TORONTO —Teresa Uszacki, pintora y anteriormente dueña de una galería de arte, dice que vio luces alrededor de los artistas de Shen Yun cuando asistió al espectáculo en el Four Seasons Centre el 9 de abril.
«Era como un aura, una radiación de color [alrededor de los cuerpos de los bailarines]», dijo Uszacki. «Es un espectáculo muy curativo y edificante que sale del alma y toca el alma».
Con sede en Nueva York, Shen Yun es la principal compañía de danza clásica china y música del mundo.
«A través de una danza y una música impresionantes, los artistas de Shen Yun hablan de una época en la que los seres divinos caminaban sobre la Tierra, dejando atrás una cultura que inspiró a generaciones», dice el sitio web de Shen Yun.
«La antigua sabiduría china, impregnada de espiritualidad y valores budistas y taoístas, dio origen a todo, desde las innovaciones médicas hasta la ópera, la danza, la arquitectura e incluso las artes marciales. Pero tras décadas de régimen comunista, gran parte de esta cultura inspirada en lo divino ha sido destruida u olvidada».
Los artistas de Shen Yun, que formaron la compañía en 2006, pretenden revivir este patrimonio cultural con una historia de 5000 años y raíces profundamente espirituales.
La Sra. Uszacki dijo que disfrutaba de la espiritualidad que transmite el espectáculo de Shen Yun y de la conexión que muestra entre los seres humanos y lo divino.
«La conexión espiritual con el creador, con lo divino, la tenemos dentro de nosotros. Necesitamos abrir eso dentro de nosotros y saber que la vida se origina en una dimensión superior. Siento que este espectáculo fue un hermoso recordatorio de ello. Fue un regalo maravilloso», dijo Uszacki.
«Espero que los bailarines, los intérpretes, sepan lo mucho que apreciamos su danza».
—Teresa Uszacki
«Espero que los bailarines, los intérpretes, sepan lo mucho que apreciamos su danza, el mensaje espiritual, porque ha sido edificante para nosotros y lo es para los espectadores».
Viendo Shen Yun, la Sra. Uszacki dijo que sentía una sensación de «serenidad». «Para que los bailarines bailen con tanta belleza y serenidad, siento que lo sienten en su corazón», dijo.
«Como artista, ya sea bailarín o pintor, solo puedes expresar lo que sientes. (…) Había pureza en ellos, y esa pureza salía a través de la actuación».
Jitka Mrazek, una empresaria y profesora ya jubilada que asistió a Shen Yun con la Sra. Uszacki, también disfrutó del aspecto espiritual del espectáculo.
«Lo disfruté muchísimo», dijo la Sra. Mrazek, mientras admiraba la belleza del espectáculo en general.
«Este espectáculo fue increíble, hermoso. Apreciamos mucho la coreografía. Los diseños de los vestuarios [eran] absolutamente increíbles, como la combinación de colores y la forma en que los han unido».
Elogiando la valentía de los artistas de Shen Yun al cumplir su misión, la Sra. Mrazek dijo que Shen Yun ofrece esperanza a la gente.
«Los artistas no solo son hermosos bailarines e intérpretes, sino que [lo que hacen] también requiere valor», dijo.
La Sra. Uszacki dijo que se siente afortunada por la gira de Shen Yun en Canadá y espera que algún día la gente de China pueda verlo también. Shen Yun no puede actuar en China bajo el régimen comunista actual.
«Este espectáculo es uno de los más bellos que he visto en toda mi vida, así que estoy muy agradecida por haber tenido la oportunidad de verlo», dijo.
Con reportajes de Tongyu Deng.
The Epoch Times considera a Shen Yun Performing Arts como el evento cultural más importante de nuestro tiempo y ha cubierto los comentarios del público desde la creación de la compañía en 2006.
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