La torre de Pisa sorprende, se endereza aunque los trabajos pararon hace 18 años

03 de diciembre de 2018 Noticias en Video

La torre inclinada de Pisa se ha estado enderezando de modo sorprendente en los últimos años. Incluso sin intervención de los ingenieros sigue alineándose, dijo Nunziante Squeglia, docente de Geotécnica de la Universidad de Pisa y colaborador del grupo de supervisión, de acuerdo a un reporte de Ansa.

Un error en su construcción en el año 1200 la transformó en un símbolo de la ciudad y del país. Llegó a registrar 4,5 metros de inclinación, por lo que se temió una estrepitosa caída. En 1987 la Unesco la declaró Patrimonio de la Humanidad.

Un grupo internacional de ingenieros liderados por Michele Jamiolkowsli trabajaron en el suelo de la torre desde 1993 a 2001, y lograron alinearla cerca de 40 centímetros.

La Torre Inclinada de Pisa ahora está estable e incluso se ha enderezado más gracias al trabajo de ingeniería para salvar la atracción turística de renombre mundial, dijeron los expertos el 21 de noviembre de 2018. (TIZIANA FABI/AFP/Getty Images)

La sorpresa se produjo luego de constatar que en los siguientes 18 años, con solo manutención, la torre ha seguido enderezándose cada vez más. Cuatro centímetros se enderezó en los últimos siete años.

“De cuando se iniciaron las medidas se ha reducido la inclinación cerca de 2000 arcosegundos, más o menos medio grado, que corresponde a 45 centímetros. La oscilación ahora varía un promedio de medio milímetro al año, pero lo que más cuenta es la estabilidad del campanario. Que es mejor que en las previsiones iniciales”, dijo Squeglia, según Virgilio.

El certificado del buen estado lo emitió el Grupo Vigilancia compuesto por Salvatore Settis, Carlo Viggiani y Donato Sabia, que por más de 17 años “observan los movimientos del monumento de Pisa”.

“Sí, es verdad, se está enderezando», aseguró el ingeniero Roberto Cela durante una transmisión de TV Svizzera,»Y pasarán muchos antes de que ese fenómeno se detenga», dijo el director de Opera Primaziale Pisana, la entidad que da el soporte económico a los principales monumentos de la ciudad de Pisa.

«Hemos instalado una serie de tubos subterráneos, del lado donde se inclina la torre».

«Eliminamos el material del sótano gracias a perforaciones realizadas con mucho cuidado. Gracias a ese sistema recuperamos la mitad de la pendiente», dijo el director a través de la televisión.

Los turistas posan para tomar fotos con la Torre de Pisa en Pisa el 28 de noviembre de 2018. – La Torre Inclinada de Pisa ahora está estable e incluso se ha enderezado más gracias al trabajo de ingeniería para salvar la atracción turística de renombre mundial, dijeron los expertos el 21 de noviembre de 2018. (TIZIANA FABI/AFP/Getty Images)

El efecto del Sol

El ingeniero Squeglia señala que la Torre de Pisa tiene sus particularidades.

«Era un misterio cuando llegué, no sabíamos realmente por qué se inclinaba y por qué fenómeno se acentuaba», dijo el experto.

Las mediciones, que se realizan cada hora, algunas con relojes automáticos, otras utilizando instrumentos manuales, han permitido conocer que se endereza en verano y se inclina en invierno.

«La torre tiende a deformarse y a reducir su inclinación en verano, cuando hace calor, porque se inclina hacia el sur, de modo que la cara sur se calienta y la piedra se dilata. Al dilatarse se endereza», explicó Squeglia.

El ingeniero reveló además que dentro de la Torre, visitada cada años por millones de turistas, se conserva una edificación interna, cuya función es inexplicable dentro de la estructura. Es parte de los muchos secretos que guarda.

Los turistas posan para tomar fotos con la Torre de Pisa en Pisa el 28 de noviembre de 2018. – La Torre Inclinada de Pisa ahora está estable e incluso se ha enderezado más gracias al trabajo de ingeniería para salvar la atracción turística de renombre mundial, dijeron los expertos el 21 de noviembre de 2018. (TIZIANA FABI/AFP/Getty Images)

La torre de Pisa es un campanario que forma parte de una serie de monumentos alrededor de la catedral de la ciudad del mismo nombre, edificada cerca de la costa Este del centro de Italia. Mide unos 58 metros y pesa cerca de 14.000 toneladas. Por un error de construcción en suelo arcillosos, comenzó a inclinarse rápidamente después de su construcción en 1173.

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