López Obrador lanza estrategia contra robo de gasolina que provoca escasez en varios Estados del país

07 de enero de 2019 Noticias

Una ofensiva del nuevo gobierno de México contra el robo de combustible provocó escasez en las estaciones de servicio en varios estados del centro del país, y obligó a los automovilistas a hacer largas filas para poder llenar sus tanques.

“He buscado en 10 gasolineras y no, no hay en ninguna”, comentó Alan Delgado, mientras trataba de llenar el tanque de su vehículo en una estación de servicio en Guadalajara. “Es algo grave y crítico porque el trabajo y el comercio se complica”, agregó, según Forbes.

El gobierno mexicano salió a explicar que no hay escasez sino retraso en la distribución.

“Pemex cuenta con combustible suficiente. No hay desabasto de gasolina en el país, lo que se está haciendo es cuidar la distribución”, dijo el gobierno esta mañana.

En el mismo sentido PEMEX manifestó que “el país no enfrenta desabasto, aunque se han generado retrasos en distribución, hay suficiente producto para cubrir demanda”.

Pemex explicó que está priorizando “el uso de medios de transporte más seguros para la entrega a las estaciones de servicio”, lo que conlleva retrasos en los estados de Hidalgo, México, Jalisco, Michoacán, Guanajuato y Querétaro, según Forbes,

Medios locales como MVS afirmaron que “si hay desabastecimiento”, y que las estaciones de gasolina cerradas se deben a que “no hay gasolina” y no a que se abastecían con gasolina robada.

En diálogo con Gonzalo Moroy, consultor de energía, el desabastecimiento se debe asimismo, a que se paralizó la producción de gasolina en la refinería.

Fotografía de una gasolinera fuera de servicio en la ciudad de Morelia, en el estado de Michoacán (México). EFE

Oleoductos versus pipas

La estrategia del gobierno se basa en principio en dejar de usar el oleoducto para transportar la gasolina.

El problema de desabasto tiene que ver «con el cambio que se dio para trasladar combustible por pipas más que el uso de ductos», dijo el viernes López Obrador.

Sin embargo, no está claro si es eficiente esta estrategia.

“El gobierno no ha dejado en claro si ve el transporte por ferrocarril y carretera como una solución a largo plazo para la distribución de combustible, un medio de transporte que es de 12 a 16 veces más caro que a través de un oleoducto”, comentó el analista petrolero Gonzalo Monroy, según Forbes.

“Si esto se sigue alargando y extendiendo a otras zonas del país, vamos a estar viendo un muy problemático primer trimestre para la economía mexicana”, dijo Monroy.

Según López Obrador, “luego de la estrategia el robo se redujo a 70 o 100 pipas, nada que ver con las anteriores 1000 robadas”, explicó.

El Partido Acción Nacional responsabilizó al gobierno por «la escasez de gasolina», y explicó el perjuicio que esta provoca para el país.

La dirigencia nacional del PAN aseguró que la escasez de gasolina en algunas entidades del país “es culpa y responsabilidad del Gobierno Federal, porque se está afectando las actividades productivas y cotidianas de los mexicanos”, por lo que el combate al robo de combustibles no debe ser la excusa del desabasto que se está registrando principalmente en los estados gobernados por la oposición como son Puebla, Querétaro, Guanajuato, Jalisco o Michoacán”.

En un comunicado, el líder panista Marko Cortés afirmó que una vez más la incapacidad y malas decisiones del gobierno federal  “generan costos económicos que terminan pagando todos los ciudadanos” porque no solo gastan en  gasolina cara, “ahora hacen largas filas en estaciones de servicio que provocan imágenes similares a lo que ocurre en Venezuela”, por lo que exigió que se busquen soluciones inmediatas para resolver el desabasto de gasolina.

Cortés Mendoza expuso que el desabasto de combustible es un problema grave, ya que genera pérdidas económicas debido a que se está dando en zonas donde la producción y transportación de productos es fundamental para la productividad del país.

Según El Economista, en los últimos años las organizaciones criminales mexicanas han diversificado sus actividades a delitos como el robo de combustible, en el que se sospecha que también participan trabajadores de la petrolera estatal Pemex.

Imagen representativa. Un efectivo del ejército mexicano custodia una gasolinera en el poblado de Ixtapa, en el sureño estado de Guerrero. (Foto de CECILIA DEL OLMO/AFP/Getty Images)

El presidente Andrés Manuel López Obrador, asumió en diciembre con la promesa de acabar con el crimen y la corrupción.

Como parte de la estrategia del presidente, las fuerzas armadas de México están interviniendo en las instalaciones de Pemex en todo el país, incluida una refinería en la ciudad Salamanca en el estado central Guanajuato donde, de acuerdo con Reuters, el robo de combustible está relacionado con un reciente aumento de la violencia y los asesinatos.