La tensión entre Perú y los cuatro países latinos que expresaron su apoyo al expresidente Pedro Castillo pareció aumentar este jueves, luego que la cancillería de Perú llamara a consultas a sus embajadores en Argentina, Bolivia, Colombia y México por «intromisión» en los asuntos internos del país.
Esto luego que Perú pidiera respeto a los cuatro países tras el apoyo expresado a Castillo en un comunicado conjunto enviado el lunes. Castillo fue destituido y luego detenido tras cometer un golpe de estado el pasado 7 de diciembre.
«La presidenta [Dina Boluarte] representa al Estado dentro y fuera de la nación, y dirige la política exterior. Por ello, con la señora presidenta hemos dispuesto el llamado en consulta a Lima a nuestros Embajadores en Argentina, Bolivia, Colombia y México, en reacción a la intromisión en los asuntos internos del Perú», dijo la canciller peruana, Ana Cecilia Gervasi, durante la juramentación del vicecanciller Ignacio Higueras este jueves.
La diplomática dijo que el 7 de diciembre «se produjo un intento de quebrantamiento del orden institucional» por parte del exmandatario Castillo, y que eso ocasionó su «vacancia inmediata», razón por la cual Boluarte asumió el cargo dentro del marco de la Carta Magna.
Gervasi resaltó que la actitud de los gobiernos de Fernández, Arce, Petro y López Obrador «no se condicen con los tradicionales lazos de amistad, cooperación y respeto mutuo que unen a nuestro país».
Asimismo dijo que Perú seguirá mostrando su «amplia voluntad» de profundizar el diálogo pero «siempre en el marco del respeto mutuo y de la vigencia del derecho internacional».
En el comunicado enviado por Argentina, Bolivia, Colombia y México, los gobiernos señalaron su “profunda preocupación” por la remoción y detención de Castillo, y pidieron a las autoridades que «respeten a cabalidad los derechos humanos del presidente Pedro Castillo y que se le garantice la protección judicial».
Dijeron además que el expresidente fue “víctima de un antidemocrático hostigamiento (…) para luego ser objeto de un tratamiento judicial de la misma manera violatorio”.
Más tarde, la cancillería respondió al comunicado declarando que la decisión de la destitución de Castillo se llevó a cabo conforme a las leyes del país andino luego de las medidas tomadas por el exmandatario.
Sin embargo, la controversia y tensiones entre el gobierno peruano y mexicano llegó incluso al congreso andino.
La legisladora Gladys Echaíz, del partido Renovación Popular, propuso este martes declarar persona “non grata” al mandatario mexicano Andrés Manuel López Obrador tras sus comentarios en apoyo a Castillo.
“El señor López Obrador ha dicho muchas mentiras en sus conferencias de prensa de que nosotros hemos tenido expresiones discriminatorias contra el expresidente Castillo. Eso no es verdad”, dijo la legisladora a Infobae, señalando que se trata de un asunto de corrupción.
“Los propios allegados al expresidente Castillo lo han delatado de corrupto. Entonces, acá la justicia actúa de acuerdo a sus prerrogativas. Nosotros somos soberanos de nuestro territorio y somos los únicos en que debemos resolver nuestros problemas. Nadie más debe inmiscuirse”, agregó.
Los comentarios de la congresista peruana ocurrieron luego de que el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador dijera este martes que no le corresponde a México reconocer a Dina Boluarte como presidenta de Perú, y que las relaciones entre Perú y México están en “pausa”.
Por su parte, el canciller mexicano Marcelo Ebrard señaló que se mantiene en comunicación con varios grupos de mexicanos varados en Perú, y se encontraba “organizando apoyo para alimentos y apoyo”, además de “coordinando esfuerzos para acelerar su retorno a México”.
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