Censura mediática: el 56% de los Estados han aprobado el porte de armas constitucional
Luisiana se convirtió en el vigésimo octavo Estado de la nación en aprobar algo conocido como el porte constitucional.
En términos prácticos, las leyes de porte constitucional fortalecen los derechos de la Segunda Enmienda de las personas que viven en esos Estados particulares, al permitir que los ciudadanos porten sus armas ocultas sin necesidad de un permiso emitido por el gobierno.
Básicamente, siempre y cuando sea un propietario legal de armas de fuego, ahora se le permite portarlas ocultas dentro del Estado, con la idea de que tal derecho le es otorgado por la Constitución misma.
Esencialmente, en estos Estados, la Segunda Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos es el único «permiso» que se necesita para llevar un arma.
A pesar de la retórica amplificada por los medios de comunicación principales sobre cómo «limitar el acceso a las armas es la opinión consensuada popular», en realidad, ocurre exactamente lo contrario.
Durante los últimos 30 años, personas de todo el país eligieron representantes para sus legislaturas estatales locales, para que expandieran el derecho a las armas.