El director de la Asociación de Tenis Femenino (WTA) va a suspender las futuras comunicaciones por correo electrónico con la estrella del tenis china Peng Shuai, ya que la otrora jugadora no puede expresarse libremente, según dijo un portavoz el 27 de noviembre.
El organismo deportivo había tratado de escuchar a la exjugadora de dobles durante las últimas tres semanas.
La noticia se produjo después de que Peng formulara acusaciones de agresión sexual contra un alto funcionario chino ya retirado en un posteo el 2 de noviembre, que circuló por la muy controlada internet del país. La jugadora, de 35 años, desapareció entonces de la vista pública durante unos 20 días, antes de reaparecer en la prensa estatal china y en una videollamada con miembros del COI la semana pasada.
Steve Simon, el presidente de la WTA, dijo que le preocupa que Peng siga bajo la censura y la coacción del régimen chino, dijo el portavoz de la WTA.
«La WTA sigue preocupada por la capacidad de ella para comunicarse de forma libre, abierta y directa», se lee en una declaración, después de que el presidente se pusiera en contacto con Peng a través de «varios canales de comunicación», incluidos dos correos electrónicos a los que Peng respondió posteriormente.
«Estaba claro que sus respuestas estaban influenciadas por otros», según la declaración.
«Él [Simon] sigue profundamente preocupado por el hecho de que Peng no esté libre de la censura o la coacción, y decidió no volver a contactar por correo electrónico hasta que estuviera convencido de que sus respuestas eran propias y no eran de sus censores», dijo el portavoz.
La WTA es el primer organismo deportivo que critica públicamente a China, siendo una organización que suministra ingresos críticos a otras, como el Comité Olímpico Internacional (COI) y la NBA. Simon ha advertido que retirará los eventos de la WTA en China a menos que se garantice la seguridad de Peng, incluidos el Abierto de Wuhan y las finales de la WTA en Shenzhen, ambos programados para el próximo año.
El presidente también cuestionó la anterior llamada de 30 minutos de Peng con el COI el 21 de noviembre, durante la cual la tres veces olímpica dijo que estaba segura y bien en su casa de Beijing.
«Fue bueno ver a Peng Shuai en los videos recientes, pero no alivian ni abordan la preocupación de la WTA sobre su bienestar y su capacidad para comunicarse sin censura ni coerción», dijo una portavoz de la WTA en un correo electrónico.
El COI no publicó ninguna transcripción, ni mencionó las acusaciones de abuso sexual de Peng. En su lugar, publicó una foto de la videollamada que tuvo lugar, en la que una sonriente Peng decía estar «bien».
Human Rights Watch ha criticado al COI por colaborar con el departamento de propaganda de China en la organización de la charla con Peng. El COI no ha intervenido anteriormente en otras cuestiones de derechos humanos que empañan los Juegos Olímpicos de Invierno de Beijing, alegando que el comité debe ser neutral.
«El COI se está adentrando en aguas peligrosas», declaró el 22 de noviembre Alkan Akad, investigador de Amnistía Internacional sobre China, según Reuters. «Deben tener mucho cuidado de no participar en ningún encubrimiento de posibles violaciones de los derechos humanos».
Estados Unidos, Australia, la Unión Europea, las Naciones Unidas y Gran Bretaña han buscado pruebas de la seguridad y el bienestar de Peng. El pasado fin de semana, un grupo de feministas chinas organizó una concentración en Nueva York en apoyo de Peng.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de China dijo que «la gente debe dejar de exagerar deliberada y maliciosamente [el asunto de Peng]».
No se ha informado del paradero de Zhang Gaoli, de 75 años, que presuntamente habría obligado a Peng a mantener relaciones sexuales con él.
El exvicepresidente chino abandonó el poderoso Comité Permanente del Politburó, compuesto por siete miembros, hace unos tres años y no ha hablado públicamente sobre el incidente.
Con información de Associated Press.
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