Dos terremotos de magnitudes 4.9 y 4.5 golpearon a Irán el miércoles 8 de enero, según el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS).
El primer terremoto de magnitud 4.9 golpeó a unas 6 millas al sureste de Borazjan, la capital del condado de Dashtestan, provincia de Bushehr, alrededor de las 2:20 a.m. y tuvo una profundidad de 10 millas.
Strategic Sentinel informa en su Twitter que el terremoto ocurrió cerca de la planta nuclear de Bushehr y que la profundidad y el epicentro indican que fue un evento natural. Un terremoto similar ocurrió en diciembre del año pasado, según lo que ellos tuitearon.
Un segundo terremoto de magnitud 4.5 golpeó al país cerca de una hora más tarde, y su epicentro se localizó a más de 10 millas al sureste de la misma ciudad. También midió 6 millas de profundidad, dijo el USGS.
No hay informes inmediatos de daños o lesiones.
Horas después de que se dispararan los misiles, un avión ucraniano que transportaba al menos 170 personas entre pasaje y tripulación se estrelló poco después de despegar del aeropuerto Imam Jomeini de Teherán.
La televisión estatal informó de que el avión se había estrellado a las 6:22 horas, hora local, y que se habían enviado cuatro helicópteros y 22 ambulancias al lugar del accidente, pero que estaban luchando contra graves incendios. El avión se estrelló pocas horas después de que se produjeran los terremotos.
«El avión está en llamas, pero hemos enviado ayuda… y es posible que podamos salvar a algunos pasajeros», dijo a la televisión estatal Pirhossein Koulivand, jefe de los servicios de emergencia de Irán.
Los informes iniciales dijeron que 180 personas iban a bordo. Sin embargo, la lista ha sido revisada y se habla ahora de 170.
Los datos de vuelo del FlightRadar24 muestran que el Boeing 737 operado por Ukraine International Airlines se dirigía a Kiev pero dejó de transmitir datos poco después del despegue.
Los terremotos que ocurrieron a principios de la noche se produjeron solo horas después de que Irán realizara ataques con misiles contra las bases militares iraquíes que albergan a las tropas estadounidenses, en represalia por la muerte del general iraní Qassem Suleimani en Bagdad, según los medios de comunicación estatales iraníes.
«En la Operación Mártir Suleimani en la madrugada del miércoles, decenas de misiles tierra-tierra fueron disparados contra la base estadounidense y golpearon con éxito la base de al Asad», dijo la Guardia Revolucionaria Islámica a través de la televisión estatal, según una traducción.
El ataque fue confirmado más tarde por un portavoz del Pentágono, quien dijo que se dispararon misiles contra dos o más bases militares iraquíes donde tienen su base las fuerzas estadounidenses y de la coalición.
«Está claro que estos misiles fueron lanzados desde Irán y apuntaron al menos a dos bases militares iraquíes que albergan personal militar estadounidense y de la coalición en Al Asad e Irbil», dijo Jonathan Hoffman, asistente del Secretario de Defensa para Asuntos Públicos, en una declaración.
«Estamos trabajando en las evaluaciones iniciales de los daños de la batalla».
El martes 7 de enero por la noche, el presidente Donald Trump respondió al ataque y dijo que se está llevando a cabo una evaluación de los daños.
«¡Todo está bien! Lanzamiento de misiles desde Irán contra dos bases militares situadas en Irak. La evaluación de las bajas y los daños se está llevando a cabo ahora. Hasta ahora, ¡todo bien! Tenemos el ejército más poderoso y bien equipado del mundo, ¡con diferencia! Haré una declaración mañana por la mañana», escribió Trump en Twitter.
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