WASHINGTON-El presidente Joe Biden se refirió el martes a los atentados terroristas sin precedentes perpetrados en Israel durante el fin de semana, que horrorizaron a los israelíes y al resto del mundo.
El presidente Biden dijo que al menos 14 ciudadanos estadounidenses se encontraban entre los fallecidos en el ataque de Hamás..
«Ahora sabemos que hay ciudadanos estadounidenses entre los retenidos por Hamás», añadió Biden. «He ordenado a mi equipo que comparta información de inteligencia y despliegue expertos adicionales de todo el gobierno de Estados Unidos para consultar y asesorar a sus homólogos israelíes en los esfuerzos de recuperación de rehenes».
Según fuentes israelíes, más de 1.000 personas han muerto y casi 3.500 han resultado gravemente heridas en el mayor atentado perpetrado en el país en medio siglo.
«Hay momentos en esta vida, lo digo literalmente, en los que un mal puro y sin adornos se desata en este mundo. El pueblo de Israel ha vivido uno de esos momentos este fin de semana», dijo Biden al comienzo de su discurso.
Dijo que el atentado «sacó a la superficie recuerdos dolorosos, las cicatrices dejadas por milenios de antisemitismo y genocidio del pueblo judío».
El presidente Biden condenó enérgicamente el atentado y reiteró que Estados Unidos está con Israel.
«Cuando vuelva el Congreso les pediré que tomen medidas urgentes para financiar las necesidades de seguridad nacional de nuestros socios críticos», dijo. «No se trata de partido ni de política. Se trata de la seguridad de nuestro mundo, de la seguridad de Estados Unidos de América».
También mencionó el aumento de la ayuda militar a Israel, incluida munición e interceptores, para reponer la Cúpula de Hierro.
Muchos expertos y críticos se han preguntado por qué la comunidad de inteligencia no pudo anticipar y evitar el ataque, a pesar de que pudo haber sido minuciosamente planeado durante meses.
Los funcionarios de Biden han eludido las preguntas sobre si hubo un fallo de inteligencia, señalando que se llevarán a cabo investigaciones, pero que el enfoque actual será ayudar a Israel.
«El foco ahora tiene que estar en asegurarse de que Israel tiene lo que necesita para hacer frente a este ataque», dijo el Secretario de Estado Antony Blinken a MSNBC el 8 de octubre.
La administración Biden se enfrentó a críticas por instar a una tregua israelo-palestina durante el fin de semana tras los ataques de Hamás.
El sábado, la Oficina de Asuntos Palestinos del Departamento de Estado publicó una declaración en X, antes conocido como Twitter, instando a «todas las partes a abstenerse de la violencia y los ataques de represalia». Esa declaración fue posteriormente borrada tras las protestas.
«Esto es vergonzoso y todas y cada una de las personas implicadas en la redacción y aprobación de este tuit deberían ser expulsadas inmediatamente del gobierno de Estados Unidos», publicó en X el senador Ted Cruz (republicano de Texas) en respuesta.
Del mismo modo, la cuenta de Blinken, que el domingo publicó un mensaje animando a Turquía a «abogar por un alto el fuego», fue eliminada más tarde en medio de críticas generalizadas por considerar que era demasiado pronto para pedir a Israel que retirara sus fuerzas.
Aunque los funcionarios de Biden no han confirmado la implicación directa de Irán en los recientes atentados, sí han admitido que Teherán ha sido la principal fuente de financiación y entrenamiento de los militantes de Hamás.
No hay duda de que existe cierto grado de complicidad, pero Irán ha estado apoyando a Hamás durante muchos, muchos años», dijo el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby, durante una conferencia de prensa el lunes.
Kirby añadió que Estados Unidos está estudiando el «flujo de información» para determinar el papel de Irán.
«No hemos visto pruebas sólidas y tangibles de que Irán estuviera directamente implicado en la participación o la dotación de recursos y la planificación de estos complejos atentados que Hamás llevó a cabo durante el fin de semana», declaró.
Mientras tanto, los republicanos, citando el apoyo de Irán y su posible participación directa en el asalto de Hamás a Israel, han criticado la decisión del Presidente Biden de liberar 6.000 millones de dólares en fondos congelados de Irán como parte de un reciente acuerdo de liberación de rehenes antes del ataque.
Veinte senadores republicanos enviaron una carta al presidente Biden el 9 de octubre, instándole a «congelar inmediatamente las cuentas» que contienen estos fondos de Irán transferidos a Qatar.
«Debemos apoyar a Israel y restringir el acceso a estos fondos iraníes. Irán debe ser sometido a las sanciones más estrictas admisibles. Todo lo que no sea esto es inaceptable y solo contribuye a que Irán y Hamás puedan financiar estos actos atroces», dice la carta.
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