Estados Unidos ha anunciado nuevas y radicales sanciones contra Rusia y sus socios en el primer aniversario de la invasión de Ucrania.
La Administración Biden declaró el 24 de febrero que aplicaría mayores aranceles y controles a la exportación contra sectores rusos críticos con el fin de quebrar la capacidad del régimen para continuar su guerra de conquista contra Ucrania. En particular, las medidas incluyen controles a la exportación contra entidades con sede en China de las que se sabe que han ayudado a la maquinaria bélica rusa.
El presidente Joe Biden firmará hoy proclamaciones para aumentar los aranceles sobre los productos rusos importados a Estados Unidos, incluidos más de 100 metales, minerales y productos químicos rusos por un valor aproximado de 2800 millones de dólares para Rusia.
La medida también aumentará significativamente los costes de importación de aluminio fundido o moldeado en Rusia para contrarrestar el daño a la industria nacional de aluminio de Estados Unidos.
La Casa Blanca, el Departamento de Estado, el Departamento del Tesoro, el Departamento de Comercio y la Oficina del Representante de Comercio de EE. UU. participan en el esfuerzo, apuntando a la capacidad de Rusia para llevar a cabo la guerra desde diferentes ángulos. Las medidas también se tomaron en coordinación con el Grupo de los Siete (G7) países, dijo el gobierno estadounidense.
Las sanciones del Tesoro se dirigirán contra instituciones financieras y entidades de gestión de patrimonios rusas, así como contra empresarios internacionales acusados de ayudar a Rusia a compensar las pérdidas de sanciones anteriores. Las medidas del Tesoro afectan a un total de 22 personas y 83 entidades.
«La acción de hoy (…) aísla aún más a Rusia de la economía internacional y dificulta la capacidad de Rusia para obtener el capital, los materiales, la tecnología y el apoyo que sustentan su guerra contra Ucrania, que ha causado miles de muertos y millones de desplazados», dijo el Tesoro en un comunicado.
Asimismo, el Departamento de Estado ha incluido en su lista negra a más de 60 personas y entidades, incluidas las del sector de la tecnología avanzada de Rusia, en un esfuerzo por reducir la capacidad del régimen para producir el hardware y el software necesarios para las operaciones de inteligencia.
El Departamento de Estado también ha incluido en la lista negra a tres entidades relacionadas con los programas nucleares militares y civiles de Rusia.
El Departamento de Comercio, por su parte, restringirá las exportaciones a Rusia, Bielorrusia e Irán.
«Estas sanciones, controles a la exportación y aranceles forman parte de nuestros esfuerzos para imponer fuertes costes económicos adicionales a Rusia», dice una hoja informativa de la Casa Blanca sobre este asunto.
«Seguiremos trabajando con nuestros aliados y socios para utilizar todas las herramientas económicas a nuestro alcance para interrumpir la capacidad de Rusia para librar su guerra y degradar su economía con el tiempo».
La ofensiva de Estados Unidos contra Rusia se produce exactamente un año después de la invasión a gran escala de Ucrania, y justo cuando Biden se reúne hoy con los líderes del G7 para discutir los compromisos económicos mutuos y la mejor manera de contrarrestar los intentos de Rusia de eludir las sanciones internacionales.
Para ello, los líderes están trabajando en la creación de un Mecanismo de Coordinación de la Ejecución que será presidido por Estados Unidos en el primer año, y se prevé que anuncien sanciones contra 200 entidades conocidas por apoyar la guerra de Rusia.
«Esto se traducirá en la imposición de sanciones a más de 200 personas y entidades, tanto rusas como de terceros países de Europa, Asia y Oriente Medio, que apoyan los esfuerzos bélicos de Rusia», señala la hoja informativa.
«Sancionaremos a otros actores vinculados a la industria rusa de defensa y tecnología, incluidos los responsables de reabastecer las existencias rusas de artículos sancionados o de permitir la evasión de las sanciones rusas».
Asimismo, Estados Unidos tomará medidas más adelante para restringir las exportaciones a 90 empresas que se cree que apoyan el esfuerzo bélico ruso, incluidas algunas de China.
En todos los casos, dijo la Casa Blanca, las medidas económicas contra Rusia estaban siendo adaptadas para minimizar cualquier impacto potencial en los consumidores estadounidenses.
«Hoy, el Departamento de Comercio tomará varias acciones de control de exportaciones, listando cerca de 90 empresas rusas y de terceros países, incluyendo en China entre otros países, en la Lista de Entidades por participar en la evasión de sanciones y actividades de reabastecimiento en apoyo del sector de defensa de Rusia», dijo la hoja informativa.
«Estas inclusiones prohibirán a las empresas incluidas en la lista comprar artículos, como semiconductores, fabricados en Estados Unidos o con determinada tecnología o programas informáticos estadounidenses en el extranjero».
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