Otra tragedia comunista: Uno de los peores desastres ecológicos del mundo

11 de marzo de 2017 8:39 AM Actualizado: 22 de marzo de 2019 10:19 PM

El Mar de Aral, alguna vez el cuarto lago más grande del mundo, se ha secado casi por completo debido principalmente a la acción del hombre, lo cual ha sido descrito como «uno de los peores desastres ambientales del planeta».

Originalmente, el lago cubría 68.116 kilómetros cuadrados entre Kazajistán y Uzbekistán. Sin embargo, se ha estado encogiendo constantemente desde los años 60 después de que los proyectos soviéticos de irrigación desviaron los ríos que lo alimentaban, dividiéndolo en cuatro lagos mucho más pequeños.

Ahora solo queda el 10 por ciento del lago original, según Scientific American.

Imágenes recientes de satélite de la NASA revelaron su destrucción incalculable, mostrando que toda la porción oriental se había secado por completo. La porción del este ahora se llama oficialmente el desierto de Aralkum. Según la agencia espacial estadounidense:

«En 2001, la conexión del sur había sido cortada, y la parte oriental más superficial se contrajo rápidamente durante los siguientes años. Especialmente grandes retracciones en el lóbulo oriental del Mar del Sur parecen haber ocurrido entre 2005 y 2009, cuando la sequía lo limitó y luego cortaron el flujo del Amu Darya. Los niveles de agua fluctúan anualmente en años alternativamente secos y húmedos entre 2009 y 2016. En 2014, el lóbulo oriental del Mar Meridional desapareció por completo».

A medida que el «mar de las islas» tierra adentro desapareció, diezmó la industria a lo largo de sus antiguas orillas. El desempleo y las dificultades económicas para muchos pescadores y otros son comunes, mientras que la región está muy contaminada, provocando serios problemas de salud pública.

Según UNICEF, la antigua industria pesquera de Aral empleaba unas 30.000 personas. Ahora, los cascos descompuestos y oxidados de los buques, depositados durante la rápida desaparición del lago, están esparcidos por la cuenca como recordatorios de la mala planificación del gobierno central. En el desierto de Aralkum, se puede ver el extraño espectáculo de un camello pastando junto a un cementerio de barcos.

Los planificadores comunistas tuvieron la no tan brillante idea de desviar el Amu Darya y el Syr Darya para regar un desierto cercano con el fin de cultivar algodón, lo cual sólo funcionó por un corto tiempo antes de que aconteciera una catástrofe ecológica. Fue parte del «Gran Plan de la Transformación de la Naturaleza» de Joseph Stalin para el desarrollo de la tierra que comenzó en la segunda mitad de la década de 1940.

«No se puede ver la sal en el aire, pero se siente en la piel, y se puede sentir en la lengua», dijo una mujer local a la cadena estatal rusa de noticias RT, refiriéndose a los problemas de salud de las personas que viven alrededor donde estaba antes el agua.

Un residente dijo a UNICEF acerca de la primera vez que recordó que las aguas retrocedían.

«Comenzamos a notar un cambio en las aguas alrededor de los años 60», dijo una local.

-El agua solía venir hasta aquí cuando estábamos en la orilla -añadió señalando a su pecho-. «Y luego, lentamente, lentamente comenzó a bajar. En los años 80 el mar se había ido de aquí.

Se estima que el comunismo ha matado al menos 100 millones de personas, no obstante sus crímenes no han sido recopilados y su ideología aún persiste. La Gran Época busca exponer la historia y creencias de este movimiento, que ha sido una fuente de tiranía y destrucción desde su surgimiento.

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Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times

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