Cae meteorito en el techo de una casa en Japón y resulta que tiene 4.600 millones de años
Científicos japoneses confirmaron el primer caso de un meteorito que impactó contra un edificio en el país asiático en los últimos 15 años, según anunció el Museo Nacional de Ciencias Naturales.
Se trata de una roca del tamaño de un puño y de unos 550 gramos, que fue bautizada como «Meteorito de Komaki» en alusión a la localidad del centro de Japón donde fue hallada por un vecino después de que se estrellara contra el tejado de su vivienda.
Al caer, el cuerpo celeste produjo un agujero en la casa y se partió en tres piezas de 10, 5 y 3 centímetros. Los fragmentos fueron encontrados más tarde en el jardín.
Fue una vecina quien llevó los fragmentos al museo, donde los científicos notaron que se atraían mediante un imán.
El meteorito impactó en Komaki el pasado 26 de septiembre, y desde entonces fue analizado por científicos del citado museo nacional para determinar su origen y su composición, reportó el diario nipón Asahi.
Especialistas del Museo Estatal de Ciencia de Japón concluyeron que el fragmento forma parte de un meteorito de 4.500 millones de años, informó el canal NHK.
El último caso de un meteoroide que cayó sobre un edificio en Japón tuvo lugar en 2003 en Hiroshima (oeste), mientras que hasta la fecha han caído un total de 52 meteoritos en el archipiélago nipón que hayan sido reconocidos por la Meteoritical Society, la organización internacional de referencia en la materia.
El Meteorito de Komaki será ahora enviado a este organismo con sede en Estados Unidos para que sea incluido en el registro global de cuerpos celestes que han impactado en la Tierra.
El Museo Estatal de Ciencia planea registrar las piezas bajo el nombre de ‘meteorito de Komaki‘ en la Sociedad Meteórica Internacional, según reportó la televisión japonesa.
En los Países Bajos, un caso similar
En junio de 2017, científicos del Museo Naturalis de Leiden, en los Países Bajos, anunciaron el descubrimiento de un meteorito muy similiar, que pesa alrededor de 500 g., y cuya antigüedad se calculó en unos 4.500 millones de años, informó Dutchnews.nl.
El géólogo Leo Kriegsman, del Centro de Biodiversidad Naturalis, afirmó que esta roca es el sexto meteorito recuperado en este país, y fue hallada en el mes de enero después de estrellarse contra el tejado del hogar de una familia en el pueblo de Broek en Waterland, en la provincia de Noord-Holland.