocasión, Boylan alegó que Cuomo «se puso delante de mí y me besó en los labios» sin consentimiento en su oficina de Nueva York. El incidente la dejó en «shock», dijo.

«La idea de que alguien pudiera pensar que yo ocupaba mi alto cargo por el enamoramiento del gobernador era más denigrante que el propio beso».

«Después de eso, mis temores empeoraron. Llegaba al trabajo con náuseas todos los días», añadió. Boylan informó a sus colegas de su dimisión el 26 de septiembre de 2018.

«Hay una parte de mí que nunca me perdonará haber sido una víctima durante tanto tiempo, por tratar de ignorar un comportamiento que sabía que estaba mal. El gobernador se aprovechó de mis debilidades, de mi deseo de hacer un buen trabajo y de ser respetada. Me hizo creer que ese era el mundo en el que tenía que sobrevivir», escribió.

El comportamiento de Cuomo «estaba tan normalizado —sobre todo por Melissa DeRosa y otras mujeres importantes de su entorno— que solo ahora me doy cuenta de lo infame que era su abuso», afirmó.

«Hablo porque tengo el privilegio de hacerlo cuando muchos otros no lo tienen. Nadie debe tener que ser definido o destruido por este tipo de acoso sexual. Tampoco deben ser nuevamente victimizados si deciden decir su propia verdad», concluyó Boylan. «Espero que compartir mi historia despeje el camino para que otras mujeres hagan lo mismo».

Boylan no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios de The Epoch Times.

Jack Phillips contribuyó a la elaboración de este artículo.


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