Senadora Sinema habla después que activistas de izquierda la siguieran y grabaran dentro de un baño

Por Jack Phillips
04 de octubre de 2021 2:54 PM Actualizado: 04 de octubre de 2021 2:54 PM

La senadora Kyrsten Sinema (D-Ariz.) emitió el lunes una extensa declaración condenando las acciones de los manifestantes de izquierda que la siguieron al interior de un baño de mujeres y la grabaron mientras le hacían reclamos.

«Varios individuos interrumpieron mi clase en la Universidad Estatal de Arizona», dijo Sinema, añadiendo que «estos individuos filmaron y publicaron videos de mis estudiantes sin su permiso, incluyendo imágenes tanto de mis estudiantes como mías usando el baño».

Aunque Sinema dijo que respeta el derecho a manifestarse, el comportamiento del grupo activista el domingo en Phoenix «no fue una protesta legítima», y añadió: «Es inaceptable que las organizaciones activistas instruyan a sus miembros para que se pongan en peligro participando en actividades ilegales, como entrar en edificios universitarios cerrados, interrumpir los entornos de aprendizaje y filmar a los estudiantes en el baño».

Según la ley del estado de Arizona, es ilegal filmar a personas mientras están en el baño. The Epoch Times se ha puesto en contacto con la oficina de Sinema para saber si presentará cargos.

Según el vídeo publicado en Internet, aparentes activistas de inmigración siguieron a Sinema hasta un baño en la Universidad Estatal de Arizona y le pidieron que aprobara el gigantesco proyecto de ley de reconciliación presupuestaria de USD 3.5 billones, el cual ha estado bloqueado durante el proceso deliberativo en el Congreso.

El grupo, Living United for Change in Arizona (LUCHA), Vivir Unidos por el Cambio en Arizona en español, confrontó a Sinema y afirmó: “Necesitamos el plan ‘reconstruir mejor’ ahora mismo”, refiriéndose al eslogan de campaña del presidente Joe Biden.

“Tocamos puertas por ti”, le dijo a Sinema la persona anónima que estaba filmando mientras ella estaba en el baño. Sinema ignoró a los reclamantes y se lavó las manos antes de entrar al aula mientras los activistas coreaban: «¡Construye mejor, respalda el proyecto de ley!». La persona que estaba filmando, que se hacía llamar Blanca, también le dijo a la senadora de Arizona: «Necesitamos esta vía a la ciudadanía».

«No tendríamos que recurrir a la confrontación» con Sinema «si ella se reuniera con las comunidades que la eligieron», escribió LUCHA en un post de Twitter.

Según el sitio web del grupo, LUCHA es «una organización de base dirigida por sus miembros que construye el poder con las familias trabajadoras de Arizona para avanzar en la justicia social, racial y económica para todos».

Los principales miembros demócratas del Congreso, incluido el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer (D-N.Y.) y la presidente de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), no han emitido declaraciones públicas sobre el incidente, aunque varios funcionarios republicanos actuales y anteriores criticaron a los activistas.

El exasesor de la administración Trump, Stephen Miller, escribió en Twitter: «Una extranjera ilegal está acechando a una senadora estadounidense para exigir la aprobación del proyecto de ley de reconciliación de Biden porque incluye una amnistía masiva para los ilegales. En una democracia que funcione, el ICE deportaría rápidamente a esta persona, pero bajo el nuevo edicto de Biden (como sabe la infractora de la ley) es inmune a la expulsión».

El incidente se produce en medio de negociaciones estancadas tanto en el proyecto de ley de reconciliación como en un proyecto de ley de infraestructuras de USD 1,2 billones. La presidente del Caucus Progresista de la Cámara, la representante Pramila Jayapal (D-Wash.), le dijo a CNN el domingo que los progresistas de la Cámara no aprobarán un proyecto de ley de reconciliación por una suma inferior a USD 1.5 billones, y su caucus ha dicho que el proyecto de ley de infraestructuras no se puede aprobar a menos que la medida de reconciliación sea aprobada en el Senado.

Otro demócrata moderado, el senador Joe Manchin (D-W.Va.), también se ha enfrentado a la presión de la izquierda sobre el proyecto de ley de reconciliación presupuestaria. Un presunto grupo de kayakistas se acercó a la casa flotante de Manchin en Washington D.C. para hacerle reclamaciones en voz alta al senador.

«Acabamos de aprobar un presupuesto del Pentágono de USD 788,000 millones», gritó un activista. «Y eso en 10 años serán USD 6 billones».

«¿Cuánto crees que gastamos en cosas no discrecionales, básicamente no relacionadas con la defensa? Lo mismo», dijo Manchin en respuesta.

La oficina del fiscal general de Arizona, Mark Brnovich, la Universidad Estatal de Arizona y LUCHA no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.

Zachary Stieber contribuyó a este artículo.


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