El presidente Joe Biden aceptó el domingo que las preocupaciones sobre su edad son «totalmente legítimas» de cara a las elecciones de 2024.
En pocas semanas, Biden—que ya es el presidente en ejercicio de mayor edad—cumplirá 80 años en noviembre. Si Biden ganara la reelección en 2024, tendría 86 años al final de su segundo mandato.
“Creo que es legítimo preocuparse por la edad de cualquier persona, incluida la mía”, dijo Biden al ser cuestionado durante una entrevista de MSNBC el domingo. “Eso es totalmente legítimo. Pero creo que la mejor manera de hacer el juicio es, ya sabe, observándome. ¿Voy más despacio? ¿No tengo el mismo ritmo?»
Si los votantes concluyen que «estoy perdiendo el ritmo», deberían «apoyar a algún otro demócrata si decide presentarse», añadió Biden. «No quiero echarme mala suerte. Estoy sano. Todo sobre mí físicamente sigue funcionando bien, y mentalmente también… Pero entiendo que la gente quiera hacer esa pregunta”, agregó.
Desde que asumió el cargo, numerosos videos que muestran a Biden cometiendo errores verbales u otras equivocaciones se han vuelto virales, y algunos legisladores republicanos dicen que es evidencia de que necesita tomar una evaluación cognitiva. Un video mostraba a Biden andando en bicicleta cerca de su casa en Rehoboth Beach, Delaware, antes de detenerse repentinamente y caer al suelo. En otro percance, llamaba equivocadamente a la representante Jackie Walorski (R-Ind.), quien murió en un accidente automovilístico semanas antes.
Biden dijo anteriormente que planea postularse en 2024 a pesar de que las cifras de las encuestas muestran que su apoyo se ha desplomado. El viernes, el presidente dijo a MSNBC que planea hacerlo, pero no se ha hecho ninguna declaración oficial.
“No he tomado esa decisión formal, pero mi intención es volver a postularme», dijo.
Si Biden hiciera un anuncio formal, estaría sujeto a leyes de financiación de campañas más estrictas en torno a las donaciones.
Otros detalles
Durante su campaña de 2020, Biden, que hizo relativamente pocas apariciones en la campaña y a menudo optó por dar entrevistas desde su oficina central en Delaware, frecuentemente se presentó como un «candidato de transición» que construiría un puente hacia los funcionarios electos demócratas más jóvenes.
El Dr. Kevin O’Connor, médico de cabecera de Biden, escribió en un memorando de seis páginas publicado por la Casa Blanca tras un examen realizado el año pasado que Biden estaba «sano, vigoroso» y «apto para desempeñar con éxito las funciones de la Presidencia».
El médico dijo que investigó a Biden por un mayor número de casos de “aclaramiento de garganta” durante los comentarios públicos y la rigidez de su forma de andar, según el memorando.
O’Connor también afirmó que la tos de Biden era el resultado del reflujo gastrointestinal y que la rigidez del andar fue el resultado de un nuevo diagnóstico de «neuropatía periférica leve», artritis de la columna vertebral y una compensación por una fractura de pie sufrida poco antes de asumir el cargo.
Pero el representante Ronny Jackson (R-Texas), un exmédico de la Casa Blanca, ha pedido con frecuencia a Biden que se someta a una prueba cognitiva y ha cuestionado la salud del futuro octogenario.
“He dicho durante mucho tiempo que llegaría un momento en que no sería el único que discutiera el deterioro cognitivo de Joe Biden. Ese momento es ahora”, dijo en un comunicado en julio, y señaló que “los demócratas en el ala oeste y el Partido Demócrata en general expresan su descontento por su deterioro relacionado con la edad».
Y agregó: «No se trata de una cuestión política, sino de sentido común. Si Joe Biden confía en su capacidad para sobresalir en una prueba cognitiva de la manera en que lo hizo el presidente Trump, puede tranquilizar fácilmente los temores de sus compañeros demócratas con esta simple prueba».
Con información de The Associated Press.
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