La Asamblea General de Pensilvania aprobó y envió al despacho del Gobernador una legislación que busca preservar las libertades médicas de los residentes de Pensilvania. La legislación prohibiría el uso de pasaportes de vacunación y limitaría los poderes del Departamento de Salud.
La patrocinadora principal del proyecto de ley, la senadora estatal Kristin Phillips-Hill, republicana y presidenta del Comité de Tecnología y Comunicaciones del Senado, le dijo a The Epoch Times: “Este proyecto de ley es principalmente para proteger la privacidad de la información personal y garantiza su libertad como ciudadano de la Mancomunidad de Pennsylvania, para que el gobierno no restrinja su capacidad para vivir la vida diaria”.
El proyecto de ley 618 del Senado le prohibiría al estado, así como a los condados o municipios, exigir una prueba de vacunación contra el COVID-19. Les prohibiría a los distritos escolares, a cualquier colegio o universidad exigir una prueba de vacunación si ese colegio recibe algún tipo de subvención estatal. El proyecto de ley también prohibiría el gasto de dinero de los impuestos para crear un sistema de seguimiento electrónico de las vacunas. Por último, el proyecto de ley limitaría al secretario de Salud de Pensilvania a la hora de imponer restricciones unilaterales.
Veto al financiamiento de Pensilvania a Apps móviles para la vacuna anti-COVID
Este proyecto de ley le prohíbe al estado utilizar los recursos de los contribuyentes para desarrollar cualquier tipo de aplicación para teléfonos inteligentes. Phillips-Hill ha notado que, a lo largo de esta pandemia, Pensilvania ha seguido el ejemplo de Nueva York en muchas estrategias de mitigación.
Los funcionarios de Nueva York presentaron, a principios de este año, la aplicación Excelsior Pass como el primer pasaporte de vacunas emitido por el gobierno en el país. Dicho pasaporte proporciona una prueba digital de la vacuna anti-COVID o los resultados negativos de las pruebas. “Gastaron alrededor de USD 2.5 millones del dinero de los contribuyentes allí para crear esa nueva plataforma”, dijo Phillips-Hill.
De manera similar, Pensilvania ha pagado a Insight Global decenas de millones de dólares desde el verano pasado para administrar el programa estatal de rastreo de contactos COVID-19.
“Tuvimos una violación masiva de datos de más de 72,000 residentes de Pensilvania y sus registros médicos personales se hicieron públicos, el Mancomunidad gastó alrededor de USD 30 millones para un contrato de un año con una firma llamada Insight Global”, dijo Phillips-Hill. “La información de salud personal muy sensible estuvo expuesta en Internet durante más de dos meses antes de que nos diéramos cuenta, era una locura”.
Como presidente del comité de Tecnología y Comunicaciones del Senado, Phillips-Hill intentó realizar una audiencia pública, luego el Departamento de Salud retiró su apoyo a la aplicación para teléfonos inteligentes en el último minuto. El 19 de junio, el Departamento de Salud rescindió el contrato con Insight Global.
Phillips-Hill afirmó que este proyecto de ley es muy importante, que garantizaría que el estado no cree una nueva plataforma para teléfonos inteligentes, cuya información de salud personal de las personas podría recopilarse y violarse, como lo que sucedió con Insight Global y el rastreo de contactos. “Cuando hubo una violación masiva de datos de la salud personal de 72,000 residentes de Pensilvania, información muy sensible, no queríamos correr el riesgo de que eso sucediera nuevamente aquí en la Mancomunidad”.
Phillips-Hill dijo que, junto con las senadoras estatales Judy Ward y Michelle Brooks, ambas republicanas y coautoras del proyecto de ley, querían adelantarse a estos temas. “En lugar de ser reactivos, ser proactivos, ser reflexivos y darles a los estudiantes, padres, escuelas y contribuyentes algo de claridad”.
Vacunas anti-COVID vs vacuna contra la gripe
Phillips-Hill enfatizó que las vacunas anti-COVID tienen una gran diferencia con la vacuna contra la gripe. “Cada año, la vacuna contra la gripe se examina por completo y cuenta con la autorización completa de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA). Las tres vacunas anti-COVID aquí en los Estados Unidos todavía están operando bajo algo llamado Autorización de Uso de Emergencia”.
La senadora agregó: “Sé que los fabricantes de esas vacunas anti-COVID están buscando la aprobación total de la FDA, pero ninguno de ellos la tiene en este momento”. Según la ley federal, una persona debe tener la opción de aceptar o rechazar la aplicación del producto.
“Solo me temo que va a ser un desastre en unos meses”. Como madre de tres hijos, Phillips-Hill dijo que está muy preocupada por la recién aprobada vacuna para niños menores de 12 años por el gobierno federal. “Si eres un padre, es una decisión realmente difícil de tomar. ¿Quieres que tu hijo sea el primero de la fila? ¿Quieres esperar?”
Ella sugirió que los padres deben consultar a su médico de familia, deben tener en cuenta su historial médico familiar.
Las escuelas subvencionadas no pueden exigir un pasaporte de vacunación
“Cualquier institución que acepte dólares de los contribuyentes se vería afectada por esta legislación. Si quieren imponer ese mandato, entonces pueden tomar esa decisión con respecto al dinero de los contribuyentes”. Phillips-Hill dijo: “Entonces, los impuestos que pagan los ciudadanos aquí en la Mancomunidad si ese dinero termina en un colegio o universidad, esa escuela no puede exigir que sus estudiantes se vacunen para regresar a la escuela en el otoño”.
Las instituciones de educación superior incluyen instituciones postsecundaria que reciben fondos estatales, incluidos los fondos de la Agencia de Asistencia a la Educación Superior de Pensilvania (PHEAA).
Más de dos docenas de universidades privadas en Pensilvania declararon que exigirán a los estudiantes que se vacunen en el otoño.
El gobernador de Pensilvania, Tom Wolf, un demócrata, ha dicho que vetará este proyecto de ley, aunque ha declarado que no emitirá pasaportes de vacunas estatales. El 28 de junio, dijo que las mascarillas ya no son necesarias en el estado, ya que su oficina informó que el 75 por ciento de los residentes de Pensilvania que tienen 18 años o más han recibido al menos una dosis de la vacuna anti-COVID.
“Simplemente va a crear más confusión, lo que generará más frustración, y espero que pueda ver el proyecto de ley completo y ver su propósito”. Phillips-Hill dijo que, si el gobernador lo veta, tendrán que empezar de nuevo: “Seguiremos abogando por nuestros electores, que están muy preocupados por un mandato gubernamental unilateral y por proteger la privacidad de su información médica”.
La senadora concluyó: “Hay un viejo dicho: ‘si al principio no tienes éxito, inténtalo, inténtalo de nuevo’. Por lo tanto, ciertamente continuaremos siendo los fervientes defensores de nuestros electores en este tema y trataremos de encontrar otro camino hacia el éxito”.
El proyecto de ley SB618 fue enviado al escritorio del Gobernador el 28 de junio para que lo firme, lo vete o permita que se convierta en ley sin su firma.
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