Más estados de EE.UU. relajan confinamiento y reabren con cautela economías devastadas

Por Isabel van Brugen
28 de abril de 2020 3:40 PM Actualizado: 28 de abril de 2020 3:40 PM

Colorado, Mississippi, Minnesota, Montana y Tennessee se convirtieron el lunes en los últimos de una oleada de estados que declararon que comenzarían a reducir las restricciones del confinamiento por el virus del PCCh, en un intento de reabrir sus economías devastadas por la pandemia.

A pesar de las advertencias de los expertos en salud de que todavía hay muy pocas pruebas de diagnóstico aplicadas, los estados dijeron que bajo las nuevas directrices de salud, se prepararían para reabrir los negocios y relajar las restricciones de confinamiento establecidas para frenar la transición del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), comúnmente conocido como el nuevo coronavirus.

El gobernador de Tennessee, Bill Lee (R), anunció en un comunicado de prensa que a partir del lunes, los restaurantes de 89 de los 95 condados del estado podrán operar a una capacidad del 50 por ciento. La decisión siguió a 14 días de tasas de infección del virus del PCCh promedio diario estable, dijo su oficina.

«Los tennesianos se unieron para aplanar la curva, y es hora de que la gente comience a volver al trabajo y a sus negocios», dijo Lee. «Estamos persiguiendo un enfoque cuidadoso y medido para reabrir nuestra economía que no dependa de mandatos de mano dura, sino que proporcione herramientas prácticas para empresas de todos los tamaños».

Bajo la «Promesa de Tennessee» del gobernador, los minoristas seguirán las mismas pautas el miércoles, con los trabajadores de ambas industrias adhiriéndose a las recomendaciones de usar elementos que cubran sus caras. Los dueños de negocios deben seguir las pautas federales para la higiene y las normas de saneamiento del lugar de trabajo relacionadas con la pandemia.

Un récord de 26.5 millones de estadounidenses han solicitado beneficios de desempleo desde mediados de marzo, y las ventas al por menor, la construcción de viviendas y la confianza de los consumidores se han derrumbado. Antes de la pandemia, la tasa de desempleo de EE. UU. había estado rondando el 3.5 por ciento, el nivel más bajo de los últimos 50 años.

La Oficina de Presupuesto del Congreso, una organización no partidista, predijo el viernes que la economía se contraería a una tasa anual de casi el 40 por ciento en el segundo trimestre.

El Senado negoció el 21 de abril un paquete de alivio por el virus del PCCh por 484,000 millones de dólares, que incluye ayuda para pequeñas empresas y hospitales, y fondos para aumentar las pruebas de detección del virus. El paquete de casi medio billón de dólares se añadió al paquete de rescate de 2.2 billones de dólares aprobado por el Congreso en marzo para mitigar los efectos económicos de la pandemia.

En Mississippi, el gobernador Tate Reeves (R) firmó el viernes una orden ejecutiva «Más seguro en casa» que permitió a la mayoría de los minoristas operar a partir del lunes a una capacidad del 50 por ciento. Sin embargo, los lugares de «diversión o entretenimiento» como cines y museos, y los lugares donde no se puede evitar el contacto sostenido de persona a persona, como salones o gimnasios, permanecerán cerrados, dijo la oficina de Reeves.

«Estamos empezando a reabrir nuestra economía», dijo Reeves. «No es un interruptor de luz que solo se enciende y se apaga. Es un regulador de intensidad. Podemos tomar medidas para mejorar la vida».

En otro lugar, el gobernador de Colorado, Jared Polis (D), permitió que la recogida de pedidos en la acera comenzara el lunes, con la reapertura de salones de belleza y salones de tatuajes a partir del viernes.

En Montana, los restaurantes y las escuelas podrán reanudar sus actividades el 7 de mayo, mientras que las iglesias podrán reabrir a partir del sábado, con medidas de distanciamiento social.

Georgia, Oklahoma, Alaska y Carolina del Sur ya se han adelantado para reiniciar sus economías tras semanas de cierres obligatorios. Otros estados han emitido planes para normas más relajadas en las próximas semanas.

Las autoridades de salud pública afirman que el aumento de las interacciones humanas y de la actividad económica en la actualidad—sin los medios para hacerlo de forma segura—no hará más que provocar una nueva oleada de infecciones, al igual que las medidas de distanciamiento social parecen estar controlando los brotes de coronavirus.

Los expertos médicos afirman que el estricto cumplimiento de los cierres de empresas y las órdenes de permanencia en el hogar impuestas en las últimas semanas por los gobernadores de 42 de los 50 estados han servido para nivelar las tasas de hospitalizaciones y admisiones en las unidades de cuidados intensivos.

El casi millón de infecciones en todo Estados Unidos se han atribuido al virus del PCCh con al menos 56,245 muertes, según un mapa de rastreo de la Universidad Johns Hopkins, que coteja los datos oficiales del gobierno.

La Casa Blanca reveló el lunes los planes para expandir y acelerar las pruebas del virus en todo el país, dando a los 50 estados la capacidad de examinar al 2 por ciento de los residentes en los próximos meses. La administración se enfrenta a una creciente presión para aumentar la capacidad de pruebas, lo que se considera clave para un levantamiento más rápido de los cierres.

Reuters contribuyó a este informe


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