Cientos de bomberos no vacunados en Los Ángeles dicen que planean presentarse a trabajar el 20 de octubre, a pesar de una orden de la ciudad que establece que deben estar completamente vacunados contra el COVID-19 para esa fecha o se enfrentan a perder sus empleos.
«La ciudad está diciendo que a partir del día 20, vamos a ser despedidos. Se supone que no debemos presentarnos a trabajar si no estamos vacunados o si no tenemos un expediente de exención en esa fecha», dijo a The Epoch Times John Knox, bombero-paramédico del Departamento de Bomberos de Los Ángeles (LAFD) y portavoz de Firefighters4Freedom.
El abogado Kevin McBride presentó recientemente una notificación de intención de demandar en nombre del grupo de 871 bomberos, que buscan 2.5 millones de dólares cada uno en concepto de daños y perjuicios.
«El objetivo de la ciudad es tener una plantilla vacunada. Por lo tanto, los empleados no tendrán la opción de ‘optar por no vacunarse’ y someterse a pruebas semanales», dice la ordenanza municipal (pdf).
En una orden pública reciente (pdf), el alcalde de Los Ángeles, Eric Garcetti, escribió: «La mejor manera de reducir el nivel actual de transmisión en la comunidad y de prevenir futuras olas es que todos los que reúnan los requisitos, incluidos los que se hayan recuperado de una infección de COVID-19, se vacunen por completo lo antes posible».
A diferencia de otros empleados de la ciudad y del condado, maestros, enfermeras y otros trabajadores de la salud que han estado contrarrestando la exigencia de la vacuna mediante la solicitud de exenciones médicas o religiosas, el grupo Firefighters4Freedom ha adoptado una postura diferente. Dicen que, como ciudadanos estadounidenses, tienen derecho a elegir el curso de sus vidas sin que el gobierno se extralimite.
En el sitio web de Firefighters4Freedom, el grupo afirma: «Como partes interesadas del LAFD (Departamento de Bomberos de la Ciudad de Los Ángeles), nuestra misión es mantener los derechos humanos, los derechos constitucionales, los derechos civiles y las libertades civiles como seres humanos libres naturales soberanos y ciudadanos estadounidenses. Creemos en el derecho al trabajo, al libre albedrío, a la elección personal, a las libertades médicas y al consentimiento sin coerción, represalias, amenazas, medidas disciplinarias o despido. Esto no es una cuestión de vacunas frente a no vacunas, no es una cuestión política de izquierda contra derecha. Es una cuestión de derechos humanos».
Más de 450 empleados del LAFD han solicitado la exención, pero los miembros de Firefighters4Freedom dicen que creen que solicitar la exención da al gobierno demasiado poder y es una admisión por parte de los empleados de que la ciudad tiene el control final del resultado. Dicen que la ciudad puede alegar que las exenciones son una dificultad y que no puede hacer acomodaciones, proporcionando así una excusa para dejar ir al empleado si decide no vacunarse.
Además, la orden actual es una orden directa para los bomberos y los policías, y los que no cumplan podrían ser castigados o despedidos por insubordinación.
«A pesar de que básicamente han dicho que si el proceso de exención es una carga para la ciudad, tienen la capacidad de enviarnos a casa sin paga y o despedirnos, todavía tenemos 450 miembros que han solicitado exenciones», dijo Knox. «La ciudad tiene que tener un lugar donde colocarnos para poder hacerlo, pero también hay otros 27 departamentos (de la ciudad) con personas que solicitan exenciones también. La policía de Los Ángeles tiene 2600 solicitudes de exención. ¿Dime dónde van a poner a toda esa gente? Es imposible que haya 2600 puestos de trabajo abiertos en la ciudad».
La Ley de Equidad en el Empleo y la Vivienda de California (FEHA) es la principal ley estatal de protección de los empleados contra la discriminación, las represalias y el acoso. Las disposiciones laborales de la FEHA contra la discriminación se aplican a todos los empresarios con cinco o más empleados a tiempo completo o parcial.
De acuerdo con la ley, al imponer las vacunas, el ayuntamiento debe realizar acomodaciones razonables basadas en la discapacidad o en una creencia o práctica religiosa sincera; no puede discriminar ni acosar a los empleados o solicitantes de empleo por su discapacidad o religión; y no puede tomar represalias contra nadie por participar en una actividad protegida, como la solicitud de una acomodación razonable.
«Nuestro punto es que si digo que voy a solicitar una exención, entonces estoy aceptando que tengan derecho a decirme qué hacer con mi cuerpo», explicó Knox. «Supongamos que me la conceden, que me permiten trabajar en el campo esta vez, y de repente aparece la ‘variante cebra’, y ‘es mucho más mortífera’ y ahora ‘tenemos que retirar tu estatus de exención’. Ahora no tengo nada que hacer porque, para empezar, les he dado el control sobre mí».
«Hice un juramento a la Constitución estatal y a la Constitución federal de proteger y servir cuando me contrataron hace 21 años», dijo Knox. «Quiero mi trabajo. Quiero mi carrera. Así que el día 20 me presentaré a trabajar, como se supone que debo hacer, y tendrán que sacarme de allí, junto con todos los demás, porque no estamos de acuerdo con esto. Tenemos derecho a trabajar en este estado, tenemos un memorando de entendimiento (MOU), tenemos un contrato, y no pueden venir en medio de ese contrato y cambiar las reglas y las leyes sin reunirse y consultar, o crear un nuevo MOU y cartas de acuerdo. Es una clara violación de las leyes laborales».
El estrés tiene consecuencias
Knox dice que el estrés y la ansiedad crecientes de no saber lo que depara el futuro están teniendo consecuencias en el departamento, y que debido a que los representantes sindicales están en un estado de «reunión y consultar», ni la ciudad ni su sindicato están dando ninguna información sobre lo que está por venir.
«Estamos literalmente en el limbo, nos mantienen en la oscuridad», dijo Knox. «Una de las razones por las que se interpuso la demanda por el valor monetario es la cantidad de estrés y la baja moral resultante que se está imponiendo en nuestro departamento. Ya nos falta personal, no podemos contratar para cubrir todas las posiciones, así que cierran cuerpos [de bomberos], trasladan cuerpos para intentar crear suficiente cobertura en la ciudad».
Knox también declaró a The Epoch Times que este asunto está separando a las familias de los bomberos en un momento en que necesitan mantenerse unidas mientras sus comunidades se recuperan de los devastadores efectos de los cierres por el COVID-19. «La cantidad de estrés que tenemos ahora mismo en el departamento no es ninguna broma, tenemos miembros que están dispuestos a quitarse la vida. Es así de grave».
Knox dijo que Firefighters4Freedom ha estado tendiendo la mano para ayudar a los que están sintiendo la tensión.
«Estamos haciendo saber a los miembros que estamos aquí para ellos, que podemos conseguirles cualquier ayuda que sea necesaria», dijo Knox. «Algunos dicen que se sienten como si estuvieran en una isla sin ningún lugar al que acudir. Su trabajo ya es muy estresante, y a eso hay que añadirle los problemas relacionados con el COVID, la vida y el hogar, y luego no saber si van a tener un trabajo después del día 20, es demasiado para algunos de ellos».
Knox dice que la infraestructura de la ciudad cuenta con 106 estaciones de bomberos con aproximadamente 3400 empleados, incluyendo los 1100 a 1200 efectivos por turno en un día cualquiera. De ellos, 1600 no están vacunados y otros 600 se han negado a declarar.
«La Constitución dice ‘Nosotros el Pueblo’ en letras grandes, y permite que el gobierno nos gobierne, no que nos domine. Los elegimos para gobernar, para crear cosas que nos permitan tener nuestras libertades, y aquí han cambiado eso», dijo Knox. «Si permitimos esto, no habrá más proceso legislativo, porque sabrán que nadie se ha opuesto, verán que es demasiado fácil convertirse en nuestros mandamases».
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
