El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, destituyó este viernes al jefe de la Policía Federal, quien había sido designado por el ministro de Justicia, Sergio Moro, y era considerado un hombre de máxima confianza del antiguo juez.
La exoneración de Maurício Leite Valeixo fue publicada en un decreto en el Diario Oficial de la Unión (DOU).
Con más de 20 años de actuación en la corporación, Valeixo ejerció en las investigaciones de la Lava Jato en la época en la que Moro ejercía como juez de primera instancia en la mayor operación anticorrupción de la historia de Brasil.
La decisión del presidente brasileño, según varios medios, aumentó la tensión entre el mandatario y Moro, quien renunció hoy después de la destitución de Valeixo.
Moro, quien gracias a dirigir el proceso contra el expresidente Lula se convirtió en una suerte de «paladín» de la justicia, condujo la operación Lava Jato y la mayor parte de los conservadores lo recibieron como una garantía de lucha contra la corrupción cuando Bolsonaro llegó al poder y lo nombró ministro.
«Voy a comenzar a empaquetar mis cosas y a preparar mi carta de renuncia», dijo Moro a los periodistas, tras hacer un repaso de su actuación como ministro.
Según Moro, su decisión fue tomada después de que Bolsonaro destituyó «sin ninguna razón técnica» al director de la Policía Federal, que depende del Ministerio de Justicia y para la que el exjuez había exigido una plena autonomía al aceptar el cargo.
Bolsonaro pretende sustituir a Valeixo por una persona de su entorno cercano.
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