Los residentes de California votarán el 14 de septiembre sobre la revocación del gobernador Gavin Newsom, cuyo manejo de la pandemia de COVID-19 provocó duras críticas de las pequeñas empresas y del público.
La vicegobernadora Eleni Kounalakis convocó las elecciones el 1 de julio, días después de que Newsom firmara la legislación para evitar una revisión financiera de 30 días de la revocación. La eliminación de esa etapa del proceso permitió que se acelerara la línea de tiempo de la revocación; de lo contrario, las elecciones podrían haberse convocado para octubre o noviembre.
Aunque no se supo por el momento el razonamiento para elecciones anticipadas, los partidarios de la revocación dijeron que estaban escépticos sobre la fecha seleccionada.
“Estamos empezando a ver la punta del iceberg”, dijo Anne Dunsmore, directora de campaña de Rescue California, a The Epoch Times. “Lo sorprendente de la nueva fecha es el riesgo que él está tomando. Debe saber que tiene muchos problemas».
Dunsmore dijo que sospecha que la fecha anticipada de la revocación se debe al aumento de los precios de la gasolina, las condiciones de sequía, y la próxima temporada de incendios.
«Ya sabemos que él no puede manejarlo», dijo. “Ya sabemos que él tira dinero al problema. Ya sabemos que salta demasiado pronto sin saber realmente qué es lo mejor para sus ciudadanos. Solo le preocupa la solución a corto plazo de su imagen política. No creo que vaya a sobrevivir».
Historia de la revocación
La petición para destituir al gobernador de California, Gavin Newsom superó su obstáculo final el 23 de junio, con la confirmación del principal funcionario electoral del estado de que quedaban suficientes firmas después de que los votantes tuvieran la oportunidad de retirar el apoyo a la petición.
California es uno de los 19 estados donde se permiten revocatorias, según la Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales.
Newsom fue elegido gobernador en 2018 por el margen más amplio en una carrera para gobernador desde 1950. Poco después, los críticos le dijeron a The Epoch Time que comenzaron a seguir la cobertura de noticias de los planes del gobernador de suspender la pena de muerte, cerrar cárceles, y permitir ciudades santuario.
El esfuerzo de base popular para destituir al gobernador comenzó en 2020. La iniciativa fue encabezada por Mike Netter y Orrin Heatlie, quienes formaron la Coalición Patriota de California, junto con Rescue California, encabezada por Dunsmore.
Los organizadores de la revocación le dijeron a The Epoch Times que atribuían el éxito de la campaña a la inconsistencia de Newsom con respecto a las pautas de COVID-19, incluidos los cierres y restricciones exigidos por el estado.
El director de datos del Partido Republicano de California, Cole Patterson, dijo que la motivación de los californianos para respaldar el retiro solo ha aumentado con el tiempo.
«Si bien la frustración ha ido creciendo por la incompetencia de Newsom durante un tiempo, luego de que lo vieron en el restaurante French Laundry (…) hubo un aumento de más de 500,000 firmas enviadas a los registradores durante el próximo período del informe», dijo Patterson, refiriéndose a cuando el gobernador fue fotografiado en noviembre pasado en un restaurante francés de alto nivel sentado junto a amigos. Estaba sin mascarilla ni tomando distanciamiento social, a pesar de que regularmente instaba al público a tomar tales precauciones.
Newsom se disculpó con los electores poco después del incidente.
El 29 de diciembre pasado, aproximadamente un mes después del incidente de French Laundry, Newsom estableció una «orden de permanencia en casa» adicional. Después de ese anuncio, los registradores del condado registraron un aumento de 596,721 firmas enviadas en febrero, dijo Patterson.
“El entusiasmo por la revocatoria continuó aumentando a medida que pasaba el tiempo, y los registradores del condado recibieron 327,769 firmas en los últimos días entre el 12 de marzo y la fecha límite del 17 de marzo. Entre el 1 de enero y el 17 de marzo, se recolectaron alrededor de 1.1 millones de firmas más”, dijo Patterson.
Estableciendo la fecha
La vicegobernadora dijo que sentía que la fecha establecida proporcionará suficiente tiempo para que los funcionarios se preparen para las elecciones e informen a los votantes.
«Aunque el periodo de tiempo en la que podía seleccionar una fecha era limitada, creo que hemos elegido una fecha justa y razonable para que se celebren estas elecciones», dijo Kounalakis en un comunicado. «Siempre ha sido mi intención elegir una fecha de elección que dé a los funcionarios electorales al público suficiente tiempo para garantizar una elección fluida con una amplia participación».
A principios de junio, la oficina del registrador en California fue tomada con la guardia baja cuando se le notificó que se intentaba eludir el requisito de revisión presupuestaria de 30 días.
Los funcionarios electorales escribieron una carta en respuesta a Kounalakis, suplicándole que no convocara una fecha de elección anticipada, debido a las crecientes preocupaciones financieras y logísticas.
Si bien algunas oficinas de registro temen no tener suficiente tiempo para prepararse, el Condado de Orange se ha estado preparando activamente.
“Dado que la revocación era una posibilidad, lo hemos estado planificando activamente”, dijo el registrador de OC, Neal Kelley, a The Epoch Times. El costo estimado para realizar las elecciones en el condado de Orange es de más de USD 7 millones.
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