El presidente Donald Trump aclaró este lunes que solo se reuniría con Nicolás Maduro para discutir su salida del poder, luego que la revista Axios dijera que el mandatario estadounidense estaba abierto a reunirse con el dictador venezolano.
Trump escribió en su cuenta de Twitter que a diferencia de la izquierda radical de Estados Unidos su administración se encuentra en contra del socialismo y a favor de la libertad del pueblo venezolano.
“A diferencia de la izquierda radical, yo SIEMPRE me pondré de pie contra al socialismo y junto al pueblo de Venezuela. ¡Mi administración siempre ha estado del lado de la INDEPENDENCIA y LIBERTAD y contra el opresivo régimen de Maduro! Solo me reuniría con Maduro para discutir una cosa: ¡una salida pacífica del poder!”, escribió Trump.
Unlike the radical left, I will ALWAYS stand against socialism and with the people of Venezuela. My Admin has always stood on the side of FREEDOM and LIBERTY and against the oppressive Maduro regime! I would only meet with Maduro to discuss one thing: a peaceful exit from power!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) June 22, 2020
En una entrevista publicada por Axios, Trump no descartó la posibilidad de reunirse con Nicolás Maduro, pero aseguró que hasta ahora la ha rechazado. “Podría pensarlo (…) A Maduro le gustaría reunirse. Y nunca me opongo a las reuniones”, dijo el mandatario según el sitio web.
La revista Axios dijo que si Trump se reúne con Maduro alteraría la política de su administración sobre Venezuela debido a que altos funcionarios como el secretario de estado Mike Pompeo y el vicepresidente Mike Pence han invertido una gran cantidad de tiempo en Guaidó. Sin embargo, la Casa Blanca no se ha pronunciado sobre las polémicas declaraciones de la revista.
El analista venezolano Daniel Di Martino dijo a The Epoch Times que “Trump no debería reunirse con Maduro porque una reunión es un premio. Maduro solo entiende un lenguaje, el mismo lenguaje que entienden los terroristas y los narcotraficantes y grupos criminales, el lenguaje de la fuerza”.
Di Martino señaló que si a Maduro no se le hace una amenaza real o se utiliza la fuerza y se captura a los líderes del régimen chavista dentro de Venezuela, “él no va a salir del poder”.
Asimismo, dijo que el presidente interino de Venezuela Juan Guaidó ha fracasado en su objetivo de derrocar a Maduro por lo que Estados Unidos debería quitarle su apoyo.
“Trump debería abandonar a Guaidó porque Guaidó ha traicionado lo que los venezolanos queríamos”, y agregó que el líder de la Asamblea Nacional ha negociado con la dictadura y tiene lazos con corruptos como «Luisa Ortega y muchos otros».
Por otro lado, explicó que el incremento de las sanciones de Estados Unidos hacia el régimen chavista es bueno porque le quita recursos a la dictadura. Sin embargo “las sanciones no van a derrocar a Maduro”, al igual que las sanciones no derrocaron a otros regímenes como el de Cuba, Corea del Norte e Irán.
La Casa Blanca, que solo reconoce a Juan Guaidó como presidente encargado del gobierno interino, ha sugerido un plan llamado “Marco para la Transición Democrática para Venezuela”, para que un gobierno de transición designado por ambos partidos de la Asamblea Nacional, se encargue de convocar nuevas elecciones.
El Marco para la Transición Democrática en Venezuela propuesto por Estados Unidos no solo promueve la creación de un gobierno de emergencia sino que también exige la liberación de todos los presos políticos, la retirada de todas las fuerzas de seguridad extranjeras y la elección de nuevos miembros tanto del Consejo Nacional Electoral como del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
Al mismo tiempo el TSJ debe levantar la orden de desacato y restaurar todos los poderes de la Asamblea Nacional (AN) incluyendo las inmunidades de los diputados, mientras que la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), la cual es parte del régimen chavista, quedaría disuelta.
El Departamento de Justicia ha anunció cargos el pasado mes de marzo contra Nicolás Maduro y varios miembros del régimen chavista por narcoterrorismo, corrupción y narcotráfico.
Entre los funcionarios acusados por el Departamento de Justicia destacan el vicepresidente de economía Tareck Zaidan El Aissami Maddah, el ministro de defensa Vladimir Padrino López y el presidente de la Corte Suprema de Justicia chavista Maikel José Moreno Pérez.
El DOJ ofreció una recompensa de hasta 15 millones de dólares por información que conduzca al arresto de Nicolás Maduro; 10 millones tanto por Diosdado Cabello, expresidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, como por Carvajal y Alcalá; y 5 millones por Marín Arango, líder de las FARC.
El fiscal general William Barr dijo en marzo durante una conferencia virtual que “durante más de 20 años, Maduro y varios colegas de alto rango supuestamente conspiraron con las FARC, causando que toneladas de cocaína entraran y devastaran las comunidades estadounidenses”.
Con informes de la reportera Debora Alatriste.
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