Varios médicos cubanos respondieron a Marrero tras ser responsabilizados por la crisis sanitaria del país, y hablaron sobre las terribles condiciones que viven miles de cubanos en la isla en medio de los brotes de COVID-19, enfermedad causada por el virus del PCCh.
Profesionales de la salud respondieron a la reprimenda dada por el primer ministro de Cuba, Manuel Marrero, que los culpó del empeoramiento de la crisis sanitaria en la isla, a la vez que omitió las precarias condiciones previas a la pandemia en una reunión de trabajo por COVID-19 el pasado 10 de agosto en la provincia de Cienfuegos, que fue trasmitida por Canal Caribe, la televisión estatal del régimen.
«Esta provincia está igual que el resto con la falta de pruebas de antígeno, la falta de PCR (pruebas), la falta de medicamentos, los mismos problemas objetivos. Pero hay más quejas de los problemas subjetivos que de los objetivos. Cuando sumas la falta la medicina y todo eso es inferior a la cantidad de quejas y denuncias por abuso, negligencia, por no recibir visitas. Es increíble todo eso», dijo Marrero en Cienfuegos.
Durante la reunión, Marrero señaló que el empeoramiento de la pandemia fue por el incumplimiento de «lo que está establecido», diciendo que «aquí se están cometiendo errores, aquí hay indisciplinas”.
Tas la declaración, la fisioterapeuta cubana Yudith Estupinan Osorio, le dijo a Reuters que las acusaciones son injustas «porque nos sacrificamos, nos ponemos en riesgo porque es nuestro deber, porque esta fue la profesión que elegimos».
Por su parte, el enfermero Roberto Batista también se sumó al descontento diciendo que «no hay que echarle la culpa a nadie porque al final nadie quiere que pase esto, pasa esto y ya está», según una entrevista con Reuters.
Esto ocurre mientras varios profesionales de la salud están recurriendo a las plataformas de redes sociales para denunciar el empeoramiento de las condiciones sanitarias, con un incremento de muertes por COVID-19, especialmente por la escasez de tanques de oxígeno para los pacientes en terapia intensiva, según reportó Cibercuba la semana pasada.
“Están falleciendo muchas personas por interrupciones con el suministro de oxígeno, el sistema sicológico (sic) de los familiares colapsa al tiempo que colapsa el oxígeno, nadie que no esté pasando por similar situación puede imaginarlo es indescriptible”, escribió en Facebook una usuaria identificada como Isis Morales, en respuesta a un video de las represiones frente a una funeraria de Santa Clara.
Sin embargo, estas protestas o denuncias son inusuales en la isla, ya que Cuba se encuentra actualmente dirigida por el régimen comunista de partido único —el Partido Comunista Cubano (PCC)— liderado actualmente por Miguel Díaz-Canel, que reprime las opiniones o disidencias consideradas opuestas a la línea del partido.
El sector médico —y tras las protestas pacíficas que estallaron el 11 de julio en Cuba— es uno de los que sacó a la luz un hartazgo antiguo y latente sobre las condiciones sanitarias y cuestiones laborales persistentes en la isla que solo se han agravado con la pandemia del COVID-19.
“Quiero denunciar el colapso sanitario que existe en nuestra institución y en muchas instituciones de salud”, dijo al medio cubano Cubanet, Héctor Alejandro Santiesteban Fuentes, residente de segundo de Cirugía. “No es una mentira, no estamos pagados por nadie, es una gran realidad que estamos viviendo hoy en día en nuestra institución y en gran parte del país”.
Siga a Alicia Márquez en Twitter: @AliceMqzM
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
