La representante Sheila Jackson Lee (D-Texas) presentó el jueves artículos de impeachment contra el presidente Donald Trump.
Lee dijo que el asalto al Capitolio de EE. UU., que fue perpetrado por decenas de manifestantes durante la sesión conjunta del Congreso el 6 de enero, la obligó a actuar.
«Ayer vimos a los enemigos internos incitar a la violencia e invadir la casa del pueblo con la intención de hacer daño. ¡Ya es suficiente! El presidente ha perdido completamente la autoridad moral que tenía y no es apto como comandante en jefe», dijo Lee en un comunicado.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-Calif.), dijo horas antes que el Congreso podría seguir adelante con el intento de destituir al presidente si el vicepresidente Mike Pence y el gabinete de Trump no actuaban para destituirlo a través de la 25ª Enmienda.
Ella y el líder de la minoría del Senado Chuck Schumer (D-N.Y.) dijeron más tarde que no habían tenido noticias de Pence sobre el asunto.
La Casa Blanca y la Oficina de Pence no respondieron a las solicitudes de comentarios.
Lee se hizo eco de los líderes demócratas, haciendo un llamamiento a los funcionarios de la administración para que invoquen la enmienda, que estipula que el vicepresidente y la mayoría del gabinete pueden presentar una declaración escrita alegando que el presidente es incapaz de cumplir con los poderes y deberes de su cargo. La medida elevaría a Pence a la categoría de presidente en funciones.
En la resolución de impeachment recientemente presentada se alega que Trump abusó de los poderes de la presidencia cuando el 2 de enero llamó al secretario de Estado de Georgia y le pidió que investigara las supuestas irregularidades de las elecciones. Durante la llamada, Trump también afirmó que había ganado el estado, a pesar de que el presidente electo Joe Biden fue certificado como ganador tras varios reconteos.
Trump «seguirá siendo una amenaza para la seguridad de la nación y la Constitución si le permiten permanecer en el cargo», dice la resolución.
Un portavoz de Biden dijo a varios medios que el presidente y la vicepresidenta electos «están concentrados en su deber —preparándose para asumir el cargo el 20 de enero— y dejarán que el vicepresidente Pence, el gabinete y el Congreso actúen como crean conveniente».
La Cámara de Representantes controlada por los demócratas destituyó a Trump a principios del año pasado por una llamada que tuvo con el presidente de Ucrania. Esa fue la tercera vez en la historia que un presidente fue impugnado.
Trump fue finalmente absuelto por el Senado controlado por los republicanos. Ningún presidente estadounidense ha sido impugnado y condenado. El Senado está actualmente controlado por los republicanos.
El presidente del Comité de Justicia del Senado, Lindsey Graham (R-S.C.), dijo a los periodistas en el Capitolio que no apoya el intento de destituir a Trump.
«No apoyo un plan para invocar la 25ª Enmienda. Ahora, si algo más sucede, todas las opciones estarían sobre la mesa», dijo.
Trump, en un breve mensaje publicado el jueves por la noche, dijo a los americanos que ha sido un honor servir como presidente.
«A todos mis maravillosos partidarios: sé que están decepcionados, pero también quiero que sepan que nuestro increíble viaje apenas comienza», dijo.
La secretaria de Prensa de la Casa Blanca, Kayleigh McEnany, dijo en una conferencia de prensa que la Administración Trump está «trabajando para asegurar una transición ordenada del poder».
«Ahora es el momento de que Estados Unidos se una, de que se junte, de que rechace la violencia que hemos visto. Somos un solo pueblo americano bajo Dios», añadió.
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