El CEO de Tesla y SpaceX, Elon Musk, hizo una oferta el jueves para privatizar Twitter por USD 54.20 por acción, o cerca de USD 43,000 millones en efectivo, luego de haber rechazado una propuesta de un puesto en la junta.
La oferta de Musk, que es un 18 por ciento más alta que el último precio de cierre, está bajo consideración, dijo la junta.
Adam Candeub, profesor de derecho en la Universidad Estatal de Michigan, dijo que las fuerzas del status quo tratarán de averiguar cómo impedir que se produzca esta adquisición.
“Twitter es propiedad de los accionistas y los directores tienen que actuar de la manera que más les convenga, no de la manera que les permita mantener el control de la corporación», dijo a The Epoch Times.
«Si rechazan un precio muy favorable, habrá incumplimiento de su deber legal y podría haber muchas consecuencias legales», agregó.
En una carta dirigida al presidente de Twitter, Bret Taylor, Musk declaró que la empresa de redes sociales «necesita transformarse en una empresa privada».
“Mi oferta es mi mejor y última oferta y, si no se acepta, tendría que reconsiderar mi posición como accionista”, dijo Musk, amenazando con considerar vender su participación actual en la empresa.
“Esto posiblemente podría conducir que caigan el precio de las acciones y decepcionar a los accionistas de Twitter”, escribió Ali Mogharabi, analista senior de acciones de Morningstar en una nota.
“Creemos que la probabilidad de que Twitter lo acepte es probablemente inferior al 50 %”, afirmó. “Sin embargo, creemos que la junta directiva también puede estar ponderando si debe discutir cambios de liderazgo, como la sustitución del CEO Parag Agrawal, con Musk, ya que eso podría disminuir la probabilidad de que Musk venda sus acciones si la oferta es rechazada».
Si se rechaza la oferta de Musk, dijo Mogharabi, es posible que aún intente lanzar un sitio de redes sociales similar para competir con Twitter.
50 por ciento de ganancia en acciones
La oferta de Musk llegó poco más de una semana luego de anunciar una participación del 9.2 por ciento en la empresa.
Un alto ejecutivo de una empresa de gestión de inversiones que desea permanecer en el anonimato dijo que los accionistas de Twitter tienen mucho que pensar.
«Están mirando el umbral de un mercado bajista, una recesión o algo peor. Y llega alguien y le regala un 50% de ganancia en sus acciones», dijo, y se preguntó «¿Qué haría usted?».
“Él ya ha hecho subir el precio de sus acciones en dos dígitos desde que anunció su participación», agregó. «Entonces, los principales accionistas—no los monitores digitales de la trastienda, sino los Blackrocks y Vanguards del mundo—tienen mucho que reflexionar».
The Vanguard Group, Morgan Stanley, BlackRock y State Street se encuentran entre los mayores accionistas de Twitter.
Musk dijo que estaba ofreciendo comprar “el 100 % de Twitter por USD 54.20 por acción en efectivo, una prima del 54 % respecto al día anterior a que empezara a invertir en Twitter y una prima del 38% respecto al día anterior a que se anunciara públicamente mi inversión».
La carta de Musk a Taylor dejó en claro que quiere reorganizar las políticas de libertad de expresión de Twitter.
“Invertí en Twitter porque creo en su potencial para ser la plataforma de la libertad de expresión en todo el mundo, y creo que la libertad de expresión es un imperativo social para que la democracia funcione”, escribió.
“Sin embargo, desde que hice mi inversión ahora me doy cuenta de que la empresa no prosperará ni cumplirá con este imperativo social en su forma actual. Twitter necesita transformarse en una empresa privada”, continuó.
“Twitter tiene un potencial extraordinario. Lo liberaré».
Musk compró una participación del 9.2 por ciento en la plataforma de redes sociales por USD 2890 millones el 4 de abril. El CEO de Tesla, que es un usuario asiduo de Twitter, expresó recientemente su descontento con las reglas de la plataforma de redes sociales.
Antes de convertirse en accionista de la empresa, Musk acusó a Twitter de «no adherirse a los principios de la libertad de expresión» y afirmó que está considerando crear un nuevo sitio de redes sociales.
El mes pasado, Musk realizó una encuesta a sus 80 millones de seguidores en Twitter y les preguntó si la plataforma se adhería a los valores de la libertad de expresión. Recibió 2 millones de votos, con más del 70 por ciento de los que votaron no.
Las acciones de Twitter aumentaron casi un 20 por ciento desde que el multimillonario se convirtió en el principal accionista.
Musk ha afirmado que la plataforma obstaculiza la libertad de expresión, especialmente desde que Parag Agrawal reemplazó a Jack Dorsey como director ejecutivo. Musk ya declaró que no estaba de acuerdo con el nombramiento de Agrawal.
Twitter declaró que la propuesta será revisada por su junta directiva y que cualquier respuesta sería en el mejor interés de «todos los accionistas de Twitter».
Musk rechazó la semana pasada un puesto en la junta directiva de Twitter, que habría limitado su participación a un máximo del 14.9 por ciento en la empresa.
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