En medio de una escasez preocupante el sector médico marcha en multitud contra Maduro
Una multitudinaria manifestación del sector de la salud tuvo lugar en la mañana de este jueves en Venezuela.
Médicos, enfermeros y un sinnúmero de agentes sanitarios marcharon exigiendo a Maduro por un aumento de salarios y mayor disponibilidad de insumos.
Hoy en día, un médico experimentado percibe un salario aproximado de 700 bolivarianos, lo que equivale a 100 dólares. En un país cuya inflación alcanza cifras desorbitantes, dicha remuneración apenas alcanza para subsistir.
Workers of the health sector in #Venezuela take part in a protest due to the shortages of medicines | Photos: @mabellog pic.twitter.com/mxUsXvVMep
— Reuters Venezuela (@ReutersVzla) August 16, 2018
La manifestación transcurrió de manera pacífica pero con el resquemor de los ciudadanos a ser oprimidos por el régimen izquierdista, como muchas veces sucede.
“Sentimos que estamos tratados como que si fuésemos delincuentes; y no somos delincuentes, somos trabajadores de la salud”, dijo Carolina Torres, nutricionista, aclarando que acudió a la marcha con colegas de otros gremios de la salud que pasan por las mismas circunstancias difíciles.
La policía acorraló la marcha y frenó su paso por las calles, pero la respuesta de los asistentes siempre fue tranquila. Incluso participaron niños, como puede verse en la siguiente publicación compartida en Twitter, donde una niña enfrenta a la barricada de la Policía Nacional y lee su derecho a manifestarse pacíficamente en la Constitución Nacional.
Una niña lee el artículo 68 de la Constitución venezolana sobre el derecho a la manifestación pacífica.
La Policía Nacional impide el paso a quienes protestan por falta de insumos y bajos sueldos en el sector salud. #Venezuela #16Agosto pic.twitter.com/bISXEecLbc— Cristian Crespo F. (@cristiancrespoj) August 16, 2018
El sector médico no es el único en peligro; la escasez en general se refleja en toda la sociedad. Tanto es así, que obliga a una gran mayoría de familias venezolanas a reducir drásticamente su ingesta de alimentos y el acceso a otros víveres indispensables.
La crisis política y económica del gobierno de Maduro vuelve al pueblo de su país cada vez más vulnerable y parece desatender la ayuda que hace tanto tiempo necesitan.