LAS VEGAS—La diseñadora de interiores Erin Pratt, su madre Saundra y su hijo Ayden asimilaron la historia y las maravillas de Shen Yun Performing Arts en el Smith Center for the Performing Arts el 29 de febrero de 2020, y las tres generaciones encontraron alegría en el experiencia.
«Fue en gran medida una malla de pasado y presente, y con suerte futuro, que veremos más de eso», dijo Erin. Los Pratts apreciaron el hecho de que Shen Yun, con sede en Nueva York, está reviviendo una civilización de 5.000 años rica en cultura, que una vez estuvo casi perdida en China hace 80 años.
«Tienes tres generaciones aquí, así que fue muy divertido de ver, y creo que todos obtuvimos algo diferente», dijo Erin.
Saundra se sintió afortunada de ver algo que ni siquiera se puede ver en China, donde se originaron las formas de arte en el escenario.
«Creo que era importante que pudiéramos ver algo que ellos no pueden ver en su país de origen», dijo. «Y es impresionante (…) que podamos expresarlo [en Occidente] y disfrutar del aspecto visual y cultural del espectáculo que los chinos de origen natural no pueden disfrutar en este momento».
«Así que somos afortunados, estamos muy bendecidos de poder ver eso, y me alegra que mi nieto lo haya disfrutado», dijo Saundra. “Estaba sentado en el borde de su asiento la mayor parte del tiempo. Apenas parpadeó».
Ayden, que actualmente está interesado en estudiar idiomas y que ha practicado danza, orquesta, banda y coro, quedó impresionado con la gran escala de la producción de Shen Yun.
Si bien la compañía es conocida por ser la compañía de danza clásica china más importante del mundo, una actuación de Shen Yun emplea otros aspectos únicos como una orquesta que combina Oriente y Occidente, solistas de bel canto y una pantalla de fondo animado que dejó sin aliento a los Pratts.
«Fue un buen momento», dijo Ayden, impresionado con la forma en que los bailarines podían aparecer en el escenario un momento y volar por el aire en la pantalla al siguiente. «Realmente estaba ahí afuera».
Ayden disfrutó aprendiendo sobre la historia de la cultura china de una manera tan ingeniosa y dijo que no conocía las técnicas acrobáticas, los saltos, y otras volteretas, originadas en la danza clásica china.
«Eso fue algo que aprendí también», intervino Erin.
Con el ojo de una diseñadora, Erin disfrutó de las fascinantes combinaciones de colores, diseño de escenarios y coreografías.
«Fue hermoso, fue elegante, muy conmovedor», dijo. «Realmente disfruté los vestuarios y los colores, y las diferentes formaciones de danza».
Para Erin, estas bellas facetas se unieron para contar una historia importante de la espiritualidad perdida de China.
«Realmente creo que [fue un mensaje] de libertad de expresión, me refiero a poder expresarse a través del movimiento y la narración de cuentos a través de la danza, expresar su cultura, libertad de expresar su religión», dijo. «Eso fue realmente interesante».
Los Pratts disfrutaron de vislumbrar las muchas dinastías de la antigua China durante más de 5.000 años, y varias danzas étnicas y danzas populares de muchas regiones de China.
Hizo que Saundra pensara cómo debe haberse desarrollado la cultura con el tiempo y qué se recopiló de una región a otra en términos de cultura.
Agregó que es una lástima que Shen Yun no pueda presentarse en China, «pero es una alegría para nosotros, y lo apreciaremos por ellos, y esperamos que algún día puedan apreciarlo ellos mismos. Fue una bendición para nosotros».
Con informes de Linda Jiang.
The Epoch Times considera a Shen Yun Performing Arts como el evento cultural más importante de nuestro tiempo y ha cubierto los comentarios del público desde la creación de la compañía en 2006.
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