Las protestas en Nueva York por la muerte de George Floyd se convirtieron en un caos el lunes, pocas horas después de que el gobernador Andrew Cuomo y el alcalde Bill de Blasio declararan un toque de queda en toda la ciudad desde las 11 p.m. hasta las 5 a.m. del martes.
Mientras se podían ver grupos de manifestantes marchando pacíficamente a través de Manhattan y Brooklyn en lo que es ahora el cuarto día de protestas contra la brutalidad policial, docenas de personas también fueron arrestadas y cientos de saqueadores fueron vistos irrumpiendo en los negocios del centro de Manhattan y vaciándolos de mercancía, reportó ABC7NY.
En el centro de Nueva York se vieron incendios provocados por los manifestantes y coches de policía quemados, mientras que un grupo armado con palos supuestamente prendió fuego a un negocio. Tiendas como Michael Kors, Kate Spade y Barnes and Noble fueron allanadas y los cristales rotos cubrieron la acera.
Las puertas de la tienda con la insignia de Macy’s en Manhattan fueron forzadas y la policía sacó a dos hombres esposados y los metió en una camioneta, mientras que la gente se apresuraba a entrar en una tienda de Nike y sacaba montones de ropa.
En el barrio del SoHo de Manhattan también se vieron multitudes de personas saqueando tiendas de lujo como Rolex, Chanel y Prada, así como tiendas de ropa y electrónica.
Durante el saqueo del SoHo, se informó que un hombre de unos 20 años recibió un disparo en el torso y en la pierna en las calles Spring y Crosby justo después de las 12:30 a.m. por parte de uno de los cuatro hombres que seguían la disputa. La víctima fue trasladada al Hospital Bellevue, donde estaba en condiciones estables y no se han hecho arrestos.
El video compartido en Twitter muestra a un oficial de policía del Bronx siendo atacado por un grupo de manifestantes que lo derriban y lo golpean con un objeto grande.
Otro video muestra a dos oficiales arrestando a un hombre en lo que parece ser una tienda de tecnología después de que fuera vandalizada por saqueadores, muchos de los cuales siguen viendo el arresto desde fuera de la tienda, mientras que en la acera se pueden ver cristales rotos.
Un oficial de la policía de Nueva York explicó las escenas como un «desastre» y una «zona de guerra total», con manifestantes «en todas partes, golpeando a los policías», que fueron invadidos por la situación. El oficial dijo que las fuerzas del orden necesitaban desesperadamente a la Guardia Nacional.
El lunes, el presidente Donald Trump prometió desplegar al ejército estadounidense para sofocar los disturbios si los funcionarios estatales no podían contenerlas, señalando que «el más alto deber del presidente es defender a nuestro gran país y al pueblo estadounidense».
«Todos los estadounidenses se indignaron con razón y se rebelaron por la brutal muerte de George Floyd. Mi administración está totalmente comprometida a que, por George y su familia, se haga justicia. No habrá muerto en vano», dijo Trump en una conferencia de prensa desde el Rose Garden.
«Pero no podemos permitir que los gritos rectos y los manifestantes pacíficos sean ahogados por una multitud enfurecida. Las mayores víctimas de los disturbios son los ciudadanos amantes de la paz en nuestras comunidades más pobres, y como su presidente, lucharé para mantenerlos a salvo. Lucharé para protegerlos. Soy su presidente de la ley y el orden, y un aliado de todos los manifestantes pacíficos».
Trump señaló que en los últimos días, Estados Unidos ha sido «agarrado por anarquistas profesionales, pandillas violentas, incendiarios, saqueadores, criminales, alborotadores, Antifa y otros», y que «personas inocentes han sido salvajemente golpeadas», mientras que «los propietarios de pequeñas empresas han visto sus sueños completamente destruidos».
«Los policías de Nueva York han sido golpeados en la cara con ladrillos. Las valientes enfermeras, que han luchado contra el virus, tienen miedo de salir de sus casas», dijo a los periodistas. «Una comisaría de policía ha sido invadida. Aquí en la capital del país, el Monumento a Lincoln y el Monumento a la Segunda Guerra Mundial han sido objeto de actos de vandalismo. Una de nuestras iglesias más históricas fue incendiada. Un oficial federal en California, un héroe afroamericano de las fuerzas del orden, fue asesinado a tiros».
Trump señaló que no se trata de «actos de protesta pacífica», sino de «actos de terror doméstico», y que «la destrucción de vidas inocentes y el derramamiento de sangre inocente es una ofensa a la humanidad y un crimen contra Dios», y dijo que tomará medidas inmediatas para «detener la violencia y restablecer la seguridad en Estados Unidos».
«Hoy, he recomendado encarecidamente a todos los gobernadores que desplieguen la Guardia Nacional en cantidades suficientes para que dominemos las calles. Los alcaldes y gobernadores deben establecer una abrumadora presencia policial hasta que la violencia haya sido sofocada», dijo, añadiendo que «si una ciudad o un estado se niega a tomar las medidas necesarias para defender la vida y la propiedad de sus residentes, entonces desplegaré al ejército de Estados Unidos y resolveré rápidamente el problema por ellos».
La policía dijo que aproximadamente 250 personas fueron detenidas el lunes por la noche, mientras que seis oficiales sufrieron lesiones que no pusieron en peligro su vida y aproximadamente una docena de vehículos de la policía fueron dañados.
Las protestas continúan en docenas de ciudades de todo el país, incluyendo Minneapolis, Washington, Atlanta, Detroit y Louisville, con ocasionales saqueos, incendios y actos de vandalismo.
Según un recuento compilado por The Associated Press, al menos 4400 personas han sido arrestadas en todo el país.
The Associated Press contribuyó a este artículo.
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