Un juez federal ha rechazado una solicitud del abogado especial John Durham, limitando esencialmente las pruebas y testimonios de la campaña de Clinton y del Comité Nacional Demócrata. Los fiscales podían usar dichos testimonios y pruebas contra el exabogado de la campaña de Clinton, Michael Sussmann.
El fallo significa que los documentos y testimonios podrían sugerir que en la campaña de Clinton y los demócratas hubo una coordinaron para impulsar acusaciones sobre un canal secreto entre la Torre Trump y un banco ruso. Los demócratas endilgaron esa acusación, entre otras, buscando afirmar que Trump tenía vínculos con Rusia, lo que se convirtió en una narrativa utilizada por los principales medios de comunicación durante gran parte de su presidencia.
Durham acusó a Sussmann de mentirle al FBI cuando le dijo al entonces abogado general de la oficina, James Baker, que no estaba trabajando en nombre de ningún cliente cuando presentó la acusación sobre Trump y sobre el banco ruso a la agencia. El año pasado, Sussmann se declaró inocente y está previsto que vaya a juicio a finales de este mes.
Sin embargo, el equipo de Durham alega que Sussmann no proporcionó esa información a Baker en un mero intento de buena fe para crear conciencia sobre Trump y Rusia. En cambio, argumentan que en realidad estaba actuando en nombre de la campaña de Clinton y de un ejecutivo de tecnología.
El juez Christopher Cooper escribió (pdf) el 7 de mayo que publicar más documentos y brindar testimonios equivaldría a realizar “un mini-juicio que requiere mucho tiempo y es, en gran medida, innecesario para determinar la existencia y el alcance de una conspiración sin cargos para desarrollar y difundir los datos del Alfa Bank” y que confía en que el equipo de Durham “pueda seguir su caso de manera efectiva sin la información marginal que tal investigación podría arrojar sobre los motivos del Sr. Sussmann y las relaciones con sus clientes”.
Anteriormente, Durham había argumentado que Sussmann, el ejecutivo de tecnología Rodney Joffe y la campaña de Clinton estaban “actuando en conjunto hacia un objetivo común” al inventar y difundir “las acusaciones [sobre el Alfa Bank] y otra información despectiva acerca de Trump a los medios y al gobierno de EE.UU.” y que la empresa de investigación de la oposición, Fusion GPS, fue parte de ese esfuerzo.
Los fiscales pidieron que se presentaran correos electrónicos durante el juicio de Sussmann que mostrarían que él, Joffe y Clinton eran parte de ese presunto plan, incluido un correo electrónico que supuestamente decía que Joffe comentó que le ofrecieron un trabajo de seguridad cibernética en la Casa Blanca si los demócratas ganaban la elección.
“La Corte ejercerá su discreción para no participar en el tipo de análisis probatorio extenso que se requeriría a la hora de determinar que existió tal empresa conjunta y quién pudo haberse unido a ella”, escribió Cooper, quien fue designado por el presidente Barack Obama, en respuesta. “Si bien el fiscal especial ha ofrecido algunas pruebas de un esfuerzo colectivo para difundir el supuesto vínculo entre Trump y Alfa Bank a la prensa y otros, los contornos de esta empresa y sus participantes no son del todo obvios”.
También escribió que Joffe, quien fue contratado por la campaña de Clinton, probablemente no tendrá que testificar ni presentar registros que demuestren que supuestamente “accedió a algunos de los datos en incumplimiento de ciertos contratos relacionados con la seguridad cibernética que él o sus empresas tenían con el gobierno de EE.UU.”. Joffe, a través de un portavoz a principios de este año, negó cualquier acusación de irregularidades.
“La evidencia de una indebida recopilación de datos por parte del Sr. Joffe u otros hechos sin el conocimiento del Sr. Sussmann es, en el mejor de los casos, solo una probatoria marginal de su supuesto motivo para mentirle al FBI”, escribió Cooper. “Además, si el Sr. Joffe, que no está en juicio, violó los términos de cualquiera de sus contratos con el gobierno -y mucho menos cometió un delito- es el tipo de cuestión colateral que corre el riesgo de confundir al jurado y distraerlo de las cuestiones pertinentes del caso”.
El 4 de mayo, el juez le dio a Durham una victoria al otorgar una moción que les permitía a los fiscales revisar documentos de la campaña, del bufete de abogados alineado con los demócratas Perkins Coie, de Joffe y de Fusion GPS.
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