Nuevos documentos revelan cómo el gobierno de Estados Unidos utilizó un portal secreto de Twitter para censurar el contenido sobre COVID-19 que contradecía la narrativa del gobierno.
En su investigación en curso sobre las prácticas de censura de Twitter, America First Legal ha obtenido un cuarto conjunto de documentos (pdf) que exponen un portal secreto de Twitter, que los funcionarios del gobierno de EE. UU. utilizaron para censurar las opiniones disidentes sobre el COVID-19 violando la Primera Enmienda. Es una revelación que Elon Musk describió como «extremadamente preocupante».
Los documentos revelan que los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) colaboraban con UNICEF, la Organización Mundial de la Salud y Mafindo para mitigar la «desinformación». Mafindo es un socio de verificación de hechos de Facebook con sede en Indonesia, financiado por Google, conocido por censurar búsquedas de palabras clave como Coronavirus y COVID-19, así como por bloquear información relativa a reacciones adversas y muertes causadas por las vacunas contra el COVID-19. Facebook inició su programa de verificación de hechos por terceros en 2016, trabajando con verificadores de hechos de todo el mundo que están certificados por la Red Internacional de Verificación de Hechos (IFCN) en Poynter para calificar y revisar la exactitud del contenido en su plataforma. Según el sitio web de la IFCN, creen que «la comprobación imparcial y transparente de los hechos puede ser un poderoso instrumento del periodismo de rendición de cuentas». Sin embargo, entre su consejo asesor, los representantes estadounidenses parecen proceder de medios de tendencia liberal como el Washington Post y PolitiFact, propiedad de Poynter.
El portal de Twitter
El 10 de marzo de 2021 un correo electrónico de un empleado de Política Pública de EE. UU. en Facebook a varios empleados de los CDC hablaba de la «sincronización semanal con los CDC» del gigante de las redes sociales y de cómo los CDC debían «invitar a otras agencias según fuera necesario».
Un correo electrónico del 24 de marzo de 2021 de los mismos empleados de Facebook a empleados de los CDC decía «esta es mi reunión regular de FB y les gustaría discutir 2 temas de desinformación» y «desinformación que fue eliminada».
El 10 de mayo de 2021, un empleado de Twitter recomendó a un funcionario de los CDC que se inscribiera en el Portal de asistencia para socios de Twitter, que describió como «la mejor manera de conseguir que se revise una hoja de cálculo como esta».
El 11 de mayo de 2021, la funcionaria de los CDC inscribió su cuenta personal de Twitter en el Portal de asistencia para socios de Twitter, que permitía «un flujo de informes especial y acelerado en el Centro de Ayuda de Twitter».
Un manual de Normas Comunitarias de Facebook del 19 de mayo de 2021 revela cómo la compañía trabaja con legisladores y el consejo legal, así como con activistas de derechos humanos, en el desarrollo de políticas en sus objetivos de «acercar a 50 millones de personas a la vacunación» mientras «combaten el COVID-19 y la desinformación sobre vacunas» y «superan los retos globales en vacunación». Los métodos utilizados para lograrlo incluían la eliminación de «información falsa que ha sido desacreditada por expertos en salud pública» y el rechazo de anuncios que infringen sus políticas, «incluidos los que desalientan la vacunación». También redujeron la distribución de «afirmaciones engañosas calificadas por verificadores de hechos independientes».
Contenido eliminado
Entre los posteos que Facebook eliminaría —que los CDC o cualquier otra autoridad de salud pública considerasen «falsas y susceptibles de contribuir a la violencia inminente de daños físicos»— se incluían:
-Afirmaciones de que el COVID-19 no es más peligroso que la gripe común o el resfriado.
-Afirmaciones de que el COVID-19 no puede transmitirse en determinados climas, condiciones meteorológicas o lugares.
-Afirmaciones de que para una persona normal, algo puede garantizar la prevención de contraer el COVID-19 o puede garantizar la recuperación de COVID-19 antes de que tal cura o prevención haya sido aprobada.
-Afirmaciones de que las pruebas por COVID-19 causan cáncer.
-Afirmaciones sobre la disponibilidad o existencia de vacunas contra el COVID-19.
-Afirmaciones sobre la seguridad o los efectos secundarios graves de las vacunas contra el COVID-19.
-Afirmaciones sobre la eficacia de las vacunas contra el COVID-19.
-Afirmaciones sobre cómo se desarrolló la vacuna contra el COVID-19 o sus ingredientes.
-Afirmaciones que impliquen teorías conspirativas sobre las vacunas contra el COVID-19 o los programas de vacunación.
El contenido que se considera «desacreditado» incluye, entre otras cosas, que «las vacunas causan la enfermedad contra la que pretenden proteger, o hacen que la persona tenga más probabilidades de contraer la enfermedad», que «la inmunidad natural es más segura que la inmunidad adquirida por la vacuna» y que «las vacunas no son eficaces para prevenir la enfermedad contra la que pretenden proteger».
Los infractores reincidentes se enfrentarían a restricciones «que incluyen (pero no se limitan a) la reducción de la distribución, ser retirados de las recomendaciones» o ser retirados del sitio.
Estos castigos se llevaron a cabo a pesar de la evidencia de que las vacunas no previenen la transmisión, que las vacunas causan efectos adversos e incluso la muerte, y que ahora mueren más personas vacunadas que no vacunadas. Incluso los CDC admitieron en junio que las personas vacunadas podían volver a contraer la enfermedad.
«El mejor lugar para combatir la desinformación»
En agosto de 2021, el jefe del Laboratorio de Noticias de Google para la región de Asia-Pacífico (APAC), envió un correo electrónico a una estratega de confianza en vacunas de los CDC para invitarla a la «Cumbre de Medios de Confianza» de APAC. A continuación, la estratega de confianza en las vacunas de los CDC envió un correo electrónico al planificador de eventos de la Cumbre de Medios de Confianza de APAC de Google, señalando su entusiasmo por haber sido invitada a lo que denominó «el bar clandestino más cool de lucha contra la desinformación».
A continuación, la misma empleada de los CDC fue invitada a la cumbre para pronunciar un discurso sobre cómo los CDC estaban trabajando con la OMS y otras organizaciones internacionales para hacer frente a la llamada «infodemia» y utilizar la «inoculación social» para mitigarla.
Un correo electrónico del 28 de octubre de un CDC al equipo de Twitter se refería a las discusiones preliminares sobre los planes de los CDC para comunicar la orientación relativa a las «vacunas pediátricas».
Un correo electrónico del 2 de noviembre de 2021 de un empleado de Facebook a varios empleados de los CDC estaba relacionado con la «desinformación sobre vacunas» relativa a la Autorización de Uso de Emergencia (EUA). El empleado de Facebook informó a los empleados de los CDC que habían «lanzado una nueva función en Instagram, donde las cuentas que publican repetidamente contenido que viola nuestras políticas sobre COVID-19 o desinformación sobre vacunas ahora pueden perder la capacidad de ser etiquetadas o mencionadas o pueden ver ventanas emergentes preguntando si les gustaría eliminar ciertos posteos que pueden violar nuestras políticas».
Por último, Facebook se jacta de haber eliminado más de 16 millones de posteos en Facebook e Instagram, incluidos más de 2 millones entre febrero y mayo de 2021.
La primera publicación de documentos de AFL reveló la colusión explícita entre los CDC y las grandes empresas de tecnología para censurar lo que la Administración Biden consideraba «desinformación» e impulsar la propaganda encubierta de COVID-19. La segunda publicación de AFL construyó el registro de pruebas que muestra que los CDC enviaron específicamente a Facebook y Twitter mensajes específicos que debían eliminar, censurar o marcar. La tercera publicación de AFL reveló que las políticas de orientación sobre las mascarillas de los CDC para los niños en edad escolar fueron impulsadas por las encuestas políticas del grupo liberal de dinero oscuro The Kaiser Family Foundation.
The Epoch Times se puso en contacto con Facebook para pedirle comentarios.
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