WASHINGTON—Los primeros resultados del programa de zonas de oportunidad, el cual ha atraído decenas de miles de millones de dólares a comunidades de bajos ingresos, son prometedores y las mejoras políticas son necesarias para maximizar su contribución a la recuperación económica de la pandemia, según un grupo defensor.
Una amplia gama de inversiones privadas han aprovechado las exenciones fiscales proporcionadas a través de las zonas de oportunidad, una iniciativa bipartidista que fue creada por la Ley de Empleos y Reducción de Impuestos de 2017.
Casi 210 inversiones de alto impacto en 41 estados y el Distrito de Columbia estuvieron dirigidas hacia estas zonas, según un nuevo informe del Economic Innovation Group (EIG), una organización de defensa cofundada por Sean Parker, un empresario de Silicon Valley.
Los proyectos notables en las zonas incluyen inversiones en viviendas asequibles para personas de bajos ingresos, tecnologías limpias, centros de atención médica, edificios históricos, y remodelaciones de terrenos abandonados (revitalización de tierras o estructuras contaminadas y abandonadas).
El programa está «produciendo una gama enormemente diversa de tipos de inversión en comunidades de todos los tamaños», dijo Kenan Fikri, director de investigación del EIG a The Epoch Times. «Y se está probando a sí mismo como concepto y como modelo».
El programa se promulgó a fines de 2017, pero el capital solo comenzó a fluir a estas zonas en gran escala en 2020, luego de que el Departamento del Tesoro finalizó sus regulaciones en diciembre de 2019.
La comunidad inversora acaba de empezar a comprender cómo funcionan las zonas de oportunidad, pero queda mucho por hacer para educar a los inversores y líderes locales sobre este incentivo fiscal, según el informe. Además, se necesitan más ajustes a la política para asegurarse de que el programa pueda cumplir mejor su promesa.
Los desarrollos de viviendas asequibles, por ejemplo, son algunos de los acuerdos más difíciles de lograr. El EIG cree que la nueva administración podría tomar algunas medidas para promover desarrollos de viviendas asequibles en zonas de oportunidad al facilitar que los incentivos de las zonas de oportunidad funcionen con otras herramientas de financiación de viviendas asequibles, como los créditos fiscales para viviendas de bajos ingresos.
El año pasado, la administración Trump estimó que hasta 2019, casi UDS 75,000 millones en capital privado fluyeron hacia zonas de oportunidad, y el 70 por ciento de eso probablemente representó una nueva inversión que de otra manera no se habría dirigido a las comunidades en dificultades.
Según una encuesta de administradores de fondos de oportunidad realizada por Novogradac, el volumen de dólares de inversión en el radar de los administradores de fondos se triplicó con creces entre diciembre de 2019 y diciembre de 2020.
La verdadera escala de inversiones en zonas de oportunidad seguirá siendo un misterio hasta que el Servicio de Impuestos Internos publique estadísticas resumidas de las presentaciones de impuestos de fondos de oportunidad, según el informe.
Además, las preocupaciones sobre la privacidad de los contribuyentes probablemente limitarán los datos disponibles sobre transacciones e inversores, lo CUAL dificultará que los legisladores y los investigadores evalúen los resultados de la política a lo largo del tiempo.
«Esta es la tarea del Congreso para completar el asunto inconcluso de las zonas de oportunidad», dijo Fikri. «Ambos partidos han reconocido que este es un experimento de políticas realmente abierto y tenemos que recopilar los datos para saber qué funciona y cómo mejorarlo».
La pandemia creó mucha incertidumbre para los inversores en zonas de oportunidad, especialmente durante los primeros meses de la crisis sanitaria del año pasado. Pero desde entonces las preocupaciones se han disipado con una fuerte recuperación del mercado.
Los inversores pueden diferir los impuestos sobre las ganancias de capital invirtiendo en zonas de oportunidad. Por lo tanto, el repunte del mercado ha creado un flujo constante de capital potencial para las zonas de oportunidad, dijo Fikri.
Los reguladores también ampliaron algunos plazos de inversión para garantizar que los inversores sigan participando en el programa.
Hasta ahora, las inversiones inmobiliarias han constituido la mayor parte de los proyectos. Según el EIG, los legisladores y la nueva administración deberían buscar soluciones para impulsar las inversiones en instalaciones de fabricación y empresas de nueva creación en las zonas, que ha sido el principal objetivo del programa desde el inicio.
La idea de zonas de oportunidad fue introducida por primera vez por el EIG en un documento de 2015 titulado «Liberar capital privado para facilitar el crecimiento económico en áreas en dificultades«, para ayudar a abordar la pobreza persistente en las comunidades estadounidenses y la recuperación desigual después de la Gran Recesión.
La idea fue promovida por los senadores Tim Scott (R-S.C.) y Cory Booker (D-N.J.) y los representantes Pat Tiberi (R-Ohio) y Ron Kind (D-Wis.) En 2017, y luego se incluyó en el plan de reforma fiscal del presidente Donald Trump.
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