El mayor sindicato que representa a los oficiales del Departamento de Policía de Nueva York apoyó la campaña de reelección del presidente Donald Trump.
«Tengo 36 años en este trabajo, 21 como presidente de esta excelente organización. No puedo recordar si alguna vez hemos respaldado a un presidente de Estados Unidos en funciones hasta ahora. Así de importante es esto», dijo el 14 de agosto Patrick Lynch, presidente de la Asociación de Beneficencia de la Policía de la ciudad de Nueva York (PBA).
«Sr. presidente, estamos luchando por nuestras vidas allí afuera. No queremos que esto se extienda al resto del país», añadió Lynch. «Ahora, muchas veces la gente dice que un sindicato como el nuestro, de un grupo de las fuerzas de seguridad, brinda respaldo. No en la PBA de la ciudad de Nueva York, señor. En la PBA de Nueva York, Sr. presidente, usted gana el apoyo, y se ha ganado este apoyo. Estoy orgulloso de dárselo».
La PBA representa a 24,000 de los 36,000 oficiales de la policía de Nueva York.
El apoyo llegó cuando grupos de extrema izquierda de todo el país intensificaron los esfuerzos para desfinanciar a los departamentos de policía y demonizar las fuerzas de seguridad.
En la ciudad de Nueva York, el alcalde de extrema izquierda Bill de Blasio recortó la financiación de la policía en USD 282 millones para los años fiscales 2020 y 2021.
El alcalde promulgó una ley en julio que penaliza varias técnicas de artes marciales seguras y no violentas utilizadas por la policía en todo el país y el mundo para someter a los sujetos que se resisten. De modo que los agentes de policía tendrán que recurrir a otros métodos que suelen ser más violentos y que ponen en mayor peligro tanto a las personas que intentan detener como a los agentes, según algunos expertos.
«Vamos a devolverles su estatus», dijo Trump en el evento de apoyo en la ciudad de Nueva York. «Odio decirlo pero me lo han quitado».
«Vamos a darle a Nueva York una oportunidad real», dijo Trump. «Creo que tenemos una verdadera oportunidad de ganar Nueva York».
El apoyo llegó tras una ola de crimen y violencia nunca antes vista desde la epidemia del crack de los años noventa. Más de 320 personas fueron disparadas en las cuatro semanas que terminaron el 19 de julio, un aumento de más del 200 por ciento con respecto al mismo período del año pasado. Los asesinatos aumentaron un 24 por ciento este año en comparación con el año pasado.
La demonización de la policía en todo el país está impulsada por el movimiento Black Lives Matter y grupos extremistas como Antifa organizados horizontalmente.
Los recientes disturbios se desencadenaron por la muerte de George Floyd, quien murió bajo custodia policial hace casi 4 meses. Trump dijo que lo que le sucedió a Floyd fue terrible, pero echó la culpa a unas cuantas «manzanas podridas» al tiempo que defendía a las fuerzas policiales de todo el país como algo esencial para preservar la ley y el orden.
«Vas a tener una manzana podrida, pero puede ser solo una manzana podrida», dijo Trump el viernes. «Pero eso no significa que vayamos a cerrar nuestros departamentos de policía».
La PBA ha respaldado anteriormente a candidatos en carreras locales, incluyendo al multimillonario Mike Bloomberg para alcalde de la ciudad de Nueva York y a Andrew Cuomo para gobernador.
El presunto oponente demócrata de Trump, el exvicepresidente Joe Biden, acumuló una larga lista de apoyo, pero ninguno de un grupo importante de fuerzas de seguridad. La Asociación Nacional de Organizaciones Policiales apoyó a Trump en julio después de apoyar la candidatura de Obama-Biden en 2008 y 2012.
La campaña de Biden no respondió a una solicitud de comentarios.
Petr Svab contribuyó a este informe.
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