Senado de Florida aprueba resolución que condena al régimen de Nicaragua

Por Débora Alatriste
23 de enero de 2020 6:57 PM Actualizado: 23 de enero de 2020 6:57 PM

El Senado de Florida aprobó la resolución que condena la opresión del pueblo nicaragüense a manos del dictador Daniel Ortega, según publicó en su cuenta de Twitter el senador José Javier Rodríguez.

El senador demócrata por Miami-Dade propuso la resolución #SR546 que «condena al líder de Nicaragua por las atrocidades cometidas contra su propio pueblo».

En la resolución se señala que poco después de la toma de posesión de Ortega en 2006, este «realizó una visita oficial a Irán para reunirse con el Presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad, y durante esa visita Daniel Ortega saludó las ‘revoluciones gemelas’ de Irán y Nicaragua en la ‘lucha contra el imperialismo’ y elogió a la entonces administración cubana como «hermanos en nuestra lucha contra la escoria imperialista».

Además, declara que el mandatario de Nicaragua «se alineó estrechamente con el difunto presidente venezolano Hugo Chávez y que muchos los ven como cortados del mismo tejido ideológico destructivo y autoritario» ya que al igual que Chávez «ha manipulado las leyes electorales; ha eliminado los controles y equilibrios en el gobierno de Nicaragua mediante el control de la policía nacional; ha cooptado a la Asamblea Nacional y a la Corte Suprema de Nicaragua; ha restringido la libertad de expresión, y ha sofocado a los líderes de la oposición y a otros críticos».

De acuerdo con el documento, los reporteros y medios de comunicación han sufrido la represión por parte del régimen con acciones como el allanamiento de oficinas de medios independientes, ataques contra reporteros, cargos criminales contra los periodistas. Además, se «ha expulsado del país a los periodistas extranjeros y a los observadores internacionales de los derechos humanos».

En la resolución se menciona que en 2018, utilizando las fuerzas gubernamentales y paramilitares, Ortega «lanzó una violenta represión contra los manifestantes desarmados, muchos de ellos estudiantes y jóvenes nicaragüenses, infligiendo abusos que incluyeron golpear a los manifestantes capturados durante los arrestos y detenciones, a veces negándoles atención médica urgente; violar a los detenidos, incluyendo el uso de tubos de metal y armas de fuego, submarinos, descargas eléctricas, quemaduras con ácido, simulacros de ejecuciones, desnudez forzada, arrancar las uñas, y, en algunos casos, obligar a los detenidos a grabar confesiones autoincriminatorias».

Desde el inicio de la crisis sociopolítica en Nicaragua en abril de 2018, se contabilizan entre 328 y 651 muertos, pero el régimen de Ortega solo reconoce 200 y asegura que las protestas son un intento de “golpe de Estado”.

Daniel Ortega firmó un acuerdo que «otorga derechos sobre una gran cantidad de tierras de Nicaragua a una empresa china por 50 años con una opción adicional de 50 años, lo que destruiría las comunidades indígenas y la diversidad ambiental de Nicaragua e invitaría a una potencia extranjera a dirigir el mayor negocio potencial en Nicaragua sin involucrar a los trabajadores locales», afirma el documento del senador.

«Agradezco a mis colegas por estar unidos unánimemente a favor de los derechos humanos, de la democracia y del pueblo nicaragüense», dijo en noviembre José Javier Rodríguez,después de que la resolución fue aprobada por unanimidad en su primer comité.

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