HOUSTON, Texas—Angela Hayes se deshizo en elogios tras asistir al espectáculo de danza clásica china y música, Shen Yun Performing Arts, en el Wortham Center Brown Theater de Houston, Texas, el 18 de septiembre.
Hayes, con casi 30 años de experiencia como educadora de danza en una escuela pública de Texas y luego como directora de un grupo de artes escénicas, dijo que Shen Yun fue espectacular.
«No solo aprecié el bello movimiento, sino el arte que hay en la producción», dijo. A Hayes le encantó cómo las historias fluyeron desde la representación de la cultura tradicional hasta los acontecimientos más recientes en China.
La cultura tradicional china estuvo al borde de la extinción tras la llegada al poder del Partido Comunista Chino en 1949. La compañía Shen Yun, con sede en Nueva York, pretende presentar la «China antes del comunismo» y revivir la cultura tradicional china a través de la danza y la música. También presenta danzas que ilustran la persecución actual contra la antigua disciplina espiritual china Falun Dafa, cuyas creencias se remontan al principio de los tiempos.
«La danza es espectacular. Están bellamente entrenados, se nota (…) todo lo que hacían era encantador», dijo Hayes. «Había una encantadora atención a los detalles. Fue un espectáculo fabuloso».
La exeducadora de danza formada en ballet remarcó lo fluidos, naturales y sincronizados que eran los movimientos de los bailarines. «Es parte de su respiración, es parte de su movimiento, no hay desconexión», dijo. «Es encantador de ver».
Hayes quedó muy impresionada por la forma en que Shen Yun coordinó el espectáculo.
«Nos inspiró a tener pensamientos hermosos, nos inspiró a pensar más alto». — Angela Hayes
«Me encantó el flujo de la solista con el conjunto, de ida y vuelta. La narración fue encantadora (…) fue muy dulce y honesta, y fue inspiradora».
«Había un mensaje», añadió. «Nos inspiró a tener pensamientos hermosos, nos inspiró a pensar más alto. [Debemos] trascender los tiempos modernos y pensar en la belleza del mundo».
«Siento que se notó la espiritualidad. Vi la belleza del país, las danzas y las leyendas. Eso es lo que realmente me llegó al corazón».
«Sentí que estaba viendo espíritus afines, porque yo misma fui una artista. Veía a los artistas en el escenario, los veía en los momentos de alegría, en los momentos de tristeza. Me encantó la forma en que me hablaron», dijo.
La destrucción de la cultura tradicional china por parte del Partido Comunista Chino entristeció a Hayes.
«Como personas muy conservadoras aquí en Estados Unidos, estamos en la lucha. Estamos en el mismo tipo de guerra espiritual en este momento. Uno de los mensajes (…) en todo momento, fue mirar más allá de estos pensamientos modernos y volver a lo divino, y pensar en lo que es el verdadero arte (…) qué belleza hay en el movimiento, qué belleza hay en la experiencia del canto y [la musicalidad]».
Muchos de los actos utilizan la tecnología patentada de Shen Yun que da vida a su telón de fondo digital animado. «Me fascinó mucho la pantalla, la tecnología de la pantalla, y cómo se integraba, y luego la astucia en cómo se escenificaba. Fue muy bonito de ver y me impresionó mucho ver que realmente patentaron la tecnología (…) la acción en vivo con el video».
Con la experimentada mirada de una bailarina, Hayes ensalzó el vestuario de Shen Yun —los espectaculares y vibrantes colores— y la forma en que se utilizó el color para crear experiencias durante el espectáculo.
Reportaje de Mary Lei y Diane Cordemans.
The Epoch Times considera a Shen Yun Performing Arts como el evento cultural más importante de nuestro tiempo y ha cubierto los comentarios del público desde la creación de la compañía en 2006.
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