Algunos legisladores de la Cámara de Representantes pidieron a la Casa Blanca que evacúe a cientos de estadounidenses que están en aislamiento médico en un crucero frente a la costa de Japón por un brote de coronavirus, o COVID-19.
Una carta suscrita por varios legisladores de la Cámara, dirigida por el representante Phil Roe (R-Texas), decía que los ciudadanos estadounidenses retenidos en el Diamond Princess deberían ser evacuados y sometidos a pruebas. La misiva también argumenta que se debería permitirles terminar su cuarentena en los Estados Unidos en lugar de Japón.
«Nos preocupa el nivel de atención existente en el barco, en particular la de los 428 ciudadanos estadounidenses a bordo, así como las preocupaciones de seguridad nacional que plantean las condiciones de cuarentena reportadas», escribieron los legisladores al Departamento de Salud y Servicios Humanos, al Departamento de Estado y al Departamento de Seguridad Nacional.
Los legisladores entienden que la situación es impredecible debido a «la rápida evolución del brote», pero instan a que se realicen pruebas a «los ciudadanos estadounidenses asintomáticos lo antes posible y que se evacue y ponga en cuarentena a quienes den negativo en las pruebas de detección del coronavirus en una instalación con sede en los Estados Unidos».
El Diamond Princess, operado por Princess Cruises, propiedad de Carnival, es el brote más densificado de COVID-19 fuera de China continental. Los funcionarios de salud japoneses confirmaron que más de 200 personas a bordo del buque, que lleva 3,600 personas a bordo entre pasaje y tripulación, tienen el virus.
«Les animamos a actuar rápidamente para asegurar la salud y la seguridad de nuestros ciudadanos», escribieron los legisladores, «y evacuar» a los estadounidenses para «reducir la posibilidad de que el virus se propague más».
En una declaración esta semana, Princess Cruises anunció que algunos pasajeros de edad avanzada o con condiciones preexistentes podrían salir y cumplir sus cuarentenas en tierra.
Estos huéspedes serán sometidos a pruebas de COVID-19, y si se confirma un resultado positivo, esos pasajeros serán llevados a un hospital local para más tratamiento y aislamiento, dijo la empresa el jueves.
«La comida disponible no se ajustará a las preferencias dietéticas, sino a ciertas condiciones médicas. Las comidas serán cajas de estilo bento japonés. No habrá comidas occidentales disponibles», según el operador del crucero.
Los trabajadores sanitarios japoneses confirmaron 44 nuevos casos de COVID-19 el jueves. El buque entró al puerto de Yokohama el 3 de febrero y fue puesto en cuarentena por un período de dos semanas.
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