Los internautas chinos están furiosos luego de que las autoridades chinas anunciaran los resultados de una investigación sobre el caso del médico denunciante Li Wenliang.
Li, un oftalmólogo, fue uno de los ocho denunciantes que publicó por primera vez sobre un brote de «neumonía desconocida» en las redes sociales chinas en diciembre de 2019. Después de que la publicación online se volviera viral, fue convocado a la estación de policía local de Zhongnan Road el 3 de enero y reprendido por «rumores».
Li también se vio obligado a firmar una «declaración de confesión», en la que acordó que no cometerá más «actos ilegales».
Finalmente contrajo el virus del Partido Comunista Chino (PCCh) mientras trataba sin saberlo a un paciente infectado con el virus. Después de dar positivo el 1 de febrero, murió seis días después.
The Epoch Times se refiere al nuevo coronavirus como el virus del PCCh porque el encubrimiento y la mala gestión del Partido Comunista Chino permitieron que el virus se extendiera por toda China y creara una pandemia global.
El mismo día que murió Li, la Comisión Nacional de Supervisión de China, un organismo anticorrupción del Partido, anunció que enviaría un equipo de investigación a Wuhan para llevar a cabo una «investigación completa» sobre cómo las autoridades trataban a Li.
El resultado de la investigación se anunció el 19 de marzo. Según los medios estatales chinos Xinhua, el equipo de investigación dijo que era «inapropiado» que la estación de policía de Zhongnan Road hiciera que Li firmara la «declaración de confesión» y que el procedimiento de la policía en la estación fue «irregular».
El equipo de investigación sugirió que se retirara la «declaración de confesión» que Li firmó y que la oficina de seguridad local debería responsabilizar al «personal relevante».
Pocas horas después de que Xinhua hiciera públicos los resultados de la investigación, la oficina de seguridad pública de Wuhan emitió dos avisos en su cuenta oficial de Weibo.
En su primera publicación online, la oficina de seguridad pública anunció que había retirado la «declaración de confesión» y emitió una «disculpa solemne» a la familia de Li.
En la segundo publicación, la oficina anunció que dos policías en la estación de policía de Zhongnan Road habían sido castigados. Yang Li, subdirector de la estación de policía, recibió un «demérito administrativo» por incumplimiento del deber.
El oficial Hu Guifang recibió una «advertencia administrativa» por «aplicación irregular de la ley».
Muchos internautas chinos acudieron a la cuenta de Weibo para expresar su enojo y frustración por la decisión del buró de castigar a Yang y Hu. Muchos dijeron que Hu solo estaba siguiendo órdenes y que estaba siendo castigado como chivo expiatorio.
Un internauta de la megaciudad china de Chongqing escribió: “¿Deberían ser estos dos policías los responsables? ¿Qué pasa con sus superiores que dieron la orden [de silenciar a Li]?»
Otro internauta de Shanghai escribió: “Los funcionarios corruptos culpan a los oficiales de policía de base. Esto es corrupción real».
Otros recurrieron a la cuenta personal de Weibo de Li, dejando comentarios en su última publicación en redes sociales publicada el 1 de febrero, cuando escribió que había dado positivo por el virus.
Muchos acudieron a su publicación de Weibo para expresar su gratitud por Li al exponer el brote al público.
Algunos internautas también expresaron que no estaban contentos con el resultado de la investigación.
Un internauta de la ciudad de Tianjin escribió: “Dr. Li, no estamos satisfechos con los resultados de la investigación. Pero no hay nada que podamos hacer. Esperábamos mucho este resultado».
Al momento de la publicación, las autoridades chinas comenzaron a censurar la discusión online sobre el resultado de la investigación, y se eliminaron muchos comentarios en Internet.
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