El Dr. Twu Shiing-jer, uno de los máximos responsables de salud pública de Taiwán, se pronunció en contra del presunto bloqueo por parte del régimen chino en la compra de vacunas COVID-19 a la empresa alemana de biotecnología BioNTech en una entrevista exclusiva con The Epoch Times el 28 de mayo.
Twu, presidente del Centro de Desarrollo de Biotecnología de Taiwán y exministro de Salud de ese país, comparó la supuesta injerencia de la China autoritaria en la compra de vacunas por parte de Taiwán con el hecho de haber bloqueado la asistencia de ese país a la reunión anual de la Asamblea Mundial de la Salud (AMS), que comenzó esta semana. «Esto es completamente igual [que la] AMS», declaró. «China nunca se preocupa por la salud de Taiwán ni por la del mundo entero».
Esta semana, la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, hizo una declaración para confirmar la interferencia de Beijing en la compra de vacunas planeada por la democrática Taiwán, diciendo: «En cuanto a BioNTech de Alemania, estábamos cerca de completar el contrato con la planta alemana original, pero debido a la intervención de China, hasta ahora no ha habido manera de completarlo».
Antes de que el contrato pendiente se frustrara, BioNTech, al parecer, se opuso a que Taiwán utilizara la palabra «país» para describirse en un borrador de comunicado de prensa que habría anunciado el acuerdo.
Twu, que también fue director general de los Centros de Control de Enfermedades (CDC) de Taiwán, declaró: «Definitivamente, Taiwán es un país», y dijo sobre la supuesta interferencia de China en la compra de vacunas de Taiwán: «Es muy malo. Porque se trata de salud».
A pesar de la supuesta obstrucción del régimen chino a las compras de vacunas previstas por Taiwán a BioNTech, Taiwán está recibiendo envíos de vacunas compradas a la empresa estadounidense Moderna y a la británica AstraZeneca.
La empresa china Shanghai Fosun Pharmaceutical Group, que tiene un acuerdo con BioNTech para desarrollar y comercializar la vacuna de BioNTech para el mercado chino, se ha ofrecido a enviar a Taiwán vacunas fabricadas en China. Pero Twu dijo que esto no es posible, citando los motivos ulteriores de Beijing y las preocupaciones sobre la calidad de las vacunas fabricadas en China.
«Podemos evaluar qué vacuna es buena o no. Si los chinos comunistas dicen: ‘no, no deberías comprar esa vacuna que es la número uno o la segunda [mejor], deberías usar mi vacuna, y eso significa que somos ‘tongbao’ [compatriotas en mandarín] o que queremos ayudar a Taiwán’, esto es completamente erróneo, porque es manipulación política», dijo Twu. «El pueblo de Taiwán piensa en las vacunas o en controlar la situación científica y democráticamente… no podemos aceptar el ofrecimiento de vacunas malas por parte de China».
Twu también se refirió a la explotación propagandística por parte de China de un reciente aumento de los casos de COVID-19 en Taiwán. Esta semana, Zhu Fenglian, la portavoz de la Oficina de Asuntos de Taiwán del Consejo de Estado de China, describió la pandemia de COVID-19 como «furiosa» en Taiwán esta semana, a pesar de que las muertes por COVID-19 en Taiwán, una nación insular de 24 millones de habitantes, todavía suman menos de 100, más de un año después del comienzo de la pandemia.
Twu señaló que Taiwán se está tomando en serio el reciente aumento de casos y lo está gestionando científicamente.
«China intenta utilizar esta epidemia como una oportunidad, [una] oportunidad para atacar nuestro control [de la pandemia]. … Este [aumento de casos] es muy grave en Taiwán, pero si se compara con los demás países, quizá no sea tan grave. Pero como hemos estado muy bien durante casi un año y medio, de repente el aumento … en comparación con antes es más impactante para la gente de Taiwán», dijo. «Pero no creo que se pueda llamar aumento o gran brote … Creo que Taiwán puede pasar por esta epidemia tan [bien] como antes, porque estamos tratando el control de la epidemia por la ciencia, científica y democráticamente».
En cuanto a los recientes llamados de Estados Unidos y otras naciones para que se investigue el origen del COVID-19, Twu señaló los informes sobre la colusión de la Organización Mundial de la Salud con China durante la pandemia, declarando: «La OMS [Organización Mundial de la Salud] debería tener la responsabilidad de averiguar cuál es el origen del virus … La OMS no quiere saber la verdad. Solo manejan políticamente la verdad del origen de la pandemia. … Espero que todos en Taiwán y todos en el mundo entero entiendan que la OMS tiene el deber, tiene la responsabilidad de compartir una buena información sobre la epidemia, pero no lo han hecho».
En cuanto a la continua exclusión de Taiwán de la OMS y la AMS, Twu señaló los derechos humanos.
«Creo que es un fracaso de la OMS. Si no aceptan a Taiwán o invitan a Taiwán a la OMS como país miembro, eso no es bueno para los derechos humanos de Taiwán y no es bueno para los derechos humanos de todo el mundo… la OMS debería reconsiderarlo», declaró. «Taiwán es un país».
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