El Comando de Operaciones Especiales de la Fuerza Aérea (AFSOC) ha dejado en tierra toda la flota de CV-22 Ospreys de Estados Unidos mientras se lleva a cabo una investigación sobre un accidente ocurrido el 29 de noviembre frente a la costa japonesa.
El teniente general Tony Bauernfeind, comandante del AFSOC, dijo en un comunicado de prensa del 6 de diciembre que había ordenado una «parada operativa» inmediata de la flota Osprey hasta que concluya la investigación sobre el accidente frente a la costa de la isla japonesa de Yakushima.
Hasta el momento, no se ha revelado públicamente ningún cronograma para la investigación ni una posible fecha de finalización.
El teniente Bauernfeind también dio a entender que la flota Osprey volvería al servicio en algún momento en el futuro.
Esto se produce a pesar del último accidente que se cobró la vida de ocho miembros del servicio y de la larga historia de accidentes de las aeronaves Osprey en todo el mundo.
Por el momento, siguen en marcha las operaciones de búsqueda y recuperación de los restos de dos militares desaparecidos tras el accidente. La Fuerza Aérea concluyó oficialmente a principios de esta semana que los ocho que se hundieron con el avión fallecieron.
«La suspensión proporcionará tiempo y espacio para una investigación exhaustiva que determine los factores causales y recomendaciones para garantizar que la flota CV-22 de la Fuerza Aérea regrese a las operaciones de vuelo», dijo el teniente general Bauernfeind.
Según el teniente general Bauernfeind, la causa subyacente del accidente en Japón aún se desconoce en este momento. Sin embargo, durante la investigación preliminar se sugirió que la causa era un «posible fallo material».
El teniente general Bauernfeind no proporcionó información adicional sobre el incidente ni sobre cuándo la flota Osprey podría regresar al servicio. Dijo que se dará a conocer cualquier nueva información.
En una declaración de prensa separada del 6 de diciembre, el Comando de Sistemas Aéreos Navales (NAVAIR) también dijo que «por extrema precaución», estaba «instituyendo un boletín de puesta a tierra para todas las variantes del V-22 Osprey» de inmediato. NAVAIR dijo que la decisión fue un resultado directo del accidente en Yakushima, y que el boletín de inmovilización fue para garantizar la seguridad de todos.
«Mientras el percance sigue bajo investigación, estamos implementando controles adicionales de mitigación de riesgos para garantizar la seguridad de nuestros miembros del servicio», dijo la agencia federal.
«La Oficina del Programa Conjunto continúa comunicándose y colaborando con todas las partes interesadas y clientes del V-22, incluidos los socios aliados».
Japón había pedido al ejército estadounidense que dejara en tierra todos los aviones Osprey que no estuvieran involucrados en operaciones de recuperación de emergencia luego del accidente de la misión de entrenamiento del 29 de noviembre. Al mismo tiempo, el alto funcionario del Ministerio de Defensa japonés, Taro Yamato, anunció que sus 14 Ospreys habían permanecido en tierra por el momento.
Los accidentes de aeronaves Osprey han afectado al ejército estadounidense durante años. Un accidente fatal en el que murieron tres personas en agosto llevó a los marines a ordenar una revisión de seguridad del avión.
La flota también quedó en tierra a principios de este año luego de otro incidente. El año pasado, AFSOC ordenó una parada temporal de su flota Osprey luego de incidentes de seguridad en los que el embrague patinó, provocando una distribución desigual de energía a los rotores.
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