El director de El señor de los anillos, Peter Jackson, le puso sonido, voces y color a las filmaciones mudas del Museo Imperial de Guerra de Londres.

Restauró las viejas cintas de la Primera Guerra Mundial (28 de julio de 1914 a 11 de noviembre de 1918), recuperó los diálogos que se dijeron y agregó entrevistas originales hechas a los soldados.

La nueva filmación de Jackson se llama «They Shall Not Grow Old«: «Ellos no llegarán a viejos», y fue estrenada este mes en memoria de los 100 años del fin del conflicto.

Jackson contrató a lectores forenses de labios y ellos repasaron las viejas películas mudas, revelando las conversaciones que tuvieron lugar en las trincheras y en los campos de batalla hace 100 años, reportó Reuters.

Las voces las pusieron unos actores. “No tenían ninguna grabación de sonido”, dijo el aclamado director neozelandés.

“Pero lo que hicimos… fue que teníamos lectores de labios, pues teníamos lectores de labios forenses, ya que hay profesionales que conoces, especialmente para el trabajo de la policía en filmaciones de cámaras de seguridad que son silenciosas”, destacó en la entrevista.

“Así que tuvimos un par de esas personas que miraban las imágenes en silencio y nos decían bien, este tipo está diciendo eso ‘y este tipo está diciendo’ eso’, y luego hicimos que los actores hicieran esas líneas».

Después de restaurar las viejas cintas, Jacson agregó entrevistas originales hechas a soldados que pelearon en la Primera Guerra Mundial , obtenidas de 600 horas de cinta de los archivos de la BBC.

“Usamos voces e imágenes, obviamente, pero ya saben que ha habido muchos documentales hechos sobre la Primera Guerra Mundial de todo tipo de formas, tamaños y descripciones, y me decidí por esto. uno que usa estrictamente las voces de los tipos que lucharon allí. Así que no hay historiadores, no hay narración, nada porque no estaba contando la historia de la Primera Guerra Mundial».

«Quiero decir que no es la historia de la guerra, es la historia de La experiencia humana de luchar en ella, en la guerra«, dijo Jacson.

Para la restauración se usaron computadoras, no solo para agregar color a las imágenes en blanco y negro, sino también para eliminar imperfecciones y otros detalles. Lo más difícil fue cambiar del blanco y negro viejo al blanco y negro corregido, luego la tarea fue más fácil pero más laboriosa… consistió en agregar color.

La computadora realmente genera, toma el cuadro antes del cuadro después, y genera estos cuadros que no existen con el material original y crea sus propios cuadros. Son increíbles los resultados que obtienes. Y luego la colorización que no es nada difícil, pero es muy laboriosa (…) cuanto más gastas, más tiempo pasas en ella, mejor obtienes”.

“Debido a que la guerra era una guerra en colores, ese era el propósito de lo que estábamos haciendo… era tratar de hacer una película donde escuchas a la gente que estaba allí y la ves como la vieron ellos y ellos la vieron en Color, no en blanco y negro, obviamente», destacó el director al presentar su nueva obra que está prestando gran interés internacional.

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