Rastreadores electrónicos de bajo costo salvan vidas de rinocerontes y primates en peligro de extinción

03 de enero de 2019 Noticias

Un pequeño rastreador electrónico de bajo costo con una duración de hasta tres años, más otros dispositivos tecnológicos inteligentes de uso común están ayudando a monitorear el movimiento de los animales en peligro de extinción y preservar su hábitat.

La Fundación SigFox divulgó cómo los está insertando en los cuernos de los rinocerontes. El valor de cada uno de ellos es de alrededor de USD 30, de acuerdo a Reuters.

Rastreador electrónico en el cuerno de un rinoceronte en África. (Fundación SigFox-Captura de vídeo Reuters)

Mediante señales de baja frecuencia, estos dispositivos registran tres veces al día su localización, cambios de la temperatura y eventos que sugieren movilizar equipos de rescate urgentes.

Rastreadores electrónicos en los cuernos los rinocerontes en África ayuda a preservar su existencia. (Fundación SigFox-Captura de vídeo Reuters)

Una información oportuna puede también alertar a las autoridades cuando los animales se acercan a los poblados, dice Marion Moreau, directora de la Fundación Sigfox.

Rastreadores electrónicos en los cuernos los rinocerontes en África ayuda a preservar su existencia. En un mapa se pueden visualizar las señales con su localización tres veces al día. (Fundación SigFox-Captura de vídeo Reuters)

“Ahora ayudamos a guardabosques y expertos en conservación a observar a estos animales a distancia, asumiendo menos riesgos y, especialmente, a anticipar los peligros potenciales que el animal podría correr”, dijo Moreau a la agencia Reuters el 3 de enero.

Rastreadores y otros dispositivos electrónicos ayudan a los conservacionistas a preservar su existencia y su hábitat. (Fundación SigFox-Captura de vídeo Reuters)

Los rastreadores de SigFox y otros dispositivos electrónicos, como un tablet, también ayudan a la célebre primatóloga británica Jane Goodall para monitorear los chimpancés de Tanzania.

Jane Goodall. (Captura de vídeo Reuters)

Goodall dice que el trabajo se comparte con observadores de las aldeas locales que muchas veces no saben leer y escribir pero pueden hacer un click para registrar una foto o mandar una alerta cuando están en terreno.

«Estos monitores forestales de la aldea están muy orgullosos, y no les dictamos lo que deben registrar en el bosque. Ellos se reunieron y eligieron: ‘Bueno, grabaremos un árbol cortado ilegalmente, registraremos una trampa para animales, grabaremos un cartucho en el suelo, grabaremos el avistamiento de un nido de chimpancé, o el avistamiento de un leopardo”.

“Ellos no podían leer ni escribir, pero sí podían presionar los botones y hacer clic en las fotografías”, destaca la primatóloga.

“¿Cómo ha cambiado la tecnología en tu vida?’ Bueno, cuando yo era niña, las nubes solo producían lluvia, ahora producen datos», concluye Jane Goodall.

A continuación:

Cómo los médicos en China se convierten en asesinos